Behind the night changes

Capítulo uno

Brighton

-Tengo el celular en mi mano, mientras que en la otra hay un tipo en la mira. No veo mis billetes Jeff.

-¡Dije que te los daría cuando el trabajo esté terminado Louis, maldita sea!- Exclamo Jeff con algo de fastidio del otro lado de la línea.

-Aun veo ceros.- respondió el ojiazul con una sonrisa ladeada en su rostro y un tono burlón- Podría tan solo dejarlo ir, tienes 10 segundos.

-Okey, Okey- Le deposita el dinero a su cuenta- ¿Feliz?

-Fue un placer haber hecho negocios con usted- había algo de adrenalina mezclada con emoción en su voz. Dicho esto, disparó, dándole a su objetivo un balazo justo en la sien.

Y la llamada se cortó.

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Muchos creían que Louis era una mala persona por "arrebatar otras vidas". No, él no era tonto, solo aceptaba los trabajos después de haber investigado sobre el individuo que le indicaban matar.

No, él no mataría a un alma inocente. Solo aceptaba el trabajo cuando sabía que la persona que recibiría el impacto de la bala era un violador, asesino psicópata, secuestrador, traficante de personas, etc. Personas verdaderamente malas.

Aunque sabía que también era un asesino, eso no lo volvía malo…¿cierto?

Sabía que no era Dios, ni verdugo, pero matar a este tipo de personas dejó de hacerlo sentir mal por las noches.

Después de todo, desde el principio tuvo una razón para iniciar con esto.

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-¡Ya llegué!- gritó Liam al entrar a la casa del castaño.

No, no vivían juntos, aunque tenía el juego de las llaves de su casa. Era básicamente como su hermano, viniendo a visitarlo y ver si estaba bien. Era una costumbre, sabia en las cosas que estaba su amigo, cómo también estaba al tanto de su "trabajo". No lo iba a negar, tenía miedo, miedo de que un día como cualquiera entre y vea a su mejor amigo sin vida tirado en el suelo, a causa de tener muchos enemigos.

Si bien ninguno de sus enemigos nunca pudieron conocer quién era ese asesino del que tanto se hablaba, ninguno conocía su rostro, mucho menos su nombre. Louis se encargaba de no dejar cabos sueltos, Louis se encargaba de hacer bien su trabajo.

Aunque...

Habían noches en las cuales Liam no podía dormir por esa razón. Por miedo a que algún día lo descubrieran y pase lo peor.

-¡Hola Payno!- habló Louis saliendo de la cocina, contento de ver a su amigo- Dime por favor que trajiste lo que te pedí, muero de hambre- tocó su panza dramáticamente y se tiró al piso actuando un falso desmayo.

Si, Louis podría ser uno de los mejores asesinos a sueldo en toda Inglaterra, incluso en el mundo. Pero por dentro él todavía seguía siendo un niño el cual necesitaban cuidar.

Aunque estaba a meses de cumplir 30, sus actitudes lo hacían ver cómo un simple adolescente de fraternidad.

Liam rodó los ojos.

-No exageres tigre. Si, te traje tu tan queridísimo pollo envuelto en bla bla bla, con todo lo demás. ¿Alguna vez me dirás por qué te gusta tanto está cosa? Literalmente siempre pides lo mismo.

Louis río por dentro, podría contarle todo, todo menos eso.

-Me gusta y ya, dame a mi precioso- el castaño se mordió el labio inferior cuando Liam le entregó la comida.

-Si tú lo dices- respondió haciéndose el despreocupado, la verdad no sabía qué pensar, tal vez solo tenía una obsesión con esa comida, ¿Verdad?

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Los Angeles

-Vamos Harry, llegaremos tarde porque tú estás hace media hora tratando de arreglarte el cabello. Si sabes que se te ve igual, ¿Cierto?

Harry le sacó la lengua al rubio y siguió arreglándose.

-¡Oh vamos, no seas infantil!- Niall se cruzó de brazos.

-Yyy, listo, ya quedo- exclamó el rizado viéndose por última vez en el espejo, satisfecho de cómo lucía.

-Al fin, hasta Merlin fue más rápido encontrado a Nemo que tú arreglandote.

-No exageres Nini- respondió el ojiverde mientras pasaba su brazo por el hombro de él nombrado.

-¿Estás nervioso?- preguntó Niall saliendo del edificio mientras caminaban a su auto.

-No, en realidad confío en ti y en que todo esto saldrá bien. ¿Cuándo hemos perdido un caso?

-En realidad la única vez fue...

Y tenía que nombrarlo, pensó Harry con algo de fastidio, no hacía su amigo, sino hacía la persona que estaba por nombrar.

-No lo digas- dijo el rizado mientras cerraba sus ojos fuertemente y negaba con su cabeza- No me lo recuerdes, por favor.

-Esta bien, lo siento- Niall se sintió algo mal por haberlo hecho, a veces olvidaba lo intranquilo que se ponía su amigo con este tema.

Por eso trataban de no tocarlo, nunca.

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El reloj de mano que utilizaba Harry marcaba las 11:30 de la mañana.

-Ese fue uno de los casos más cortos que hemos vivido nunca- Habló el rizado saliendo del juzgado.

-Te dije que ese hombre no tendría argumentos para lo que les hizo a sus clientes. Además las pruebas con videos fueron la clave de todo, ¿No que confiabas en mis experiencias más que expertas?

Niall hablaba con tanta euforia, que tan solo con escucharlo alegraba a cualquiera que haya tenido un mal día. Increíble, ¿Verdad?

-Tienes razón guapo- había un ligero tono de diversión en el ojiverde. Dicho eso le acaricio levemente su mejilla.

-¿Acaso me seduces Styles?- pregunto Niall divertido, alzando una ceja.

-Por supuesto que lo hago- respondió Harry serio.

1...
2...
3...

Los 2 estallaron en carcajadas que llenaron todo el auto.

Ellos eran así, creaban un ambiente amigable y divertido con cualquier conversación que tenían. Eran tan unidos que ni siquiera se daban cuenta de todo lo que se necesitarían si un día uno se alejaba del otro.

Pero no había que preocuparse por eso, ¿No es así?

Luego de parar sus risas Harry sacó sus manos de su panza mientras se secaba una lágrima.

Miro a Niall y le dedicó una mirada que solo él podría descifrar.

-¿Quieres esa canción cierto?- pregunto el rubio con obviedad.

-Me conoces demasiado, que miedo- Harry habló con un tono de diversión.

Su amigo le dedicó una sonrisa para luego reproducir el cd en su auto. La realidad era que cada vez que viajaban en su automóvil el rizado tenía la costumbre de escuchar esa canción.

Niall no sabía quién era el que la cantaba, ni porque a su mejor amigo le importaba tanto. Pero tampoco iba a preguntar, porque siempre obtenía la misma respuesta.

"No lo sé Nini, lo encontré por ahí y solo me gustó"

Niall no lo creía, Harry realmente no sabía mentir. Por eso investigaba a escondidas sobre eso. No era malo, ¿Cierto?