—Tino <<Santino>> —escucho que me hablan desde la habitación.
Inmediatamente me levanto del sillón y le digo a Donatella que me espere, camino hasta la habitación y me encuentro a Kathy cerrando de nuevo los ojos pero a una Fiorella despierta y jugando con sus manitas.
Me aproximo hasta la cama y la cargo en mis brazos. La pequeña sonríe al verme y sus bracitos me agarran del cuello.
—Tino, Tino, Tino, te quelo <<Santino, Santino, Santino, te quiero>> —canta Fiorella en mi oído al tiempo que salimos de la habitación.
Me siento en el sillón bajo la mirada expectante de Donatella.
—Ella es Fiorella —aclaro, volteo y siento en mis piernas a la niña para que vean lo linda que es.
Mi jefa abre los ojos asombrada y sonríe cuando la pequeña se esconde en mi pecho.
—Teno hame, Tino <<Tengo hambre, Santino>> —susurra en mi oído la ojidiferente-color.
—Vamos a platicar a la cocina, Donatella, es que Fiorella tiene hambre —pido y ella asiente.
Le hace una seña a sus trabajadores para que se queden en el sillón y caminamos hasta la cocina.
Abro el refrigerador y saco dos duraznos, siento a Fiorella en la encimera y le doy un salero para entretenerla.
—¿En qué estábamos?
Saco un cuchillo y un pelador de un cajón. Parto lo duraznos a la mitad, les quito el hueso, después agarro el pelador y le empiezo a quitar la cáscara.
De reojo veo que se acerca a Fiorella, la ve fijamente y le acaricia los cabellos castaño-rubios.
—Es muy linda —asiento dándole la razón—. ¿Y el padre?
Miro a Donatella a los ojos y para después contestar sin muchos detalles:
—Se murió.
—Ohhh...
—¿De quién más son las huellas? —pregunto y termino de pelar los duraznos, los meto en la licuadora y antes de comenzar a moler, cargo a Fiorella para que no se asuste con el ruido.
La abrazo y aprieto el botón, la pequeña se asusta un poco pero se abraza a mi cuello. Rápidamente se muele y apago el botón, aún con Fiorella en mis brazos busco un platito y al encontrarlo hecho la papilla en el, después tomo una cuchara pequeña de un cajón y la pongo en el plato con papilla. Siento a la niña en la encimera y le comienzo a dar la papilla.
—La otra huella no era de uno de la mafia, pero Bruce lo está investigando —comenta después de un rato.
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En la tierra como en el cielo.
Romansa«-¿Me amas? -... » ↓ [Próximamente] Tras la muerte de su esposo y siendo madre de dos pequeños, Katherine se olvida por completo de relacionarse amorosamente con alguien. No es bueno tentar al destino porque en un Jardín de niños se...