A través del libro

8.

                                                                                                                                                                  13•07•2018

Harry

Realmente no sé qué esperar de esta fiesta, por lo que se puede alcanzar a ver hay más personas en esa mansión que abejas en un panal.

-Solo vas por D.M Harry- digo internamente.

-Vaya, llegamos- digo, viendo a Hermione y a Ron.

Nos quedamos viendo lo inmensa que es esa mansión, esto me pone más nervioso de lo que debería.

-Siento como se revuelven mis entrañas por los nervios, creo que no entraré- digo en voz baja a ambos.

-No son tus entrañas, es indigestión. Harry- dice Ron en tono de burla.

Lo miro y ruedo los ojos. No ayudan.

-Y claro que entrarás ahí, no estás solo, estamos acá. Aunque realmente no sé cómo te podemos ayudar, pero da igual- me dice Hermione sin quitar la mirada de la entrada.

Creo que no me esforcé en vestirme, a comparación de Ron y Hermione.

La sabelotodo, vaya que luce bien; lleva un vestido largo color dorado, abierto de una pierna, se moldea a su figura, unos tacones y un saco que  cubre  la parte de arriba de su torso.

Yo llevo una camisa gris junto con unos jeans del mismo color y un suéter café.

Y Ron traía una camisa beige, una chamarra café y pantalones del mismo color.

Es hora de entrar. Siento que se me sale el corazón.

Cuando entramos logro notar como no solo la mansión es grande por fuera sino también por dentro. Será difícil encontrar a D.M.

Draco

Cuando veo entrar por la puerta a Harry, me da todo vueltas por la cabeza. Tal vez sea por el alcohol que he bebido, pero aun así no ha sido tanto como otras veces.

Logro encontrarlos con la mirada y veo que se dirigen hacia el pasillo, justo en donde están todos. Aún no logro recordar el por qué de que lo haya invitado; incluso no sé si le revelaré  mi identidad. En pocas palabras, no tengo nada planeado.

-¿Será muy pronto?- Digo en voz baja, para mí mismo.

De repente escucho una voz femenina detrás de mi. Astoria.

-Hola hurón.

-Vaya, luces bien- digo, mirándola

Y lo es en realidad. Lleva un pantalón negro, una blusa negra suelta e igualmente un saco negro por encima.

-Lo sé. Al menos te dignaste a aparecer mediante una fiesta; hay muchas personas, por cierto- dice mirando despectivamente a las personas que se encuentran a nuestro lado.

-Era hacer esta fiesta o quedarme sólo con Pansy por un número de días que aún no sé; con ella.

-Sí bueno, lo vale. Por cierto, tengo que contarte sobre aquel Harry Potter. Al parecer hace unos días unos amigos de él vinieron al pueblo por algo importante; algo que no es muy de su agrado.- comentó Astoria.

-¿Algo importante?

Harry

Entramos y nos dirigimos a la sala, donde todos se encontraban. ¿La casa? Gigante, pero aún así todos se encontraban en el mismo lugar.