Atreves del tiempo.

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17 de Febrero -2007

El primer día del evento entre escuelas había sido agotador, y diez minutos para la media noche se había dado como ganar a Tokio, aunque faltaba aun el enfrentamiento individual la escuela local ya contaba con demasiado ventaja.

-Yo creo que hoy estabas un poco desafinada, Utahime. Quizás por eso se te escapo esa última maldición- le molesta Gojo mientras Shoko detenía a su amiga para que no gastara su tiempo discutiendo con el peliblanco- Deberías vocalizar antes.

-Para la próxima me asegurare de reventar tus tímpanos, ¿Te parece?

-No llegaras ni acercarte- le saco la lengua.

-Utahime, ¿Me acompañas un momento?- llego el maestro Yaga con el rostro serio a pesar de que alumnos habían conseguido la victoria.

La azabache lo sigue sin chistar perdiéndose entre el bosque junto al gran hombre, dejando a todo el grupo atrás.

Casi una hora había pasado desde que Utahime se había ido en compañía de Yaga sensei y Shoko estaba algo preocupada por aquello, cuando quiso caminar en dirección de la oficina de su profesor llego Ijichi comentando que ya todos debían irse a dormir dado lo tarde que era y que la reunión en la que se encontraba Utahime duraría un tiempo más, sumando que no estaba sola con Yaga sino que también estaba presente Yoshinobu.

-La ha de estar regañando- comento la castaña preocupada mientras apagaba su cigarrillo –Ese anciano siempre tan exigente con ella.

-¿Y porque estaría presente Yaga sensei también?- pregunto Geto mientras le quitaba el cigarrillo a punto de apagar a la castaña para darle una última calada por el frio que hacia- Yo creo que puede ser cualquier cosa, mejor mañana le preguntas.

-No se preocupen por la debilucha, seguramente está lloriqueando que la batalla no fue justa, ustedes saben cuánto le encanta reclamar.-expresa el peliblanco restándole importancia a la ausencia de la azabache- Mejor vamos a dormir o mejor aún- tomo por los hombros a sus amigos- Vamos a comer alguna cosa, aprovechemos que los adultos están ocupados y escapemos un rato.

-No lo sé...- comenzó la castaña.

-No seas aguafiestas – siguió Gojo- Solo es un rato, además Utahime es grande puede cuidarse sola.

-Claro que si- Geto avivo la idea de su amigo- Escuche que hay una feria artesanal de invierno por aquí cerca, en una de esas encuentras cigarreras lindas.

-Puede ser...- de pronto Shoko recordó que el día siguiente era especial- Además tengo algo importante que comprar, ok iremos, pero solo un rato.

Ambos asintieron arrastrándola con ellos, mientras Ijichi entraba en un colapso nervioso por la poca obediencia de sus senpai, siendo calmado por Nanami cuyas palabra fueron que los dejara ser, después de todo no sería el a quien regañarían.

El paseo claramente no había sido solo un rato, fue a eso de las tres de la mañana y con una lluvia estrepitosa que Gojo, Geto y Shoko llegaron devuelta a la escuela, todas las luces se encontraban apagadas por lo que decidieron hacer el menor ruido posible y hacer como si fueran los alumnos obedientes que Yaga esperaba que fueran.


18 de Febrero- 2007.

Ya estaban todos reunidos para comenzar armar las parejas que se enfrentarían para el segundo día del evento, pero de Utahime aún no se veía ni el polvo; eso hasta que apareció diez minutos antes del evento con una apariencia totalmente extraña para lo que acostumbraban a ver. Tenía unos leggins negros, una sudadera azul oscuro y el cabello desordenado en una coleta alta echa de manera improvisada, su rostro tenía ojeras y podían jurar que sus ojos estaban un poco hinchados.

Entre Vendas y Listones. (Serie de One Shots)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora