ℕ𝕠 𝕕𝕖𝕓𝕖𝕣í𝕒𝕞𝕠𝕤 [Maylor]

Cap.

"Nadie es como tú, y ese es tu poder sobre mi"

****

La boda se decidió que fuera en casa de sus padres, esa casa llena de recuerdos alegres y unos no tanto, ahora mismo el rubio se encontraba en su antigua habitación de adolescente, misma que había sido testigo de muchas palabras de amor.

Veía su reflejo en aquel espejo frente a el, su traje blanco bien acomodado, sin arrugas, sus cabellos un poco despeinados haciéndole ver mejor que si los tuviera peinados, estaba casi perfecto para dar ese gran paso en su vida, de no ser por el moño que adornaba el cuello de su camisa azul claro, maldecia el moño ya que cada que lo enderezaba este volvía a estar chueco.

Tenía nervios acompañados de una gran alegria, después de una par de años al fin la vida le estaba sonriendo abiertamente, al fin estaría completamente unido a el amor de su vida, a ese lindo rizado que le robó los suspiros exactamente hace ocho años, ese rizado que le alegraba los días nublados, que le daba cariño cuando su madre le reprendía por alguna mala travesura que hacía, porque era verdad que a los quince años actuaba de una manera no tan madura y eso era bien sabido por el solo que le resultaba entretenido ser así, ¿Y ahora? Ya era un chico que se hacía responsable de su tierna bebé rubia, que cuidaba de alguien que dependía completamente de el, le gustaba quién había sido y le gustaba aún más quién era ahora.

La puerta de la habitación se abrió dejando entrar a su hermana menor con una sonrisa de orgullo, llegó hasta el para darle un abrazo.

-¿Está feliz? Roggie- Pregunto acomodándole un poco el rebelde moño.

-Claro que si Clare, estoy más que feliz, me siento como si hubiese ganado la loteria-

-¡Dios que emoción!- Exclamó Freddie que también se había colado a la habitación -¿Ya estás listo?, Recuerda que debes de estar lo más hermoso posible, casi igual que yo lastima que no puedas a tanto-

-Yo estoy más bonito que tú-

-No mi vida, eso quisieras-

-Freddie, déjalo ser es el día de su boda- Guiño el ojo a el rubio quien sonrió.

-Solo por eso- Apunto a el rubio con la cámara instantánea que traía consigo, tomándole una foto -... si Brian no fuera tuyo si me lo quedaba, se ve fabuloso-

-Esas no son palabras de aliento Freddie- La rubia le regaño con solo la mirada.

-Ya no importa, al fin es de Roger, tendrán su felices para siempre-

-¿Y si ese final no dura exactamente para siempre?- El rubio no se preocupo porque su inquietud fuera mostrada en su tono de voz.

-Eso no pasará roggie, ustedes no dejarán que eso suceda después de haber luchado un largo tiempo-

-Como crees niño bonito, su amor durará hasta el final de los tiempos-

-Eso espero-

En la habitacion de enfrente estaba el rizado acomodando sus cabellos, con una sonrisa de oreja a oreja, su traje negro con camisa blanca le hacía ver demasiado lindo a la vista, sus rizos sueltos pero presentables. No podía creerlo, ahora parecía que ese sufrimiento que acogió en su corazón durante años por fin era desterrado para dar bienvenida a la fortuna tomada de la mano con el amor.

-Brimi, ya debes estar abajo- Llamo su atención su padre igual ansioso por la ceremonia.

-Ahora voy papá-

-Ya apúrate, tu debes esperar a roggie en el altar- John le abrió completamente la puerta para que saliera de ahí.

-Ya es hora- Afirmó feliz.

-Ya es hora, Bri- Ambos chicos caminaron hasta el jardín de la casa, los invitados ya estaban en sus asientos, tal y como habían dicho eran pocos, solo las personas de suma confianza. Se encontraba la mamá de Brian, Jessica junto a Clara, Harold y Winifried tomados de la mano, Freddie en espera de John, Clare con su mejor amiga, Debbie con su hija en brazos junto a ella estaba Charlie rodeandole con un brazo la cintura.

Brian llegó hasta el altar, era un arco hecho de margaritas y dalias blancas. Se puso frente a este en espera de su futuro esposo, este no tardó en aparecer con una sonrisa de felicidad, caminaba junto a Winifried, llegó hasta el lugar justo de lado a su novio, ambos se vieron de frente.

-Te ves hermoso, rog-

-Tu más Brimi-

El cura que los casaría, supuestamente en contra de la iglesia carraspeo, tomo su libro y dió inicio.

-Señoras y señores, el día de hoy nos encontramos en este lugar para ver a estas dos almas unirse en una sola, en un hermoso matrimonio, os pido que se mantenga el respeto ante todo- El cura dio discursos hasta que llego el momento de los votos, primero hablo Brian con una sonrisa en los labios.

-Yo, Brian Harold May, te quiero a ti como legítimo esposo, te entrego a ti mi corazon. Prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida- Una vez que termino, fue el turno de el rubio.

-Yo, Roger Meddows Taylor, te elijo a ti como legitimo esposo y me entrego a ti. Prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, hasta el final de mi eterno amor por ti- Llego el momento de entregar los anillos.

-Recibe esta alianza en señal de mi amor y fidelidad a ti-Recito Brian mientras puso el anillo en el dedo de Roger.

-Recibe esta alianza en señal de mi interminable amor a ti- Argumento Roger y puso la argolla en el dedo de Brian.

-Ahora, si nadie se interpone en que esta unión concluya, yo los declaro marido y marido- Estafrase saco una pequeña risita en ambos jovenes-... puede besar el novio- Acercaron sus rostros lentamente hasta que sellaron el inicio de su matrimonio con un tierno beso, sus familiares y amistades apraudieron con alegría. Se separaron e instantánea miraron a los ojos ajenos, tenían un brillo más especial.

-Te amo Roger- Susurro.

-Yo te amo más Brimi-

***
Buenas noches, ¿Cómo están?

Borre la otra historia, bueno en realidad la voy a postergar, porque la verdad es un poco pesado dos historias y debo corregir y extender el contenido, pero volverá, esta historia también la corregiré en cuanto a un poco de lógica y ortografía, pero está permanecerá en la plataforma 😂.

Agradezco a Wattpad por las amigas que me he ganado aquí.

Los amo a todos.