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         Emma está tan destrozada, Emma es tan frágil, débil, sensible, necesita desahogarse, necesita gritar, llorar, Emma necesita su sangre derramándose, pero no lo va a hacer, no quiere caer " bajo ", no lo va a hacer porque no quiere dejarse herir tan mal para hacer eso. Aunque ya lo haya hecho, esta vez no quiere, simplemente llorará hasta dormirse
       
        Le duele tanto ver a su hermanita ser pegada por su padre, porque cada cintareada es como si fuera para ella, y Emma no quiere que su hermana sea como ella, quiere que sea feliz, que no esté mal, que sea fuerte.
         Y Emma admite que es fuerte porque está soportando esto desde ya 9 años, pero esto la hizo mal, la hizo no confiar en nadie, infeliz, reservada, hizo que Emma piense que todo lo que hace está mal, y lo más importante, la hizo tener miedo de su padre cuando en realidad tendría que confiar en él y contarle lo que hizo en el día sin ser juzgada.

       “ « — El maltrato genera maltrato. Es así, está psicológicamente demostrado, no le des más vueltas.
— ¡Pero que no es así! Imagínate, si a un niño le pegan sus padres, el cerebro del crío aprende a ser sumiso, a conformarse con lo que tiene, a callar.  ¡No va por ahí pegando gente!
— Pero luego, cuando sea padre, lo hará con sus hijos porque es el ejemplo que ha recibido por parte de su familia! »  ” Emma tiene miedo.
    
      
  

Diario de una chica cerrada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora