Los cuatro estaban exhaustos, después de su pequeña locura en el centro comercial en el cual no podrían pasarse por ahí por un tiempo, inmediatamente fueron al apartamento de el león y se bañaron para cambiarse y luego irse al picnic, cuando llegaron con todo lo pedido, los recibió el novio de su líder, aunque el ojiazul les dijo que no le contaran a su pareja no hizo falta porque el noto que el dueño de Leone tenía un poco de esmalte en el cabello.
Ya después de divertirse por horas, algunas batallas bey, porque no era una buena salida sin una buena batalla,se separaron los cuatro, al parecer el padre de Gingka no estaría en casa hasta en una semana por un viaje, eso significaba que Kyoya no dormiría con ellos en todo ese tiempo, era obvio que iba a quedarse en casa de su novio.
Benkei también se fue a su casa, a descansar de la locura de la mañana, y los del continente africano fueron al apartamento con sus propias llaves, hace tiempo cuando empezaron a frecuentar mucho el lugar, Kyoya les dio llaves del apartamento, a pesar de que técnicamente viven en Japón todavía no saben ubicarse muy bien, aún así siempre se pierden cuando salen ellos dos solos, así que el pelimorado o el peliverde o incluso si no están disponibles Gingka suele ir por ellos.
Así que cuando Nile finalmente se acosto en la cama, sintió como si su carga del día se hiciera más pesada y el sueño vino de inmediato.
—¿Sabes Demure? Huir de la ley debería ser considerado un deporte, estoy seguro que baje varias libras mientras corríamos. —comentó el castaño soltando una risa mientras hablaba.
—No te culpo. ¿Cuánto corrimos? 10 o 11 cuadras sumo. Y... ¡Esto no es un deporte!, ¡¿Tienes idea de los problemas en que nos pudimos haber metido?! No quiero tener antecedentes penales y tú tampoco debes tener ¡Piensa en el futuro hombre! ¡Espera a que hable con Kyoya! —le regaño Demure como una madre.
—¡Oh, por Ra! ¡Demure pareces mi madre!, míralo de esta manera, solo vamos a vivir una vez, tenemos que vivir una vida que vayamos a recordar. Y es lo que hacemos.
—Es un punto, pero aún así no quiero antecedentes penales, además si tanto quieres vivir la vida, ¡Declarate de una vez!, no tendrás otra vida para hacerlo, tú mismo lo dijiste.
—¡Ah!, ¡No puede ser Demure!, ¡¿Tu también?!, ¡¿Es que todos se fijan en eso?! —se quejó el egipcio.
—¿También?, Oh, Kyoya también lo noto ¿no? No me sorprende, disimulas bien, pero te conocemos muy bien por igual. Creo que Benkei también lo sabe.
—¡¿Benkei también?! ¡Ra, ya llévame!
—De hecho, incluso puede que Gingka también lo sepa —se carcajeó.
—¡¿Y Gingka por qué lo sabría?! —exclamó alterado el ojiesmeralda
—Porque es novio de Kyoya. —replicó el pelinegro con obviedad.
—Ahg. ¿Crees que Gingka le dirá a Masamune en caso de que sepa?
El castaño había pasado de estar alterado a preocupado, no quería que Masamune se enterara por terceros.
—No, eso definitivamente no pasará, no debes preocuparte Nile, aunque ciertamente no lo parezca por su personalidad energética y honesta, Gingka es muy bueno guardando secretos. —le aseguró el de ojos café con confianza.
—¿Es así?
—Uhum, así que no te preocupes por eso.
—Espera un momento Demure, ¿Y tú cómo rayos sabes eso? No me sorprendería si lo supiera Kyoya y es cierto que nosotros somos amigos también, pero no somos tan cercanos a él como para poder asegurar esas cosas. A menos...
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Las locuras del equipo Wild Fang [Beyblade Metal Saga]
Fanfiction-¿Que tan mal puede acabar esto? -preguntó en voz alta el de ascendencia egipcia -Pudo ser peor. -contestó Benkei -¡No digas eso, siempre pasa algo todavía peor cada vez que lo dicen! -reclamó Demure -¿Entonces llamaste a Gingka y vendrá por noso...