Tom Holland
Después de haber dejado a Margot en su casa, me dirigí con el puto imbesil que había hecho llorar y lastimado a Margot, se había subido a su moto de color rojo, todavía estaba la luz del día, así que no lo podía hacer nada mientras estuvieran los rayos del puto sol apuntandolo en la cara. Así que regrese a mi apartamento, salude a Scott, mi mejor amigo, y después entré, puse el dinero que gané en mi alcancía y después me dirigí a hacerme algo de comer, había unos trozos de tocino, los cuales Frei en un sartén, le agregué pimienta y un poco de jamón, después rebane pan y lo coloqué en la tostadora. Mientras el tocino y el pan estaban listos, yo me preguntaba en qué momento me empezó a llamar la atención tanto Margot Highman, tal vez eran sus lindas piernas, que sería muy hipócrita de mi parte el negar que en cuanto la vi, deseaba tener sus piernas alrededor de mi cuello. O tal vez sus profundos ojos color azul, tocaron mi Alma de inmediato.
—Click— sonó la tostadora
Saque los panes y también serví en un plato el Tocino con jamón, mientras comía mi almuerzo, me senté en el sofá, y poco a poco me fui quedando más dormido.
(...)
Me levanté de inmediato al escuchar los ladridos de mi perrita Tessa, seguro alguien había entrado al departamento de al lado, mire mi teléfono para ver si no tenía pedidos pendientes, solo uno, a la tienda de Poppy, tenía quesurtirme, así que tomé mi mochila y salí de mi departamento.
Llgue a la tienda de Poppy, era una estupida Zapateria, pero solo era una fachada, en cuanto llegue me pasaron a la bodega, Poppy me adoraba o eso creía, era de sus proveedores favoritos
—Siempre a tiempo, Liz, dale lo que pida— dice mientras cuenta el dinero que le di
—Espere, antes de que se vaya, necesito, que me de un arma o algo así— eso último lo balbucie
—¿Un arma?, para que, tu zona es segura— dice sin darle importancia
—Uso personal— digo antes de que se vaya
Ella me miró con una sonrisa, y me susurró en mi oido—"Denegado" ahora vuelve al trabajo.
Yo agache la cabeza, me dieron la maldita droga y salí, me fui un callejón y empecé a patear un estupido tambo de basura.—¡Maldicion!— avente mi mochila, tenía varias cosas a mi favor, estaba oscureciendo y la otra vez había comprado un pasamontañas debido a mi alergia al frío, así que regresé a casa, me puse el maldito pasamontañas color café, y regresé a seguir al imbesil, había visto desde sus historias de Instagram, que estaba en una fiesta, solo tenía que ser paciente, a que terminara ebrio y manejara a casa.
(...)
Me había quedado dormido atrás del carro en donde estaba escondido, pero cuanto escuché que su moto arrancó, fui corriendo fui a mi auto, lo encendí, y empecé a seguirlo, no sabía exactamente qué le haría al hijo de puta, pero fue tan mágico que se paró en una gasolinera vacía, mierda, disfrutaré este mágico momento
Me acerqué lentamente, mientras el llenaba el tanque de su moto, el pendejo no había notado que estaba frente a él, y cuando lo hizo hasta la bolas le temblaron del susto y del miedo
—¡Mierda!, escucha, no tengo dinero, pero puedes llevarte mi moto, solo no me hagas nada por favor.
La gasolina se empezó a derramar, y yo estaba gozando esto.—Llena tus piernas de gasolina— cambie un poco la voz para que no me reconociera.
El no me hizo caso y alejo la manguera de el, cuando la iba colocar en su lugar, saqué el cuchillo de mi bolsillo.—Hazlo— murmure
Empezó a llorar como un bebé, y yo empecé a disfrutar ese momento tan mágico, por fin iba a pagar por haber tocado a Margot, saqué mi encendedor metálico, pero antes de encenderlo me quité el pasamontañas
—¿Drogas?— dice entre lágrimas y con confusión
Yo empecé a reírme un poco pero después me puse completamente serio
—¡Soy Holland!, deja de llamarme así hijo de perra— le grité en la cara.
Verlo lleno de gasolina, me dio tanta paz, por fin pagaría por lo que le hizo a Margot.—¿Recuerdas que tocaste a Margot?, hoy, pues te estuve siguiendo todo el día, creo que te mencioné algo, que has olvidado.
—Margot, Margot Highman, me vas a prender fuego por haber tocado a esa perra- quería matarlo con mis propias manos, pero me detuve.
-¡Callate!, no la vuelvas a llamar así, o te juro que te encajo el cuchillo en los ojos, ¡Cierra la puta boca estoy hablando yo!, ¡Me oíste!, ¡Oiste!
El bajo la cabeza y empezó a temblar, después asintió- Ponte de rodillas- el obedeció, y lentamente se puso de rodillas en el charco de gasolina que había
-Te dije, que lamentarnos haberla tocado, y aquí estoy, haciéndole justicia a mis palabras- abri el encendedor y una chispa de fuego ensecndio el oscuro lugar
-¡Por favor!, te suplico, te suplico que tengas piedad, por favor, no me quemes vivo, no sabia que era tu chica, no lo sabia- por el fuerte llanto no le entendía muy bien lo que decía, solo quería molerlo a golpes, pero me detuve
-Ya es tarde, ahora, arderas en el puto infierno, nos vemos ahí después- me aleje de ahí, y avente el encendedor
Arroje mi gorro al fue intenso, y los gritos de Ricky me hicieron darme cuenta de lo que había hecho, aunque no era la primera vez que mataba a alguien.
Me metí al auto antes de que todo explotara y empecé a manejar a casa, estaba un poco en shock por lo que había hecho, tal vez arrepentido, me metí a bañar para sacar todo el humo, después de una ducha, me sentí más tranquilo, me puse ropa cómoda y mientras me drogaba un poco más, recibí una video llamada de Margot, y fue ahí cuando volví a la realidad, dejé de sentirme culpable por haber asesinado a Ricky, nadie volvería tocar a Margot, y el que lo hiciera, aquel que lastimada a Margoy Highman, claramente no viviría para contarlo.
-Hola amor- le contesté con una sonrisa
-¿Estas ocupado?- su tierna voz me enloquecia, y no podía evitar sonreír cada vez que ella me miraba o me hablara.
Aunque sea por video llamada, sentía esa conexión, aunque solo la veía en mi teléfono, podía sentirla.
-Claro que no amor, ¿qué pasa?- Tome una galleta y me la metí a la boca mientras la veía.
Solo podía repetirme en la mente mientras hablaba "Soy tuyo Margot Highman".
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My poisoned boy 《Tom Holland》
Teen FictionThomas Stanley Holland, un chico con traumas psicológicos, no se sabe porque Holland terminó vendiendo drogas en callejones de Queens, el chico era un tipo tranquilo, no se metía con nadie, y nadie se metía con el, sus mejores proveedores eran los c...