Promesa de una pasión, tontas promesas, prometí regalarte el mundo y a cambio caminaríamos juntos un camino de rosas, tomados de la mano, viviendo de lujuria en lujuria, alimentando en cada paso el fuego y el calor desenfrenado que desprendíamos los dos. Nos llenamos de nosotros y no nos fue suficiente, nos perdimos en placeres, y como la arena del mar nos dejamos arrastrar y nos atrevimos a soñar con un sin fin de quereres.
¨Ilusa¨, me dijo la vida, triste engaño el del querer, yo nada puedo ofrecer para inclinar la balanza, antes de ti había añoranza y yo simplemente como una cobarde hui de ella y en ti me refugié. Se que ese nunca fue el trato, ni siquiera duró un rato y todo se echó a perder.
¡Una vez más, ¨Ilusa!!¨ me grito la vida, cuando creí que nada ocurriría, cuando creí que nada me costaría, que dejarte atrás no dolería, y sé que fue mi decisión, no me arrepiento, volví de nuevo a lo que estaba antes de ti, y solo el tiempo me ayudó a superarte, pero nunca a olvidar lo que sentí.
Hace días te encontré, y todo lo recordé cuando me recorrió un escalofrío, pero esta vez la vida solo me susurró ¨corre¨, ¨déjalo¨, ¨sonríe¨, y así mismo me despedí.
¿Ya estoy bien? Eso creo. ¿Soy feliz? Estoy segura. También sé, sin dudarlo si quiera, que evito con todas mis fuerzas recordar, lo hago solo a veces porque mi mente me traiciona.
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Ilusa
Short StoryCuando una decepción de un ser amado te inunda y aún sigues queriendolo aunque no deberías, surgen escritos como estos.