Presente

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En el camino a la escuela, Hyunwoo iba planeando lo que le diría al señor Yoo, cruzando sus dedos para que sus palabras funcionaran y lograra pasar desapercibido.
Su hijo en los asientos de atrás seguía meneando sus piernas de felicidad por la proximidad de su pijamada de cumpleaños.

Llegando a su primer destino, se bajó y se dirigió a bajar al niño de hoyuelos tratando de acomodar la ropa del pequeño la cual se había arrugado un poco. Lo bajó al piso, cerró la puerta del carro y camino de la mano de su hijo hacia la puerta de la escuela, animó al pequeño sonriente a adentrarse a la escuela después de darle un beso en la mejilla y sonreírle amablemente a la maestra que estaba en la puerta.
Y ahí mismo veía llegar al hombre que no dejaba de rondar en su mente, Yoo Kihyun hizo acto de presencia junto a su hijo, ambos con una sonrisa espléndida.
Ambos se saludaron con un "Buenos dias", el hijo de Yoo beso a su padre en la mejilla y un "Adiós" fue lo único que escuchó, porque al momento de voltear el niño ya se había esfumado.

- Señor Yoo, ¿podríamos hablar un poco?, claro, si es que tiene tiempo-

- Que bueno que lo menciona, también quería hablar con usted-

Ambos hombres trataron de formar una sonrisa pero sólo lograron hacer unas muecas incomodas.
Caminaron un poco, acercándose al auto del más alto y parándose frente a frente para entablar la conversación.

- ¿De que quería hablar señor Son?-

- Como sabrá, próximamente será el cumpleaños de mi hijo y él ......usted sabe, nuestros hijos se llevan muy bien y..-

- Entiendo a dónde quiere llegar, dejaré a mi hijo ir a su pijamada con una condición-

- ¿ Y cuál es esa condición?-

- Que me deje quedarme- Yoo pensó en sus palabras y trató de rectificar. -Me refiero a que nunca he dejado a mi hijo solo, y esta no será la primera vez, llevaré a mi hijo siempre y cuando pueda quedarme con él para verificar que todo esté bien.

Hyunwoo movió su cabeza en señal de asentimiento, se rascó la barbilla y sonrió.
- Le entiendo perfectamente, claro que puede estar ahí junto a su hijo, no me vendría mal de su ayuda para cuidar niños durante una alocada pijamada-
Unas pequeñas risas salieron de ambas bocas para después despedirse y tomar cada uno su camino al trabajo.

Was mine - S h o w k iDonde viven las historias. Descúbrelo ahora