Eres mi Alfa y yo tu Omega [EN PASUSA]

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"Al unico cielo al que sere enviado 

es cuando este a solas contigo"

A veces siento como si estuviera bajo el agua y los sonidos y gente a mi alrededor se distorsionan siendo solo un eco y siluetas a la distancia, como si no existieran, a veces es como si ni yo existiera, pero no me asusta, no es aterrador, me siento tranquilo y solo me limito a existir.

Me pasaba seguido y lo busque en internet, al parecer eso es algo parecido al efecto de las drogas, yo no me drogo.

Luego encontré en un sitio de preguntas y repuestas a alguien que describía algo similar, preguntando si era normal, varias personas respondieron que lo era, peor que solo pasa con aquellos que nacen con un destinado.

Al parecer nuestros alfas buscan percibir a la otra persona y buscan sus feromonas o algún rastro de ellas, había personas que pasaban horas en ese estado de trance esperando alguna señal de su destinado, a mi solo me llego a pasar por momentos, en lo que juraría que todo a mi alrededor se volvía gris y percibía todo pero a la vez nada, es algo extraño.

Ahora mismo me estaba pasando eso, estoy en la escuela, hora de almuerzo y solo ha pasado.

Pero es diferente a las otras veces, ahora puedo percibir algo que si es de color, parece como una especie de pequeños polvos rojos, es la esencia de (T/N).

No puedo evitarlo y mi cuerpo empieza a seguir aquel rastro de feromonas, finalmente logro verla, junto a una maquina expendedora, podía ver sus feromonas.

Ni siquiera logre acercarme cuando ella volteo a verme, luciendo sorprendida fue ella quien se acerco a mi, poniendo sus manos en mis mejillas mientras acunaba mi rostro.

- Hey Levi, porque lloras? - pregunto preocupada.

No se porque lloro, solo la abrazo y hundo mi cara en su cuello, oliendo sus feromonas para calmarme, veo como las feromonas de ambos se mezclan.

Pero parpadeo y todo vuelve a la normalidad.

Y ahora no soy un alfa abrazando a su omega.

Ahora solo soy Levi abrazando a (T/N).

- Eh, lo siento - me disculpe separándome de ella, quien aun se miraba sorprendida y confundida - solo... no se que paso.

- E-esta bien, no me molesto, pero te sientes bien? y que era esa diamantina verde que traías?

- Que?

- La diamantina, no se, la traías alrededor de ti, se te metió en los ojos y por eso llorabas?  -  pregunto mientras sacaba un pañuelo de su mochila y empezaba a limpiar mis lagrimas con cuidado - debes tener cuidado, esa mierda son como pequeños vidrios, te puedes lastimar los ojos.

- Estoy bien - sonreí un poco tomando sus muñecas para que se detuviera y me viera, que dejara de estar preocupada.

- AH? Porque sonríes psicópata? te gusta que te duelan los ojos o algo así? 

- Algo así - rei un poco.

Ella también las había visto, había visto mis feromonas y su omega había reaccionado también.

- Tsk, ven acá hare que sientas verdadero dolor y veras que no te vas a reír - intento darme una patada en la pierna pero me moví.

Así siguió intentándolo, hasta que logro darme, pero pateo mal y se lastimo a ella también, me reí de eso.

- Ven aquí bastardo te pateare hasta la muerte! - grito yendo detrás de mi mientras cojeaba.

Nuestros lobos ya se habían reconocido, solo quedaba que ella lo hiciera.