Capítulo 32

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La conversación con su padre ha ido peor de la que ella pensaba, no esperaba que su padre tuviera esa forma de pensar, haciendo que Denisa se plantease muchas cosas referente a su padre.

Sentadas tomando su desayuno Denisa mira fijamente a su hermana, no se puede creer que su padre no la quiera, es tan dulce, tan bonita, quien no va quererla. Tan sólo un hombre que ha vivido con sus miedos, rechazando cualquier oportunidad bonita para huir de los problemas.

Llaman a la puerta, la pequeña todo feliz sale a abrir, Denisa se asoma un poco y  es Adara.

-—Buenos días que tal Denisa.

-—Hola, bien, siéntate por favor.¿Zaira quieres que llame a Aline para que te vayas con ella al centro comercial?—  la niña todo entusiasmada le responde que si, Denisa llama a su amiga, mientras ella viste  a la pequeña llega Aline, saluda a Adara, saluda a su amiga y se lleva a la pequeña.

Ya mas tranquilas Adara mira el café, sin saber como comenzar a hablar.

-—Bueno Adara, a qué debo tu visita.

— Denisa, yo...venía a preguntarte si estarías dispuesta a que yo rompa con Dymas.

-— Si no me la juegas, quizás.

-— Lo he pensado y he averiguado que Dymas va  a un pub mucho, puedes ir hacerte la encontradiza con él, me imagino que no lo tendrás difícil para terminar en su piso.

—-Si ya, cuando estemos en su piso me acuesto con él, y ahí es cuando entras tú pones cara de me estás puniendo los cuernos montas un peliculón empezaís a discutir..bla, bla , bla... Pues no cuentes conmigo.

—-Denisa, no es fácil,  yo he pensado mucho estos días lo que estuvimos hablando, lo hago por él, pero soy una infeliz, no me encuentro a gusto a su lado, el mismo me ha dicho que lo dejemos.

-—Vaya, que guay ¿ y si te lo ha dicho por que no hablas y me ahorras de comerme yo el marrón?

-—Por que...Denisa tú no conoces a mi padre, el es recto, un hombre de palabra, si se entera que entre Dymas y yo solo hemos llegado a un acuerdo de separarnos, le dejará sin nada a Dymas y todo lo que ha logrado este tiempo, de nada le servirá. Si hacemos que corto por que me ha engañado, le convenceré para que le deje todo lo por derecho le corresponde, por favor confía en mí conozco a mi padre.

-—No se Adara, ¿por qué le va a dejar tu padre parte de las acciones de la empresa a Dymas si supuestamente te ha puesto los cuernos?

—-Por que en el contrato especifica muy claro, que por ningún motivo el podrá acceder a su parte en el empresa si hay una separación de mutuo acuerdo.

—-Madre mía, qué culebrón, pero chica que firmartes un contrato o tu sentencia de muerte.

-—No lo sé , Denisa, no lo sé, yo en esa época estaba tan enamorada de Dymas que no me importaba venderme con tal de conseguir mi propósito, que se casara conmigo.

-—¿Y ahora?

—-Ahora veo las cosas de otra manera, no lo quiero, quiero a Dantés,  por él si soy capaz de renunciar a todo para ser feliz a su lado.

—-Joder ni la obra de Romeo y Julieta acaba como la tuya.
Desde luego maja quien te lo iba a decir que cambarías así, pero mira me alegro, nunca es tarde para obtener la felicidad.

-—Denisa, se que esto te va perjudicar y mucho, por que tu padre está por medio, pero por favor deja que pase los días, yo lo aclaré todo, no quiero que cargues con una culpa que tan solo es mía.

-—No Adara, nosotras hemos sido víctimas del dinero, tanto tú como yo hemos sido niñas consentidas, mal criadas, sin escrúpulos, pero de alguna forma la vida nos ha enseñado que hay cosas más importantes a parte del dichoso dinero. Sentimientos que no estamos solas y hasta pueden comprar el amor de una persona.

-—Denisa gracias, mira este es el plan...

Denisa llama Aline para que se quede con Zaira, le explica un poco por encima lo que va hacer, su amiga todo desconfiada le aconseja que no lo haga puede ser una trampa de Adara, ella insiste que ha cambiado, le hará ese favor, los resultados ya se verán. Su amiga todo preocupada le desea suerte.

En  el pub como es habitual se encuentra Dymas tomándose  una copa con su amiga Valerie. De la nada aparece Denisa, mira para todos los lados hasta que lo localiza, se quita su abrigo dejando ver un vestido por mitad de su muslo ceñido color fusia. Caminando con su moviento de caderas ante la mirada de varios hombres, comienza a efectuar el plan que ha hablado con Adara.

-—Hola Dymas, ¿cómo estás? Hace mucho tiempo que no tengo  noticias tuyas— le pregunta sin poder apartar los ojos de Valerie, ella la mira de arriba a bajo sonriente.

—-hola Denisa-—dice el extrañado por verla allí.

-—Pues nada me han recomendado este lugar y he venido a tomarme algo y a distraerme algo, tanto trabajo me estresa. 

—-Si la verdad que si, está bien el lugar, a mi me gusta.

-—Bueno como no nos presentas, hola soy Denisa
—Yo Valerie mucho gusto— Ambas chicas se dan dos besos, Denisa se sienta en una silla mientras habla con Valerie, Dymas la mira con su ceño frundido todo cabreado.
Cansado de escuchar como Denisa no para de hablar con Valerie este decide marcharse, Denisa se despide de Valerie quedando para otra ocasión.

Montado en su coche, Dymas intenta salir pero Denisa se ha puesto delante, esta noche Denisa está agotando la paciencia de el.

—¿-Se puede saber que haces, que quieres que te mate?

-—No qué va, que me queda mucha vida todavía, anda déjame que me monte, que hace fresquito.

-—Denisa, ¿qué quieres? ¿que te dao por joderme la noche hermosa?

-— Que piropos me echas. Yo solo quería que hablásemos de nosotros. Desde luego otra tontería no se me ha podio ocurrir.

—Denisa entre tú y yo todo está hablado, por favor estoy cansado quiero irme  a mi casa.

-—Llévame contigo, quiero...y lo besa. El deseoso de esos labios los toma saboreándolos, sus cuerpos arden pero cuando va tocarla ella lo para diciendo que vayan para su casa, el sin dudarlo arranca el coche poniéndose a conducir para su casa.

Dentro de su casa, sus besos,sus caricias, ese deseo que llevan tiempo queriendo sacarlo a fuera va saliendo lentamente. Dumas le quita el vestido a ella, ella cierra sus ojos no se puede creer lo que está haciendo pero lo quiere tanto, su piel arde bajo el contacto de Dymas, su excitación va aumentando dispuesta a llegar a más cuando pasa Adara todo enfadada comienza a gritar.
Los dos se quedan de piedra, el intenta darle una explicación pero ella comienza a gritar más y más, le da un bofetón a Denisa llamándola de todo menos guapa, Dymas interviene, agarrando a Adara por las muñecas para que se tranquilice, al mismo tiempo que le dice que quiere a Denisa, ella poniéndose su vestido se le caen las lágrimas, se siente tan mal por lo que le ha hecho a Dymas que sale huyendo de allí.
Apoyada en una pared, llora desconsoladamente se acaba de enterar que en verdad Dymas la amaba, ¿pero que pasará cuando Dymas se entere que lo ha engañado para que Adara se separe de él?

No me Juzgues, Ponte en mi lugarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora