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"¿Podemos ser tan sólo honestos?
Estos son los requisitos.
Si crees que puedes ser mi verdadero y único amor."
-No, Seokjin, ya te he dicho que no.- Repite, por duodécima vez en la mañana, el menor, cansado ya de ser perseguido.
-Pero ¿por qué no? Por favor, Namjoon, dame una oportunidad.- Suplica el rubio.
-¡Que no!- Grita frustrado. Al mayor se le aguan los ojos por el rechazo- Jin...- .Llama con algo de pesar- Yo te quiero, pero...- Admite. No obstante, no puede acabar la frase ya que un muy ilusionado Seokjin se lanza a él en un fuerte abrazo, interrumpiéndole.
-¡Qué alivio! Pensaba que no me querías, no podría soportarlo- Dice- Por favor, Nam, confía en mí. Te juro por lo que más quiero, que eres tú, que no te haré daño. Sólo dale una oportunidad a tu hyung, ¿sí?-. Namjoon, rodando los ojos y con una tierna sonrisa, acaba accediendo.
-Está bien- Pero antes de que el pálido celebre, le advierte:- .Aunque primero tendrás que demostrarme si en verdad no estás jugando conmigo. Haré una serie de requerimientos y tendrás que seguirlos para poder ser mi novio. ¿Aceptas?- Le tiende la mano para cerrar el trato y el otro, sin dudarlo, la toma.
-Por supuesto.
"Será mejor que prometas amarme.
Y ¡maldición! Si llegas a joderme romperé tu maldita cara."
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