Prólogo

105 7 0
                                    

Estados Unidos, los Ángeles

- mi deseo es que Sebas algún día sienta algo por mi - terminé la frase y tiré la moneda a la fuente donde piden los deseos y aunque no crea en eso de que gastando dinero en una fuente se cumpla tu deseo, no perdía nada con intentarlo y aquí estoy alejándome con mi perro de esa fuente. Espero que mi deseo se cumpla

(...)

Llegué a casa y escuché la radio de la cocina. Mamá está aquí.

Subí sin decir nada no tenía ganas de pelear

- ven Daisy - llamé a mi labradora blanca gigante cuando me senté en mi cama

Daisy es mi única amiga bueno aparte de mi mejor amiga Klei pero se preguntarán ¿y que hay de tu mamá? Bueno pues a ella ya no le importo desde que mi padre y mi hermano murieron en un accidente, pues mi madre no tuvo mejor idea que culparme a mí por el accidente. Aunque si yo no hubiese hablado mi padre y hermano estarían vivos y mi madre aún me querría

- Dios - dije limpiándome la lágrima que se deslizó por mi mejilla

Escuché los pasos de mamá acercándose a mi habitación

- Ah veo que ya estás aquí - dijo desde el umbral de la puerta yo solo asentí con la cabeza gacha - ahí está tu maleta anda fuera

- que?

- si te me vas de la casa mañana cumples 19 años y ya estás grandecita como para que yo te mantenga - terminó y se fue

No creo que algo más se ponga peor


Invisible *Cancelada* Donde viven las historias. Descúbrelo ahora