🇩🇪 Porfavor, despierta 🇨🇦

-Por Favor... Vuelve -

[1er. Dia en estado de coma]

En la habitación color blanco inundaba el silencio, se escuchaba la tristeza y se sentia la desesperación.
El joven de cabellos rojos lloraba amargamente anhelando el despertar de su marido, se sentía culpable de aquello que no lo hacía despertar, gruesas lagrimas no dejaban de salir de sus ojos miel asi como suabes sollozos de sus rosados labios,el dolor era fuerte, no solo por el estado en el que estaba, si no la preocupación de que nunca despertará, en su mente ya había imaginado un mundo sin su pareja, eso solo lo destruía más.
Ademas de aquellos ligeros sollozos solo se eschuba el - Bip- de aquel electrocardiograma donde estaba conectado el alemán, no era un pulso bajo, estaba realmente estable con eso, lo único grave fue que habia perdido una gran cantidad de sangre por lo que habia necesitado una transfusión.
Le dolia, le dolia demaciado, y es que joder necesitaba ver esos ojos olivo de nuevo y escuchar su gruesa voz diciéndole cuanto lo amaba.

Las horas pasaban y Canadá no se alejaba ni un segundo del cuerpo dormido de su amado esposo, acariciaba con suavidad su mano pasando por encima de su anillo con el que unieron sus vidas, los sollozos y las lagrimas habian parado, se encontraba en un estado más tranquilo pero eso no quitaba el gran dolor que sentía, de apoco fue quedandose dormido aun sin soltar el agarre con la mano contraria.

[2do día en estado de coma]

El canadiense comenzaba a despertar con la poca luz del sol que entraba de la ventana de aquella blanca habitación.

-Buenos días cariño- hablo con esperanza de una respuesta la cual nunca llegó.

Nuevamente los ojos miel del pelirrojo se nublaron de lágrimas, esta vez pequeñas y delgadas lagrimas que dejo salir sin preocupación.
Tenia hambre asi que salio en busca de alguna máquina expendedora para conseguir alimento; se negaba a salir del hospital, por mas que los odiara no dejaría solo alemán, consiguió su objetivo, lo único que compró fueron unas galletas y leche de chocolate, podria sentir hambre pero la tristeza no lo dejaba comer demaciado, le daba náuseas.

Camino devuelta a la habitación, en el camino hablo con su hermano mayor americano contándole lo sucedido, asi como al amigo ruso de Alemania, sabia que no podría estarar al 100% con el, tiene que manejar su territorio y ayudar con el de su dormida pareja, seria difícil mas no imposible.
La noticia tomo por sorpresa a los receptores de ella, por lo que el día de hoy no podrían ir a ayudarlo, asi que estaría solo de nuevo.

Ya en el interior de la habitación y con su "alimento" terminado tomo la misma posición, se sentó en aquella silla incomoda, se acercó a la camilla y tomo la mano nuevamente de su amado.

-Por Favor... Despierta - hablo para volver a nublar su mirada y desprender sollozos llenos de tristeza.

Así fue el resto del día.

[3er día en estado de coma]

El bipido del electrocardiograma era el único ruido alto del lugar, si se presta atención se podría escuchar la respiración de ambos jóvenes, eran suaves y calmadas, ya tenia horas que el sol se habia asomado, pero Canadá estaba realmente cansado, su cabeza lo mataba, le habia llorado casi toda la noche a su pareja, había estado sentado largas horas y no es que no tuviera un sillón para dormir, era simplemente que no quería alejarse del alemán dormido.

Repentinamente la puerta de la habitación fue abierta dejando entrar al hermano mayor americano del de rayas bicolor, debia admitir que el estado en el que veia a su hermanito no lo hacia nada feliz, sabia que sufría y eso no era algo que mereciera, no era algo que la pareja mereciera.
Con calma se acercó a despertar a su hermano para darle un té con leche y bastante azucar, tal y como le gustaban, cuando desperto pudo observar los ojos rojos e inchados del menor, el americano no era bueno con las palabras, no sabia que decir y honestamente ni siquiera sabia como actuar, jamas estuvo en una situación similar, le entrego aquel té a su hermano el cual gustoso lo aceptó y tomo con calma.