Lo Inalcanzable » m.j (#LI1)

Capítulo 44

Voten y comenten, se los agradecería muchísimo<3
Psdt: esa canción me deprime alv.

(...)

No iba a negarlo, estaba demasiado nerviosa, ¿y cómo no? El encargado del caso me miraba serio directamente a los ojos e intentaba mantenerle la mirada lo más que podía. Una fina capa de sudor se asomaba por mi rostro. Involuntariamente, tomé un sorbo del vaso con agua que tenía a un lado de la mesa.

—¿No cree que es un poco tarde para declarar? —Me cuestiona algo burlesco y frunciendo el ceño a la vez.

Trato de tomar su pregunta con doble sentido pero no fue así; sin embargo, luzco no intimidada. O eso creo.

—Jamás es tarde para la justicia, ¿no es su lema? Contraataque con el mismo tono. Su seriedad regresa.

—Habla. Solo espero que no me estés haciendo perder el tiempo.

—Yo lo seduje —empecé de inmediato—. Lo seduje desde el primer día que llegué al instituto.

Su risa falsa me inquietó y más al decir—: Te dije que no me hagas perder el tiempo.

—¡Es la verdad! —Me exalto indignada.

—A ver si entendí —se acomoda en su asiento—. Tú, que tengo bien entendido, sufriste un trauma tras la muerte de tu mejor amigo, tuviste mil tratamientos psicológicos, varios cambios sociales como entre ellos cambio de escuela y ambiente —hace un breve pausa y se acerca a mí—, ¿vas a decir que llegaste a ese lugar, lo viste y te gustó tanto que dedujiste que debías seducirlo?

Me paralicé. Por largo un segundo me intimidó.

—Está bien. La verdad es que quise hacer un tipo venganza contra él —dije relajada y confiada en que creería esta teoría.

—¿Por qué y qué tipo de venganza?

—Simple. Yo tenía una buena reputación en todas las escuelas que estuve y esta última no era la excepción. Pero el profesor Jack-

—Ya no tiene ese titulo —me corta.

—Continúo —lo ignoré—. El profesor Jackson estaba arruinando esa reputación que tenía, enviándome a detención y llamando a mi padre.

—¿Y supongo que eso no te gustó?

—¿Usted qué cree? —Le regalo una sonrisa fingida—. Así que pensé en seducirlo y burlarme de él. Solo era eso, una venganza que yo planeé. Además, yo tenía novio, bueno algo así y-

—Nombre.

—Daniel Zellers.

—¿Es consciente de que ese joven que dice ser su novio, será testigo en contra del señor Jackson?

—¡¿Qué?! —Grité al levantarme de mi asiento. Los nervios regresaron a mí y estoy segura que el inspector podía escuchar los latidos de mi corazón.

—Como escuchó. Así que aún puede cambiar esa última parte.

—Él no tiene porq-

—Su pa-

—Claro —susurré para mí—. Inspector, él es la víctima. Lo seduje y cayó, es mi culpa. No deje que mi padre les lave el cerebro ni Daniel, no saben nada.

—Vete de aquí, niña. —Niega con la cabeza riéndose, mientras apunta algo en su libreta y apaga la videocámara.

Salgo del interrogatorio, con el corazón en la mano, rogando al cielo que me crean y que Michael esté bien pero me inquieta el hecho de que haya durado muy poco el cuestionario y más que no se haya mostrado el interés que debería.