Entre Vendas y Listones. (Serie de One Shots)

Una Chica muy Especial.

Aclaraciones .

-En este historia en particular, Miwa y Utahime serán hermanas.

-La personalidad de mi bebé Miwa estará un poco alterada en favor de la historia.

-Por ultimo, este One Shot esta inspirado en la película "10 cosas que odio de ti" 

Utahime Miwa era una chica muy popular, muy linda y con grandes académicas, deportivas y sociales. Miwa también tenía solo un problema... su hermana, Utahime Iori.

Iori era una chica de diecinueve años, responsable y estudiosa, aunque claro para el caso de ella todo eso iba de la mano con ser una persona asocial, solo contaba con una amiga y para ella eso le bastaba, no conversaba con nadie durante las clases y mucho menos le importaba lo que hablaran de ella a sus espalda, es allí donde empieza el problema de Miwa.

Hijas de un matrimonio divorciado a la fuerza pues su madre las había abandonado hacia unos pocos años atrás, quedando a cargo de su padre, que fuera de ser estricto, era sobre protector. Un médico ginecólogo quien vivía asustándolas casi recitándoles la cantidad de enfermedades de transmisión sexual que podían adquirir en una noche o colocándoles videos de partos horrorosos que servía de anticonceptivo visual.

-Es en tres meses más... no empieza tan tarde- eran una de las tantas características que Miwa le daba a su padre, para ver si así lo convencía de ir a la famosa fiesta que la escuela daría en primavera- Juro que no beberé nada que me ofrezcan.

-¿Tu hermana irá?- fue la escueta respuesta a casi media hora de persuasión por parte de la chica de cabello celeste.

-Claro que no –contesto Iori desde el salón leyendo un libro de criaturas extrañas, aniquilando así todas las esperanzas de su hermana menor.

-Entonces es un no- finalizo el señor Utahime, dejando a Miwa furiosa y a Iori inmutable- Lo hemos hablado mil veces, si tu hermana no va, tu tampoco vas, punto final.

-No porque mi hermana quiera ser una nerd escondida en su cueva significa que yo deba hacer lo mismo- protesto- Quiero tener una vida social- eso lo dijo más refiriéndose a su hermana que a su padre en frente de ella –Yo si quiero tener una adolescencia normal.

-Define normal –pido la mayor- ¿Ir a una fiesta cada fin de semana? ¿Besar a cuanto chico ebrio se cruce por el camino? Lo que inevitablemente te llevara a tener mononucleosis; pero luego no bastara solo con besos, Miwa. Te meterán mano y su semen podría terminar en cualquier lugar de tu cuerpo, incluso en un embarazo adolescente.

-Gracias, con eso me ayudas mucho en intentar convencer a papá.

-Nadie dijo que estabas logrando convencerme- agrego el hombre mayor- Además, tu hermana tiene razón, pero si no me has escuchado aun, la respuesta es no, no vas, solo tendrás permiso por ti misma cuando seas mayor de edad.

-Faltan aún tres años- volvió a recurrir al puchero- Déjame tener diecisiete tranquilamente- fue lo último que dijo antes de dejar un agujero en las escaleras cuando las subió con violencia, de seguro eso dejaría dolor en sus tobillos más tarde.

-¿Enserio ni siquiera piensas en ir?- pregunto el señor Utahime una vez más recibiendo la negativa por parte de Iori- Bien... creo que tu hermana te odiara un par de semanas.

-Nada nuevo, papá- sonrió y continúo leyendo- Deberías ir a dormir, mañana trabajas temprano- le recomendó.

-No intentes controlar mi vida niña, eso truco solo puedo usarlo yo con ustedes- dijo subiendo las escaleras mientras desabrochaba su corbata.