Claudia ya se ha ido. Estamos paseando por la tienda con ropa en los brazos, Isa se ha llevado unos tejanos que le hace un culo impresionante y un vestido pegado de color gris y escotado. Yo me he llevado una camiseta blanca básica de cuello alto y un short tejano azul oscuro. Pero para la fiesta me he cogido un vestido negro pegado hasta las rodillas.
Cuando ya estamos en la cola esperando para pagar Isa se gira hacia mi.
— Que fuerte habernos encontrado a Claudia, ¿Qué te ha dicho?
— Nada del otro mundo, lo de siempre, que soy horrible que nadie me quiere y que ojalá me muera.
— ¿Enserio te ha dicho todo eso?
— No exagerada, me ha dicho...
— ¿Sabes que? No me interesa lo que te dijera, seguro que era mentira. ¡Mira tía, ya nos toca! — Me dice señalando un cajero libre.
— Oye nena me he dejado el monedero, ¿me lo pagas y te lo devuelvo cuando lleguemos a casa?
— Claro— Se dirige al cajero que por cierto, estaba buenísimo, me parece que tiene unos... veintitrés o veinticuatro. No muchos mas. Pero por muy guapo que sea, tiene pinta de descarado.— Cóbrelo todo junto por favor. — Dice abriendo el monedero.
— Claro guapa, que buena amiga ¿quieres algo mas? Porque si quieres te doy mi numero y nos vamos a tomar algo o si te apetece, mi turno acaba en veinte minutos, y si quieres, te llevo a tu casa. Y si la tarde va bien... lo que surja.— Dice de forma... ¿seductora? No sé si eso le debe de funcionar con otras chicas, pero desde luego con Isa las cosas no van así. Y me temo que la respuesta no va a ser muy agradable, lo sé porque ya hemos pasado por una situación similar.
Flashback
— Bueno chicas, ¿vais a querer algo más?
— No gracias, y, cuando puedas traernos la cuenta por favor.— Le digo al camarero del bar.
— No os preocupéis, invita la casa.— Dice el muchacho apoyándose en una silla vacía que había en la mesa en la que estamos.— ¿Puedo... sentarme?
— Si claro.— Le digo.— Nos vendrá bien compañía.
— Carla voy a ir a por el coche espérame aquí.— Asiento y veo a Isabel alejarse.
Después de cinco minutos esperando a Isa aparece con el coche blanco como la leche.
No he dialogado mucho con el chico, solo sé que se llama Lukas y que tiene veintiún años.
Me levanto de la silla y la coloco bien para poder irme al coche, pero, al levantarme noto como una mano me palmea el trasero. Me giro rápidamente y doy unos pasos hacia atrás.
— Princesas, ya que os he invitado, ¿Qué os parece pasar la tarde con un tío bueno? Pero, chicas, haber, no puedo estar con las dos a la vez. A menos que no queráis hacer un trio.— Nos dice con unos humos subidísimos. Las dos le miramos con mirada asesina. Y puedo asegurar que si la mirada matase, Lukas ya estría muerto y enterrado.
— Haber si lo entiendo. ¡Me estas diciendo que nos has pagado la merienda solo para poder llevarnos a tu cama!— Isa se ha puesto muy nerviosa y con razón. — Eres un hijo de puta, normal que nadie quiera follar contigo. ¿Me has escuchado? ¡Eres un gilipollas que no tiene corazón y solo quiere a las chicas para meterse en sus bragas! ¡Y tendrías que darme gracias de que no hable con el encargado!
— Nena, no hace falta que te pongas así. SI lo llego a saber no te invito a nada.— Se gira a mirarme.— ¿Y tu que? Te vienes conmigo o te quedas con la rancia de tu hermana.
— A quien llamas tu...— Antes de que Isabel acabe la frase le corto.— Vete a la mierda Lukas. Como me llames o me hables por Instagram o cualquier otro medio tendrás problemas.
Dicho esto las dos nos dirigimos al coche, me puse a conducir. Isabel asomaba la cabeza por la ventana y seguía insultando al chaval.
— Eres un capullo, hijo de puta, malparido, gilipollas...
Fin del flashback
— Nada mas, aunque si me hablaras como a una clienta en vez de como a un ligue te lo agradecería. Y a lo mejor te hubiera funcionado si no estuviera mi novia presente.— ¿Novia? ¿Qué dice Isabel? No me suene esta jugada...
— Perdón... No sabia que eras... Lo siento... Te veía cara de... En fin, no imaginaba que una tía tan guapa fuera bollera.
—¿Tan extraño te resulta que dos mujeres se atraigan? ¿Piensas que porque me llames guapa ya se me caen las bragas por ti? ¿O te extraña que me gusten las tías? ¿Sabes como se llama eso? ¡Homofóbico!— Fuese lo que fuese que estaba haciendo Isabel había que frenarlo, eso se le estaba yendo de las manos y había mas gente por atender en la tienda.
— Isabel cariño, habría que irse, el contador del parking sigue sumando y por el panorama, me temo que vas a tener que pagar tu.
— SI claro, vámonos. No voy a perder mas tiempo con —Mira la placa del chico.— Gabriel.
Salimos de la tienda y nos dirigimos al aparcamiento. Nos subimos al coche y no puedo evitar preguntarle.
— Isa ¿Qué has dicho sobre novias?
— Ah, nada tranquila. Era para dejarlo mal. En plan, quería que se sintiera incomodo por su propuesta, pero al escuchar su respuesta se me ha puesto la sangre negra. Pensé que debía dejarle algunas cosas claras. Perdón si te he incomodado cariño.
— Tranquila no pasa nada, pero ahora ¿podemos volver a casa? Esta noche me da a mi que van a pasar muchas cosas y nos tenemos que ir preparando.
— Claro, tienes razón, vete poniendo un sujetador sexy que esta noche te vas de caza.
— ¡Serás zorra! Bueno lo mismo te digo a ti...
Isa puso los ojos en blanco y continuo conduciendo. Llegamos a su casa y nos pusimos manos a la obra.
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Primero tu y el mundo después
RomanceConozco a Hugo desde que tengo uso de razón, y no hay otra palabra que le defina: Gilipollas. Isabel es mi mejor amiga desde hace tiempo. Me conoce a la perfección y aunque tenemos gustos distintos nos llevamos de puta madre. Ya que me conoce tan bi...