❝ Desechan a sus héroes cuando ya no les son útiles. Dicen ser buenas personas, pero tratan a sus aliados como peones en un retorcido juego de ajedrez. Les duele perder a un elemento, pero no harán mucho al respecto. Mueven las piezas a su convenien...
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Jeremy se encuentra en apuros. Acaba de comenzar la búsqueda, los protagonistas de este capítulo deben adentrarse al bosque para cumplir con su objetivo de salvación mientras Ethan tiene que lidiar con sus pensamientos negativos de venganza.
( capitulo dieciséis, el bosque )
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Estaba encadenado de manos y pies a una barra de metal. Su vista estaba algo borrosa, pues apenas estaba recobrando la conciencia; pudo ver a su alrededor una construcción en su mayoria hecha de madera descuidada con ventanas donde únicamente se podían verse los árboles.
Supuso que se encontraba en alguna de las cabañas en renta cerca del río Kenneth, las había visto en un folleto cuando llegó a Bruns, eran grandes con una vista obstruida al pueblo y con el aura del bosque; dichas cabañas en esa epoca del año no eran muy frecuentadas por el inicio del ciclo escolar y probablemente un lugar poco común pero ideal para llevar a cabo un secuestro.
Todas esas miles de cosas pasaban por la cabeza de Jeremy, el cual intentaba no pensar en su herida de bala ni en todas las cosas malas que podrían pasarle, sino en una manera de escapar.
Hizo algo de fuerza con las cadenas que lo mantenían aferrado a la barra de metal, pero lo único que hacía era dar vueltas en su propio eje, y así se dio cuenta de la presencia de Hannah Johnson en la misma posición que él, con la diferencia de que ella aún seguía inconsciente, con una cantidad preocupante de sangre brotando por diversas partes de su cuerpo.
No tuvo tiempo de preocuparse, porque el hombre misterioso entró por la puerta principal con un maletín. Jeremy fingió estar desmayado, abrió los ojos un poco para ver como el hombre misterioso abría el maletín y de él sacaba algunas armas. Iba a continuar con su tarea pero el sonido de su radio mo detuvo.
—Soldado, nuevas órdenes.
El hombre misterioso sale de la habitación mientras Jeremy escucha que Hannah comienza a despertar.
Hannah comenzó a forcejear, pero era inútil intentar zafarse debido a las cadenas que envolvían su cuerpo. Le dolía el brazo, el abdomen y la pierna y de inmediato identificó que tenía heridas en esas partes del cuerpo que sangraban sin parar.
Pensó en su situación con su narcisismo jugandole en contra, ya que en su mente era una excelente agente capacitada de SHIELD a un paso de obtener el rango más alto que podía poseer. Tenía y debía estar capacitada para enfrentar situaciones similares o peores y su excedente ego le repetía una y otra vez que con su intelecto encontraría la manera de escapar y salir victoriosa de aquel desliz.
