Capítulo 37

2.2K 282 20
                                    


En algún lugar del mundo mágico, más concretamente encerrada en una celda estaba una persona que muchos magos categorizarían como un completo lunático, un individuo que ya no tendría cordura por los años de encierro en ese lugar resguardado por Dementores, seres nauseabundos que parecían espectros los cuales succionaban cualquier rasgo de felicidad o esperanza que podrían tener los prisioneros.

Es por eso que el número 93 solo guardaba la esperanza en sus sueños, llegar a la locura no le importaba, no cuando en su familia uno acabaría teniéndola de cualquier forma. Tal vez estar allí podría lograr que este más cuerdo que antes después de todo negativo más negativo daba positivo. Eso significaba que su locura nata más la locura de ese lugar podría llegar a algo positivo o ¿Acaso pensar eso también era símbolo de su poca cordura? No lo sabía y no quería averiguarlo.

Hoy era el día en el que los del ministerio por fin dejaban sus perfectos escritorios y revisaban si los presos seguían vivos en el lugar o si alguno había muerto, tal vez escapado pero lo último lo consideraban imposible, después de todo ¿Quién soportaría escapar con todas las criaturas inmundas del lugar? En ese sentido la persona que estaba encerrada en la celda consideraba que aún estaba bastante sana mentalmente, no se arriesgaría a semejante estupidez sin tener nada asegurado a menos que sea necesario. Sus pensamientos seguían yendo y viniendo hasta que empezó a escuchar a algunos funcionarios que se acercaban a su pequeña celda.

- Grimsditch, ¿Escuchaste que al fin se apareció el niño que vivió?

- Lo escuche Finigan, las malas lenguas dicen que él no se parece a nada de como creíamos que seria.

El niño está aquí, el niño está en el mundo mágico; no lo podía creer por fin él estaba de regreso.

- Algunos dicen que se veía bastante capacitado, otros dicen que está cerca de los Malfoy.

- No creo que sea así Grimsditch, pero si es así me pregunto qué cree que está haciendo el mocoso.

Con toda esa nueva información impactando a su cerebro no se pudo contener más y termino riendo.

- 93 ¡Cállate!

- Él está aquí, él está aquí y lo veré.

- No veras a nadie, no lo vales.

- Desgraciados se equivocan lo veré, lo puedo asegurar.

- Voldemort está muerto, ¡Repugnancia de mortifago!

- Entonces estoy de suerte porque no lo espero a él.

Eso fue todo lo que dijo hasta que golpearon sus rejas para que se callara, no le importaba estar en silencio después de todo ya hizo suficiente escandalo para su diversión ahora solo debería esperar pacientemente después de todo estuvo encerrado por mucho tiempo sin que nadie lo visitara, no era malo seguir esperando, podría soportarlo.

Tal vez ya era su locura afectándole o era sus ganas de poder ver que el mocoso estaba vivo pero en su cabeza una vos empezaba a hablarle sobre posibles planes para escapar, podría volverse esto afectar más su cordura pero lo valía, podía todo salir mal pero si estaba en Azkaban era porque en algún momento ya fue condenado.

- Saldré de aquí idiotas, ya lo verán y no los extrañare. (Grito a todo pulmón)

- ¡Cállate Black!

- Nadie me callara idiota, este lugar me esta pudriendo.

- Seguro que tu ya te estabas pudriendo antes de acabar aquí. (Grito Alguien)

- Tú no tienes nada que opinar Crouch, solo debes ver detenidamente como salgo de este lugar.

- Mirare atentamente desde estas rejas como mueres en el intento. (Dijo Barty)

En ese momento la persona que portaba el apellido Black se empezó a reír a todo pulmón, sin retenerse, sin darse cuenta que los demás ya pensaban que estaba delirando.

- Tu Barty querido veras como estaré al lado de un Lord, de un poderoso Lord. (Dijo mientras continuaba riendo)

- Nuestro Lord es el más poderoso. (Dijo Barty con una mirada de recelo)

- Sigue pensando eso desde tu andrajosa celda y pronto acabaras siendo como la suciedad de entre mis uñas. (Le grito mirándose sus sucias manos)

- 93 Silencio, algunos queremos deprimirnos hasta dormir. ( Dijo GreyBack)

El inicio de una nueva vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora