siempre cuenta conmigo (tsukkiyama)

Inusual día nevado

-buenos días yams- la voz aún ronca de tsukki me despertó y deseé que fuera así todos los días.
-buenos días...tsukki- le sonreí, un olor me despertó completamente- qué es ese aroma?- busque que causaba ese olor a...
-te refieres a los panqueques que prepare?- kyaa...me preparo panqueques.
-hace cuanto despertaste?- no podía evitar estar feliz.
-hace una hora atrás, quería hacerte algo para comer antes de que me vaya- es verdad, hoy deberíamos ir a la preparatoria.
-muchas gracias tsukki, comamos juntos y vamos- me levante pero él me detuvo.
-vamos?, no, voy, tu te debes quedar reposando, fue lo que te dijo el doctor, ¿verdad?- eso me dijo el doctor, la verdad no soy capaz de recordar.
-eso creo...entonces te irás?- me dolió decirlos.
-no te preocupes, volveré en la tarde para hacerte compañía, tomo mi rostro con una de sus tibias mano, acariciando con su pulgar mis pecas e involuntariamente mi corazón se volvió a poner loco.
-está bien tsukki- acepte para luego ir a despedirlo a la entrada de la casa.

Me comí los panqueques que me había preparado el rubio y tal como él lo pidió regrese a la cama, la verdad no me sentía mal, llevo días sintiéndome sano, porque el doctor me dio tanto reposo...¿mi memoria se borró?, no recuerdo exactamente lo que me dijo...busque la receta que me dio, me aliste y obviamente sin que nadie supiera, me dirigí al hospital a buscar los remedios.

El cielo estaba pintado de blanco, esto por causa de las nubes que por sí solas pronosticaban un día nevado, razón por la que me vestí lo más abrigado que pude. Al llegar al hospital me dirigí al sector donde se retiran los remedios, quien me atendió fue una farmacéutica.
-buenos días joven, viene a retirar?- asentí para después pasarle la receta, por una extraña razón su rostro cambió de serenidad a ¿preocupación?
-hay algo malo?- no pude evitar consultar.
-no es nada...¿el doctor te explico bien cómo seguir el tratamiento?, ¿estos remedios son para ti?- realmente quería entender todas las preguntas, pero no lo logré.
-si, estoy enfermo- ahora su expresión era de lástima.
-porque no te internaste?- internarme?
-debería?- realmente estoy confundido.
-si, digo para combatir una_____***-qué?...fui incapaz de reconocer lo que ella decía.
-lo siento, podría darme el medicamento, tengo que irme a un lado- porque esta señora parece enfadada?
-ni siquiera deberías salir, trata de no estar en contacto con el frío, esta no es una enfermedad común, te debilita demasiado, te sientes bien porque es solo el inicio, pero deberías hacerme caso e internarte lo antes posible- seguía comentando cosas sin sentido para mi...cuando tuvo los medicamentos en una bolsa de papel me lo entrego para después pedir el número de celular de mi madre, estaba tan confundido que ni siquiera dudé en dárselo.
-intente estar más en contacto con su doctor- fue lo último que escuche de su parte antes de salir de la sala...la visita más extraña al hospital que e tenido en toda mi vida.

Mi tarde fue bastante común, luego de la extraña visita al hospital, llegue a mi casa e intente llamar a mamá como todas los días a esa hora, pero extrañamente hoy no contesto.
-tal vez está muy ocupada- me convencí y me fui a la cocina a prepararme algo de comer.

La hora pasaba muy lento para mi gusto, tsukki me dijo que vendría, pero aún no llega y ya debió salir hace ya bastante tiempo. El timbre me saco de mi preocupación, rápidamente fui a la puerta con la esperanza de encontrarme al rubio del otro lado, pero al abrir estaba-
-porque no me llamaste yams?- terushima se veía agitado, parece que corrió.
-lo siento terushima- me disculpe y rápidamente las palabras de tsukki llegaron a mi mente.
-Yamaguchi?...que sucede?- al parecer fui muy obvio.
-no es nada- mentí- pero Justo ahora iba a hacer algo muy importante, así que...- le di una indirecta, mi corazón dolió.
-ouh, claro...en ese caso me voy, te escribiré luego- dijo mientras se retiraba con una caja entre sus manos, se detuvo- se me olvidaba, te traje un de pastel de fresas, pensé que podríamo...podrías comerlo, comer hace feliz a la gente- me sonrió forzadamente para pasarme la caja.
-muchas gracias terushima...por todo- sentí la despedida, la sentiste tú también...terushima?

-hola yams- el rubio se asomó por la puerta luego de que abriera.
-me tenías preocupado...tsukki- no mentía, ya debía haber salido hace un poco más de tres horas.
-lo siento, lo siento...es solo que pase a comprar unas cosas- se disculpo y luego me mostró las bolsas en sus manos.
-qué son?- pregunte realmente interesado.
-ya verás, abrígate muy bien porque saldremos-.

