Los siguientes días nos los pasamos hablando por WhatsApp. Ginny me ayudó a elegir mi vestido.
Llegó el día del baile. Ginny me maquilló y luego fui a ponerme el vestido. Era un tono azul pastel. Me llegaba por los tobillos y tenía los tirantes descolgados. Me puse unos tacones color plata y me ricé el pelo.
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EL VESTIDO
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LOS TACONES
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EL PEINADO
Ginny: Estás impresionante.
T/N: Gracias, Ginny.
Salí de la habitación y bajé por la escalera. Al llegar abajo, me encontré a Draco.
Draco: Estás her...
Le di un beso.
T/N: Lo siento, llevó 2 semanas queriendo darte un beso.
Draco: ¿Me harías el chico más feliz del mundo dándome la mano?
T/N: Claro, bb.
Llegamos al baile y todos se nos quedaron mirando.
Draco: ¿Querés bailar?
T/N: Primero vamos a beber algo.
Draco: Ok. Voy a por unas bebidas y ahora vuelvo.
T/N: Ok. Voy a bailar con Ron que está allí solo.
Draco: Ok, bb.
Fui a donde estaba Ron. Estaba triste, sentado en una silla.
T/N: ¿Qué te pasa, Ron?
Ron: Que invité a Hermione pero no viene...
T/N: Anda, se está maquillando. Ven a bailar conmigo.
Ron: Venga, vale.
Estuvimos un rato bailando un rato y llegó Hermione.
T/N: ¡WOW! Amiga, estás hermosa.
Hermione: Gracias...
Ron: H-hermione, ¿q-quieres b-bailar?
Hermione: Claro, Ron.
Se fueron y me quedé sola con Draco. Empezó a sonar una canción lenta.
Draco: ¿Quieres bailar mi princesa?
T/N: Solo si es con mi príncipe.
Me tomó la manos y me sacó a bailar. Empezamos a bailar y se nos acercó la profesora Mc Gonagall.
Mc Gonagall: Señorita Weasley, están aquí sus padres. Desean verla.
T/N: Ok. Ahora vengo, bb.
Salí al recibidor y abracé a mis padres.
Mamá: Estás preciosa, hija. ¿Has venido con ese chico de pareja?
T/N: ¿Está detrás de mí?
Mi madre asintió. Me giré y vi a Draco de pie y apoyado en la puerta.
Papá: ¿Has venido con él? Que te he dicho de juntarte con esa familia.
T/N: Papá, no es tan malo como parece. En realidad, es un buen chico.
Mamá: Es verdad, Arthur. La niña le ha elegido a él y hay que aceptarlo.
Papá: Está bien, pero como le hagas algo a mi hija, te juro que no vuelves a ver la luz del sol.
Draco: E-entendi-dido.
Mamá: Volver ya a la fiesta, chicos.
Tomé a Draco de la mano y entramos al Gran Comedor. La profesora McGonagall se nos acercó y nos dijo que éramos los encargado de abrir el baile, según había elegido el director Dumbledore. Draco y yo asentimos y nos colocamos en el centro de la pista. Sentí cómo todas las miradas caían sobre nosotros. La música empezó a sonar y comenzamos a bailar.
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Poco después se nos unieron más parejas. Estuvimos un rato bailando hasta que se acabó la música. Fuimos todos a las mesas que teníamos asignadas y bebimos los refrescos que había sobre ellas.
Dumbledore: Este baile ha sido maravilloso, pero debe finalizar. Aprovecho para dar las gracias a la fabulosa pareja que ha abierto el último baile. Que descanséis todos bien.
Fuimos saliendo de la estancia poco a poco y Draco me acompañó hasta la puerta de mi sala común.
Draco: Nos vemos mañana en el tren, preciosa.
Me dio un pequeño beso en los labios y se fue camino a las mazmorras.
T/N: Lo mismo digo, huroncito.
Entré en la sala común y vi a Cedric tirado en el sofá.
Cedric: Ni una sola palabra, Weasley.
T/N: Vale, vale. Hasta mañana, Diggory.
Subí a mi habitación, me quité el vestido y el maquillaje y me dormí.
