El escándalo de la celebridad A y el abogado B.

Celebridad A.

Capitulo final

Dos años después:

El casting había salido del todo bien, había carpas por todas partes, carros de cafés enviados por las fansites. El ambiente era armonioso, las candelulas diluían su luz amenamente entre las guirnaldas que adornaban los alrededores, puestas para la luminosidad del recinto

Al finalizar, Wei Wuxian tuvo una interview con sus compañeros de trabajo, paso tiempo con su coprotagonista como el director le indicó y luego abordo el automóvil de su manager como estaba agendado en su itinerario.

Al entrar al auto, la Sr. Shin Mi le indicó que tenían una hora de trayecto, y que podía descansar en lo que llegaban a la estación de radio donde tendría una entrevista programada para el estreno de su nuevo drama.

Wei Wuxian estaba tan cansado que solo se vacío hacía un costado, recargó su cabeza contra la ventana del auto y las luces por afuera de las tiendas de la ciudad alumbraban de maneras indistintas su luminosidad hacía su rostro.

El cielo tronó y supuso que se acercaba la temporada de lluvias, el condado se vería atiborrado de numerosas sombrillas, a Wei Wuxian no le gustaba esta temporada, no recordaba si era por alguna cosa de su pasado o por la vivida sensación que ahogaba en su pecho, como si sintiera un soporte pesado apresar sus pulmones, apretar su corazón y sofocarlo en agonía

No lo sabía, hasta que el carro de repente se detuvo, la luz del semáforo indicaba que los transeúntes podían cruzar la calle, Wei Wuxian entre abrió los ojos cuando sintió sus pestañas húmedas. Miró disimuladamente al asiento del conductor y agradeció que Shin Mi estuviera distraída con las luces navideñas del centro, en donde ahora se encontraban.

Wei Wuxian sintió una sensación pesada, algo atrayéndolo con demasiada fuerza, él no dudo en apretar el botón para bajar las ventanas del auto, Shin Mi por poco suelta una maldición, pero Wei Wuxian no se detiene y para cuando ya es demasiado tarde, él mira hacía el otro lado de la calle

Sus pupilas se contrajeron al momento de ver el rostro con la mirada sorprendida, el joven se sacó los auriculares, las nubes salían de su boca una a una, el tierno deslice de sus labios parecía temblar

Jiang Cheng estaba al otro lado de la calle a punto de cruzar aprovechando que el semáforo seguía en rojo, Wei Wuxian no reaccionó, aunque lo deseó con todas sus fuerzas

Por qué su alma abandonó su cuerpo cuando Jiang Cheng se percató de él

Luego, todo comenzó a tomar vida a su alrededor, las personas ya no eran presencias grises que solo seguían una misma modalidad, las canciones navideñas las podía escuchar, y también pudo sentir que podía respirar tranquilamente, cuando todos los días, había tomado pastillas para la ansiedad y todo era un problema cuando caía la noche y no podía conciliar el sueño

Jiang Cheng se quedó inmóvil.

La luz verde resplandeció como un gran reflector entre los dos y fue tarde para decir algo, el auto comenzó a moverse, Wei Wuxian no despegó su mirada escuchando como si estuviera en lo más profundo del mar los reproches de su manager

Porque por fin, había podido ver una vez más el rostro de esa persona que había estado extrañando tanto.

- ¡Jiang Cheng! -

Entre las historias que más se escuchan fuera de la zona rosada, hay una que se destaca y es sobre una celebridad que salió en pleno auge de las festividades de invierno, las multitudes se aglomeraban a su alrededor, el tráfico fue el más peor de todos los tiempos.

Aquel escandalo fue uno de los que más se destacó por que nadie se esperaba que el famoso Wei Wuxian besara a otro hombre en pleno cruce.

Las noticias fueron escandalosas en esos tiempos y la gente que las recuerda se invaden de una alegría envidiosa o repudiante, nadie sabe que sucedió y donde acabó la carrera del actor, ni que sucedió con el CEO de la corporación de abogados en Florida.

Nadie puede saber qué fue lo que pasó con ambos después de aquel escándalo que protagonizaron.

FIN

Extra:

Jiang Cheng estaba petrificado cuando se reencontró con Wei Wuxian, sus manos envueltas en guantes de cuero y su cabello apegado a su nuca no disemia en lo absoluto la sudoración helada que estaba teniendo. Más, sin embargo, Wei Wuxian no lo volvió a soltar durante toda la noche en que la pasaron en su mansión. Las temporadas de trabajo en el exterior eran una pesadilla cuando comenzaban, porque sabía que algún día irremediablemente le tocaría regresar a su ciudad natal.

Pensó que estaba exagerando al tener un presentimiento muy fuerte aferrándolo a quedarse parado cuando las luces brincaron su color verdoso por toda la transacción, al alzar la mirada y dejar de escuchar el canto de Jin Ling que había presentado en su audición en la agencia de su abuelo, Jiang Cheng no esperó en lo absoluto encontrarse con Wei Wuxian de pie frente a él, ni mucho menos que lo haya besado frente a tantas personas.

Después de ese amargo beso, las lágrimas se empoderaron de sus sentimientos inquebrantables, Wei Wuxian le reclamó, gritó y lloró.

Aceptó todo eso, aceptó cualquier reproche que le diera, incluso aceptaría que se quisiera divorciar de él, pero luego, Wei Wuxian lo amo, lo abrazó y le dijo que nunca más lo volviera a dejar, Jiang Cheng aceptaría esto, lo amaría y ni una amenaza le haría alejarse nuevamente de él.

Al explicarle luego de meses de dejar todo atrás, Wei Wuxian se tomó un tiempo en meditarlo, en una ira inconmensurable quiso ir tras su suegro, pero el mismo Jiang Cheng le dijo que ahora estaba todo bien, su padre había fallecido a los tres años de haberse ido a Florida, cuando se mudó de nuevo a ese lugar, en un intento de seguirle los pasos muy de cerca y procurar que no se atreviera a faltar a su palabra de no intentar algo contra Wei Wuxian.

Wei Wuxian lo soportó durante los meses siguientes, cuando por fin pudo asimilarlo, abandonó su carrera y compró una casa en la capital de Hubei, en Wuhan, ahí se asentaron y nunca más volvieron a separarse

Jiang Cheng consiguió una licencia y pudo restablecerse en el condado, Wei Wuxian salía a pescar por las tardes y para cuando anochecía esperaba a Jiang Cheng con la cena lista.

Una noche en diciembre Wei Wuxian acurrucó a Jiang Cheng entre sus brazos y le pidió que le cantara una canción de cuna.

Jiang Cheng nunca fue bueno en el canto, ni tampoco sus habilidades eran buenas en otra materia, era casi nulo en alcanzar una nota alta, en vez de eso, tarareo una canción mientras alisaba los cabellos sedosos, encontrando canas entre los más negros

Wei Wuxian se rió y su sonido también fue cesando conforme Jiang Cheng se quedaba sin aliento, a la siguiente mañana, sus sonrisas no desaparecieron, porque ellos cumplieron su promesa de permanecer juntos hasta el último de sus días.















Huella:

Aquí un personaje ha mantenido sus recuerdos de su vida pasada. Espero que lo hayan resuelto todo queda meramente a su libre albedrío.

¡Hasta la próxima! ¡Gracias por leer!

♡〜٩( ╹▿╹ )۶〜♡