Cuando estuve listo tsukki me pidió que buscara una manta y salimos. El frío era muy notorio y mis articulaciones dolían, pero la motivación de tsukki para que salgamos...lo valía definitivamente.
-por que sonríes?- preguntó el rubio cuando me descubrió.
-esto me hace feliz- fui sincero, el también sonrió y un calor extraño se esparció por mi cuerpo.
-vamos- agarro mi muñeca y me guío.

Llegamos al parque central de la ciudad, me dijo que cerrara los ojos y el me avisaría cuando estuviera listo.
-puedes abrirlos ahora- escuche su voz, inmediatamente los abrí para encontrarme con un pícnic, estaba la manta y un montón de golosinas.
-tsukki- realmente no tenía nada más que decir, tome toda la valentía del mundo y me lancé a su cintura, ambos caímos sobre la manta, y escuche su risa en primer plano, el sonido atravesaba su pecho hasta mi oído pegado a este.
-disfruta, Yamaguchi- sentí su mano sobre mi cabello una vez más y el calor se hacía cada vez más notorio dentro de mi.

Comimos las golosinas, no pudimos con todo pero comimos bien.
-mira Yamaguchi- tsukki apuntaba al pasto que nos rodeaba- está nevando...levántate para guardar las cosas antes que se mojen- rápidamente reaccione y me levante ayudando a tsukki a poner las cosas a salvo bajo el techo de un juego infantil que se encontraba cerca.
-qué hacemos ahora?- la nariz del rubio se había puesto roja, también la mía.
-no lo se...mira ya todo está nevado- el piso estaba terminando de volverse completamente blanco.
-ven, vamos a balancearnos en los columpios- tomo mi mano y me guió corriendo a estos, quite la nieve de uno y me senté sobre este para comenzar a darme impulso...sentía una adrenalina que no es común al estar en un simple juego infantil, tal vez la sensación de la fría brisa que traía pequeños copos que se pegaban a mi rostro para luego derretirse...tsukki daba lo mejor de sí para llegar alto, hubo un momento de sincronización en el cual nuestras miradas se juntaron...y lo supe, supe que lo que sentía por tsukki iba mucho más allá de una amistad común, quería...no, deseaba a tsukki, quería tenerlo a mi lado siempre, aún así fuera la única persona para mi...sabía que yo a Tsukishima lo...
-deténte- me saco de los pensamientos el rubio.
-qué sucede- me detuve rápidamente.
-camina conmigo- no dude y mientras él caminaba yo lo seguía aún sin entender.
-avanza, atare mis cordones- ví como se agacho y seguí caminando.
-tsukki estas bien?- voltee a verlo, sentí como una bola de nieve se estrellaba contra mi rostro junto la risa de tsukki.
-caes tan fácil yams- comentó entre risas...no me quede atrás y rápidamente formé una bola de nieve y la aventé contra el.
Así pasó el rato, jugamos y reímos...juntos, creo que nunca me había sentido tan vivo, tener a tsukki disfrutando a mi lado, riéndose de cosas triviales, me hacia realmente feliz.
-ya es muy tarde, deberíamos irnos pecoso- no pude evitar quedar mirándolo asombrado, pero si sigue tratándome de esta manera, como podría yo...un mareo llego a mi de la nada que casi hace caerme de no ser porque el rubio me sostuvo.
-lo siento, me maree de la nada- intente explicarme.
-ven...súbete a mi espalda- su ofrecimiento hizo que me sonrojara.
-no es necesario tsukki- pero ya tenía al chico esperando frente a mi.
-rápido súbete- insistió, me subí a él muy avergonzado, se levanto y me acomodo a su espalda para empezar a caminar.
-eres bastante liviano para medir 1,80- sus brazos afirmaban mis piernas y sentí el calor extraño dentro de mi otra vez, pero esta vez se mezclaba un cansancio enorme.

-Yamaguchi...Yamaguchi- la voz agitada de tsukki me despertó...¡me quede dormido en los brazos de tsukki!
-perdóname tsukki- me baje lo más rápido que pude.
-no te preocupes, bueno...llegamos- es cierto, estábamos frente a la entrada de mi departamento.
-no vas a subir?- pregunte mientras sacaba las llaves de mi bolsillo.
-no...es que, iré a buscar las cosas que se nos quedaron en el parque y me iré a mi casa directo...de todas formas nos vemos mañana- y se fue rápidamente...algo era diferente, pero no pensaré en eso aún.
Subí al departamento y abrí rápido.
-porque estabas afuera con este frío? Porque no me llamaste?-esa voz?
-mamá!...¿porque lloras?-.

Muchas gracias por leer, espero que les guste, nos vemos pronto <33
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