Hoy era un fresco día de verano en BT21land, el sol relucía, los pájaros cantaban y Chimmy, Tata y Mang compartían de un delicioso almuerzo a las afueras del campo. Como era costumbre, cada uno de ellos llevaba su comida favorita y una bebida para tomar. Chimmy llevó un emparedado de queso y jamón con lechuga, papas al horno y jugo de naranja para tomar; Tata optó por unos clásicos kimbaps y gaseosa de cereza.
El mayor de todos, quiso sorprender a sus amigos llevando una gran cantidad de su comida favorita para compartir, además de una lata de sprite bien fría para consumir más adelante.
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─ Mang... acaso eso es... ─ preguntó el cachorrito.
─ ¡Así es! ¡Traje pizza! ¡Y sprite! ─ respondió el mencionado, con una gran sonrisa en el rostro.
─ ¿Me invitas un poco Mang? ¡A mí! ¡A mí! Me das un pedazo? Por favor.─ Tata, al igual que Chimmy, quería probar un pedazo de la aromática pizza, aunque se sentía algo tímido para preguntarle directamente a su novio.
─ Claro Chimmy, te puedo dar un pedazo de mi pizza.─ extendió su brazo.─ Toma.
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─ Yo también quería un pedazo de tu pizza, Mang...─ susurró. Tata se sintió algo excluido al ver que Mang no le ofrecía un pedazo de su pizza, pero no dejaría que esos sentimientos arruinaran su picnic.
Pasó al rededor de media hora hasta que el mayor de todos, notó que su novio no había dicho palabra alguna.
─ Tata, te noto muy callado ¿Pasa algo?
─ No es nada Mang, no te preocupes...
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─ Bueno chicos, estuvo muy delicioso el almuerzo, comer en compañía de tus amigos definitivamente lo hace más agradable. Volveré a la casa, nos vemos en un rato, adiós~
─ ¡Adiós Chimmy!─ Despidió con una sonrisa.─ Tata, creo que sé la razón por la cual has estado tan callado.
─ Mang, lo siento mucho, no quería arruinar el picnic de hoy, es solo que...
El mencionado no lo dejó terminar, en lugar de eso, sacó un contenedor especial, donde había estado guardando más de la pizza.─ Guardé esta rebanada con extra salsa de tomate para ti Tata, porque es mi favorita.
─ Mang...
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─ ¿Sabes por qué el tomate me encanta? Porque es de un hermoso color rojo, igual que tú, mi amor.
─ ¡¡Mang!! Te amo mucho, Mang.
─ Y yo a ti mi pequeño rojito. ─ acto seguido, ambos transmitieron todo lo que sentían mediante un cálido beso.
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