BABYGIRL - km au.

•28•

La mirada de Jimin baja donde la chica, quien no dejaba de observar el par.

-Oh, lo siento... um... Jimin ella es Hyuna, una amiga de hace años.
-Hola, un gusto- sonrió la chica e hizo una reverencia.
-Y bueno, él es...
-Soy su novio, un gusto- El pelirosa le hizo una reverencia igualmente y levantó su mirada imponiendo respeto.
-No sabía que... wow Jungkookie.

¿Jungkookie?

-No sabía que te gustaban los chicos- sonrió la chica nerviosamente.
-Um... bueno, Jimin es mi primer novio.
-Aw... ¿Les parece si vamos a beber un café? yo invito.

Jeon miró a Jimin y este asintió.

-Claro, no tengo problema.
-¡Excelente!- aplaudió la chica y tomó de la mano a Jeon -Tu y yo, tenemos que ponernos al día- la chica le guiño y llevó hacia afuera al pelinegro.

Jimin se quedó ahí viendo el par que se iba hacia la calle y soltó un suspiro molesto.

No encontraba nada de malo en una amistad de un hombre con una mujer, eso era más que normal... sin embargo, esta chica le traía mala espina.

¿Saldrá todo bien?

-¡Jungkook! Se te quedó el teléfono- le dijo Park y el pelinegro corrió hacia la habitación. Sin pensarlo dos veces, Jimin cerró la puerta de la habitación y besó contra la pared a su novio.

El beso era húmedo y apasionado.

-J-Jimin...- gimió.
-Un pequeño... spoiler de lo que esta noche podría pasar... ¿vamos?- Jimin abrió la puerta y caminó hacia afuera dejando a Jeon todo desorientado.

Ya en la cafetería, los tres se situaban en unas sillas acomodadas en círculos. Jeon le hacía cariño con el pulgar a la mano de Jimin, mientras que este lo miraba totalmente embobado.

Hyuna estaba ahí tocando el violín.

-Y... Jungkook... ¿Cuándo decidiste ser tatuador?- preguntó la hermosa chica.
-Oh... desde hace unos años... Me fui de Busan y no quería estudiar algo como que me obligue a leer- rió -sin embargo, estudié en un Instituto y me gustó como todo resultó... soy bastante bueno- sonrió tímidamente.
-¡Ves! Amo cuando sonríes con tu nariz así.

Jimin mordió su labio y le sonrió a la chica.

-¿Y cómo se conocieron ustedes dos?- preguntó esta vez Jimin.
-Éramos vecinos, luego compañeros, luego amigos hasta que Jungkookie se convirtió en mi primer beso y yo en el de él...

Oh...

Jeon bebe de su café y decide hablar.

-Y al besarnos nos dimos cuenta de que no servimos como pareja... solo fuimos amigos- sonrió Jeon y la chica asintió.
-Jungkookie siempre tuvo unos labios muy suaves, lo recuerdo bien. Recuerdo también que usaba un bálsamo labial de fresa- Hyuna sonrió cerrando sus ojos y Jimin estaba sentado sintiéndose un poco incómodo.

No me cae bien esta chica.

-¿Qué te trae por estos lados Hyuna?- carraspeó Jeon para evitar silencios incómodos.
-Oh, verdad... Bueno, me voy a casar con mi novio de muchos años y quiero que vayas. Ahora que tienes pareja, será mucho mejor. Estoy muy enamorada y casarme es uno de mis sueños, ojalá estés ahí Jungkookie-

¡Oh!

Ahora me cae bien esta chica.

Jimin no quiso llevar el tema de su trabajo porque sentía que era muy pronto. Hyuna resultó ser una chica dulce y Park se sintió mal por juzgar antes de conocerla, aunque no le gustaron ciertas expresiones de la chica.

Pero, no se puede hacer nada con eso.

Tomados de la mano, él y su novio caminaban hacia el local de tatuajes nuevamente. Jeon había olvidado su bolso y ahí estaban las llaves de su hogar.

-Perdón si Hyuna fue irrespetuosa con lo del beso y eso...
-Es pasado, Jungkook-ah... ahora soy tu presente, eso es lo que importa- sonrió el pelirosa.
-Y mi futuro igualmente- le aseguró dándole un beso en su mano.
Jeon vio la hora y suspiró al entrar al local.

Jimin era todo oídos y obviamente entró en preocupación al escuchar el suspiro que soltó su novio. Tiernamente lo abrazó por detrás y miró hacia arriba encontrándose con su mirada.

-¿Qué pasa mor?
-¿Mor?
-Como amor- rió bajito Jimin.
-Oh... Me gusta... bueno, es que ya todos se fueron y necesitaba hablar con Namjoon hyung- al decir esto, ambos entran al local vacío -Quiero ver bien mi contrato, además de pedirle perdón por esa pelea-
-Lo puedes llamar cariño.
-Sí, pero prefiero hacerlo en persona.

Jeon entró a su habitación para tatuar y comenzó a guardar las cosas restantes dentro de su bolso.

El bailarín por otro lado caminó hacia la misma habitación observando cada detalle de esta. Los cuadros de Elvis, las plantas oscuras, los pocos rayos de sol que iban quedando del día, el olor a lavanda... todo le recordaba a Jungkook.

-Me gusta este lugar- las palabras de Jimin llegaron como armonía a los oídos de Jeon, ya que el lugar era especial para él desde el día que el pelirosa entró por primera vez.
-Me gusta que te guste- sonrió.
-Esa camilla... ¿Para qué es?- preguntó alzando su pequeño dedo índice hacia la camilla mientras caminaba hacia ella.
-Para los tatuajes de espalda o cualquier tatuaje que requiera la comodidad del cliente.

El pelinegro tenía su bolso colgando del hombro y sonrió al ver como su novio se subía a la camilla.

-¿Qué haces cariño?- le dijo con una voz dulce.
-Esperando que mi novio me tatúe arriba de mi trasero... me gustaría tener una inicial ahí... ¿Qué te parece?- bromeó.
-Oh... um...
-Tienes que acercarte para ver mejor...- le guiñó pícaramente y Jeon le hizo caso.
-Bueno... así que arriba del trasero, ¿eh?- el pelinegro posó sus manos donde supuestamente iría el tatuaje -Buen lugar- sonrió.

Jimin se encontraba boca abajo de la camilla y con ojos cerrados asintió.

-Sí... exactamente... aunque...
-¿Aunque...?- le repitió.
-Me gustaría un tatuaje más... abajo...

Oh.

-¿Más abajo?- volvió a repetir las palabras del pelirosa.
-Sí... explora con tus manos Jungkook-ah...

🔞🔞🔞🔞🔞

Las manos de Jeon bajan lentamente hasta situarlas en el trasero de su novio. Su labio estaba siendo mordido por él mismo mientras que sus manos apretaban y soltaban una y otra vez. A este punto ya le estaba dando un masaje.

-Mhmm... justo ahí...- gimió.

Jeon sintió su cuerpo arder al escuchar ese gemido dulce del bailarín.

-Creo que podría sentir mejor el lugar si... te quito los pantalones...

Una sonrisa maliciosa se formó en el rostro del pelirosa y lo miró hacia arriba mientras la punta de su lengua salía entre sus labios -¿Qué estás esperando entonces?...