⌗ INEFABLE, fred weasley.

ᘏ oo1. andén nueve y tres cuartos ¡

maia potter.

—. . . lleno de muggles, por supuesto. . .

Harry y yo intercambiamos una mirada.

La que hablaba era una mujer regordeta, que se dirigía a cuatro chicos. Todos ellos tenían un cabello de llameante color rojo.

Cada uno de ellos empujaba un baúl, y al igual que nosotros, llevaban una lechuza.

Con el corazón en la boca seguí a Harry, quién empujaba su carrito detrás de ellos.

La mujer y los cuatro chicos se detuvieron, por lo que los imitamos quedando lo bastante cerca para escuchar lo que decían.

—Y ahora, ¿cuál es el número del andén? —dijo, quién suponía, era su madre.

—¡Nueve y tres cuartos! —dijo la voz aguda de una niña pelirroja, que iba de la mano de su madre—. Mamá, ¿no puedo ir. . ?

—No tienes edad suficiente, Ginny. Ahora estáte quieta. Muy bien, Percy, tú primero.

El que parecía el mayor de los chicos se dirigió hacia los andenes nueve y diez.

Observabamos atentos. Procurando no parpadear para no perdernos nada.

Pero justo cuando el chico llegó a la división de los dos andenes, una larga caravana de turistas pasó frente a él y, cuando se alejaron, el muchacho había desaparecido.

—Fred, eres el siguiente —dijo la madre.

—No soy Fred, soy George —dijo el chico—. ¿De verás, mujer, puedes llamarte nuestra madre? ¿No te das cuenta de que yo soy George?

—Lo siento, George, cariño.

—Estaba bromeando, soy Fred —dijo, y se alejó.

Un quejido salió de mi boca cuando sentí un leve ardor cerca de la zona del omoplato izquierdo, pero no llegue a prestarle mi atención en aquel momento.

El chico debió pasar, porque un segundo más tarde ya no estaba.

*¿Como lo había hecho?*

Su hermano gemelo iba rápidamente hacia la taquilla y luego, súbitamente, no estaba en ningúna parte. No había nadie más.

—Discúlpeme —dijo Harry a la mujer.

—Hola, queridos —dijo—. Primer año en Hogwarts, ¿no? Ron también es nuevo.

Señaló al último de sus hijos varones.

Era alto, flacucho y pecoso.