Era un nuevo día, Lee Minho, por primera vez en todo el curso escolar, se levantó temprano. Se encontraba ajustando los últimos detalles de su atuendo, pasándole un ligero cepillado a su cabello para desordenarlo con su mano y dejarlo más revuelto.
Era una manía que tenía, no podía explicarlo. Era algo automático y rutinario que, en realidad ya no le tomaba tanta importancia.
Ni siquiera se percataba de que lo hacía.
— Anímate Min.— sus ojos fijos en el reflejo del espejo, hablando consigo mismo.— Estamos a días de terminar con este martirio, ¡Vamos!
Suspiró, mirándose una vez más, dándose aliento con su propio silencio para retroceder en sus pasos directo a su escritorio, tomando su mochila al tiempo que escuchaba la voz de Seungmin—siendo esta amortiguada por la puerta—quien solo enunciaba un: «¡Es tarde, Seungmin! ¿¡Te estás aplicando fijador en el cabello o qué!?» Haciendo que el mencionado rodara los ojos por inercia. Acostumbraba a eso cada mañana.
— ¡Ya voy!— exclamó en respuesta mientras a paso presuroso se dirigía a la puerta.— ¿Por qué la prisa? Hyunjin ni siquiera llega temprano, para empezar.
Abriendo y cerrando tras de sí, dejando la habitación enmudecida y sumida en el silencio templado. Mientras los regaños de Seungmin se escuchaban bajando las escaleras.
Sí, un día cualquiera.

Por otra parte, con Hyunjin y Jisung no había mucha diferencia si lo ves desde el punto de vista general.
— ¡Jisung, ya vámonos!— bramó Hyunjin, impaciente, hastiado y candado de ver a su menor de un lado para otro buscando quién sabe qué.
— ¡No me iré hasta que aparezca mi amuleto de la suerte!— en algún punto de la habitación, la voz de Jisung hizo eco, llegando a los oídos de Hwang, quien entendió muy bien.
Y cayendo en cuenta de a qué amuleto se refería Han, recordando como fue que ese presente se volvió su amuleto de buena suerte.
Era día banco, o como en otros lugares le decían, San Valentín. Felix había planificado y planteado para ese día una salida en grupo, más como un tour, pero de lugares que ya han visitado.
Pero no por eso era menos romántico.
Recuerda cómo en su primera parado del recorrido, el parque central para ser exactos, en uno de los botes con forma de ganso, Jeongin casi se cae del suyo. Dónde básicamente Minho tiró de él con su ceño fruncido para reprenderle.
También cuando fueron al cine a ver una película. Entre los siete discutieron por cual ver. Sí, era absurdo, pero para ellos era importante.
¿Y cómo no? Justo ese día se estrenaban dos buenas películas, "Verdad o reto" y "Guerra de novias". La primera era de terror, consistiendo en un juego cotidiano que estaba poseído por una entidad maligna, y la segunda era una de humor, comedia, romance, sobre dos amigas de la infancia soñando con una gran boda y un vestido blanco de novia.
Entre la votación ganó la película de terror, pero no todo fue malo, ya que pudo estar aferrado al brazo de Seungmin durante toda la película.
Y finalmente la feria nocturna en celebración a ese día, donde Minho le regaló a Jisung una especie de joyería multiuso. Servía de collar como de pulsera a la vez. Tenía un sol como como dije, con empedrado sencillo pero sin quitarle lo elegante, y un grabado precioso al reverso, donde descansaban dos iniciales:
"L.M. × H. J."
Explicando que, Jisung era como un sol, porque era tan brillante que opacaba los ratos del propio sol.
Y desde aquel día un tanto insólito e inolvidable, ese pequeño obsequio se volvió el mayor tesoro de Jisung.
— ¡Hyunjin, lo encontré!
ESTÁS LEYENDO
¡ya basta lee minho!
Fanfictiontodo alfa es fuerte y dominante, de eso no hay duda, pero, ¿te has preguntado por su debilidad? veamos la debilidad de un alfa en concreto: lee minho, cuya debilidad es un lindo omega llamado han jisung. ᎒ minsung ﹝minho top ¡! jisung !¡﹞ ᎒ humor; f...