Cápitulo 3.

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                                *Deniska.*

—Quien se cree para tratarme así?  —dije furiosa azotando la puerta de mi departamento.

Tenía que distraerme, desestresarme, olvidarme de aquel tipo arrogante del bar por completo, pero antes, Fredy me otorgó una nota que no quería leer enfrente de el y me dijo  que me lo entregaba aquel imbécil, por esa razón no la quise leer en su rostro, sabría que explotaría de ira y furia y sería un volcán en erupción.

Saco la nota de mi parte delantera de mi bolso y decía lo siguiente...

"Nada pasa por casualidad, te ves hermosa cuando estás enojada, vi tu miedo hacia mi en tus ojos, el rojo y negro te quedan fabulosos, espero hacerte mía pronto, estaré más cerca de ti, de lo que te imaginas, ya me imaginé haciéndote mía"
                                            -B-

Tome una botella de ron de mi pequeña estantería, tome un vaso pequeño donde se sirve aquel licor y me estire en aquel sofá, dejando aquella nota a un lado y relajando mi cielo tenso. Aquí pase mi mayor tiempo con mi ex, el bastardo, bueno para nada, quién me quiso vender a unos extranjeros y con el dinero que gano vendiéndome, comprar más drogas.

<<Maldito hijo de puta, te odio con mi vida, te amé, te di mi corazón, te entregué mi cuerpo, mi vida y me pagas así, no sabes cuando te odio, ojalá y hubieras muerto aquella vez, pero cómo estúpida te salvé>>.

Jure no volverme a enamorarme nunca más y menos darle mi corazón alguien, cosa que me llevo años arreglar y por fin estabilizarme con un estado estable.

<<¿Por qué?, ¿por qué me hiciste tanto daño?, dime qué te hice para qué me hubieras pagado así, me drogaste, me manipulaste, me hiciste a tu manera, querías solo mi dinero y mi buen coño encima de tu pequeño y estúpida polla, eres una basura Andrey Lotty>>.

Ya estaba algo ebria, y sin darme cuenta ya me había bebido más de media botella yo sola, entre la melancolía y un corazón jodido, no me hicieron darme cuenta que ya estaba soltando lágrimas, hace mucho tiempo que no me sentía así, tan vacía, tan utilizada y tan adolorida por algo qué pasó hace mucho años atrás, empecé a sollozar más, no podía controlar mis lágrimas, salían como si hace años querían salir, pero yo les colocaba una barrerá.

La última vez que lloré de esta manera, tan incontrolable, fue cuando llegué al internado en Inglaterra, lejos de mis padres, amigos, mi familia en si, etc..., me sentía totalmente sola, aunque conocí a mi amiga Samantha, cabello rubio, ojos verdes como el pasto, piel pecosa y sus labios pequeños, pero con buena forma, era muy linda, la verdad, ella fue muy importante para mí, mientras me mantuve en el internado. Pero las suerte no nos acompañó por mucho tiempo...

Me levanté de aquel sillón, no podía ni levantarme por mi propia cuenta, tambalee al levantarme, todo mi departamento estaba oscuras y solo la luz de la luna que entraba por mi ventana era lo poco que alumbraba mi departamento. Pude sentir una presencia detrás de mi, a lo que rápido giró, no había nada, no me asuste en lo absoluto, ya qué me acostumbré a sentirme perseguida o vigilada.

Llegue a mi habitación, me deshago del vestido rojo pasión y me quedo en ropa interior de encajé, sentía que me miraban, pero no me importaba y si de verdad me estaban viendo hice un pequeño baile sensual; me quitaba la prenda muy lento, mientras daba un baile sensual frente el espejo...

<<!Mira lo que perdiste PUTOOO, perdiste el privilegio de comerte todo esto!!>>.

<<Mierda estoy muy borracha>>.

Reía como loca y daba vueltas desnuda por toda mi habitación, hasta que caigo rendida y quedo completamente dormida.

DÍA SIGUIENTE.

—Maldito dolor de cabeza, me está... —me detuve en lo absoluto.

—¿Que-que-que mierda es esto? —pregunté asustada.

Había una nota sobre mi espejo escrita con lápiz labial rojo, diciendo lo siguiente...

"Hacerte mía, será un gran placer, tener tus pechos encima de mí será más que una fantasía. Me encanta las mujeres que utilizan ropa interior de encaje, tus caderas son como un deseo que todo hombre cómo yo desea probar, esos movimientos realmente me vuelven loco. Te haré mía, cueste lo que cueste, tarde o temprano te tendré desnudando en frente de mi y diciéndome que no pare y qué te penetre con más fuerza, serás mía, de mi propiedad...
                                      -B-

—¿El mismo tipo de ayer me está acosando ahora? —me pregunté— joder, ¿cómo encontró mi dirección?, ¿cómo entró a mi departamento?, este jodido dolor de cabeza no me deja ni pensar bien; me pudo violar o algo peor, mi cabeza da muchas vueltas, necesito una pastilla, MIERDA, mis pastillas.

Eso fue lo último que dije, hasta que timbró mi timbré, me asusté y temblé de susto y si es aquel tipo y viene a degollarme? "JODER".

Rápido voy a mi peinadora, al ultimo cajón, saqué todo lo que obtenía aquel y por fin llegué a ella, la tomé con fuerza y seguían tocando mi timbré, me mordí los labios, recargué la pistola, me hice fuerte, salgo de mi habitación y con los nervios de punta acedo a abrir la puerta y pude ver que era...

To be continued.

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⏰ Última actualización: Mar 26, 2021 ⏰

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