Sonrisa [Portgas D. Ace]

V. Sonrisa

Capítulo V
El chico del casillero

Coby e Ivana hablaron animadamente mientras estaban en un lugar alejado del centro de todo el caos. Sí, el chico encerrado en el casillero era Coby e Ivana lo rescató en su acto de esconderse de Luffy y su grupo.

Rápidamente ambos hicieron conexión y hablaron de distintas cosas como sus metas, sus sueños, sus propósitos y el tipo de alma gemela que tenían, ambos congeniaron muy bien ya que el chico era algo introvertido y algo cobarde cosa que le agradaba a Ivana ya que le entraban ganas de cuidarlo, ¡Aparte de que él era más bajo que ella! Dios, eso la hacía sentir tan feliz y satisfecha, ¡Desde que llegó solo había personas altas! Si ella estaba orgullosa con sus 1,70, ¡Solo encontró personas más y más altas! ¡Era ridículo!

Cuando debieron entrar a clases de nuevo y separarse, Ivana hizo un puchero refunfuñando mientras el chico reía nerviosamente mientras se rascaba la nuca, sin duda esa chica era bastante divertida, ¡Aparte de que dibujaba hermoso! Si bien al principio no se entendía por todas las líneas negras, una vez que le agregó color fue una maravilla para la vista, ¡Y ella le hizo un retrato en señal de su amistad! Cabe decir que se lo dio gratis y le dijo que no le dijera a nadie porque normalmente ella cobraba porque duh, quería volverse una artista y no iba a vivir de aire y pintar de sueños.

Con la última clase del día, Ivana se sintió refrescada y confiada, así que prestó mucha atención al profesor que le estaba haciendo clases e hizo una que otra pregunta sobre la materia ya que no entendía algunos puntos o intentaba buscar una manera más fácil de comprender lo que decía el hombre que le explicó pacientemente.

Sonriente, la chica empacó todo en su mochila y salió corriendo lejos antes de que Luffy la pusiera en su vista, ¡Pudo ver como Law intentó escapar, pero fue succionado de vuelta a la sala! Si no estuviera tan concentrada en correr, se habría reído.

Luffy es una amenaza, ¡Ese hombre le quitará el alma con lo energético, problemático, ruidoso y desordenado que era! Ya ni siquiera le importaba que él se quedara con su lápiz, ¡Ni siquiera quería saber que le hizo a ese soldado caído! Había visto por el rabillo del ojo que en el primer bloque mordisqueó la parte de atrás y en el segundo bloque se sacaba los mocos muy desinteresado en la explicación del profesor el cual terminó regañándolo por estar distraído.

Rezaba porque Luffy no se acordara que el lápiz con el que escribía era de ella, ¡No quería saber para que barbaridades lo uso!

Ah, casa, casa, ¡Solo quería llegar a Casa y encerrarse en su estudio de pintura! ¿Qué importaba comer y bañarse? ¡Solo necesitaba desestresarse con el exquisito olor a pintura frasca y el hormigueante en sus manos junto con el calor en sus mejillas mientras veía la sexy espalda tatuada de su hermoso Soulmate.

Haaa... ¡Que sexy era! Y muy atrevido, ¡Casi siempre veía sus exquisitos pectorales y esa hermosa sonrisa coqueta o feliz! Amaba su sonrisa, ¡Era la mejor del mundo! Como amaba esa cálida, atrevida, acogedora, dulce, segura y radiante sonrisa.

¡Su Soulmate era como el sol! Y estaba segura que él podría hacer cosas similares con sus brillantes poderes de fuego, porque sí, su soulmate no se estaba quemando vivo con el fuego, ¡Sino que su cuerpo entero era fuego! Fue hipnotizante.