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Quería volver a estar en esa gran casa donde las empleadas de la casa me consentían con cada cosa, solo comía galletas a escondidas de mis padres mientras reía por mi pequeña travesura, solo era un niño con mi única preocupación era no dejar solo a ningún peluche mientras dormía.

 Sentado en el césped del jardín llorando por haber pisado a una pequeña flor, contando y anotando cada estrella que veía por la noche o dando mi gran esfuerzo cada ves que intentaba amarrarme los zapatos cada día, levantarme temprano solo para ver como el cielo cambiaba y los animales salían de sus casas, comparar lo pequeña que era mi mano con los demás, agarrar los libros y solo guiarme de los pocos dibujos que habían en esa lectura, correr por toda la casa riendo mientras imaginando que era un héroe, pidiendo perdón al diente de león que acababa de ser arranque solo para pedir ese dichoso deseo, vistiéndome con la ropa de mis padres para parecerme un poco mas a ellos, preguntándome del porque de mi nombre o siempre tapándome los oídos para oír lo diferente que sonaba cada cosa si hacia esa acción, frustrándome cuando no podía dejar de salirme de la ralla para colorear algún dibujo, insistiéndole a mis padres para que adoptáramos un lindo conejo.

Desearía estar en los brazos de miss padres, mientras mi madre me acariciaba mi cabello y mi padre me contaba sus experiencias y concejos, se sentiría tan bien estar en esos momentos donde todo lo que hacia era tan inocente y sin hacer daño a nadie.

Pero lo único que me queda  es recordar y saber que mi yo de antes supo disfrutar cada cálido y dulce momento de mi niñez. 

Mis padres me dieron todo y nunca falto amor en esa grande pero acogedora casa.

 Mi padre era dueño de una gran empresa, una gran persona que nunca le falta valores y modales cuando lo ves y conoces. Sin duda era muy suertudo de tenerlo como padre porque siempre, pero siempre jugaba y se daba el tiempo para mi aunque tenga muchas que hacer. Siempre estuvo ahí dándome sus tan típicos consejos de lo que avía vivido.

Mi madre no se le podría comparar por lo mas mínimo, es simplemente hermosa por dentro y por fuera, siempre me decían que yo heredaba eso de ella, aunque yo no lo crea del todo. Su voz da tanta confianza que a todos les encanta escucharla hablar por horas, siempre tan amable y sincera con todos que hacia y ese gran don de que todo lugar sea agradable con tan solo su presencia. Siempre me explicaba todo lo que le preguntaba y lo importante que era cada cosa.

 Sin duda es lo mejor tenerla como madre.

Uno de mis recuerdos cuando era niño era que siempre me quedaba solo cuando mis padres hacían una fiesta entre familias, amigos y conocidos. Claro que entre ellos niños y niñas de mi edad, pero siempre se me hizo difícil hablar con la gente que no conocía, aunque seamos los mas cercanos de sangre el poder interactuar con los demás era demasiado para mi. Tampoco es que me agradara estar solo realmente, lo que quería era un amigo, pero lo introvertido nunca se me quito.

No podía hablar sin tartamudear, ponerse rojo por simplemente estornudar y ponerme a llorar al saber que hice algo mal, no me era fácil poder conversar o jugar con alguien que no conocía y la idea de tener un amigo se iba apagando poco a poco ya que a los niños les aburría que este todo el rato inmóvil. 

Mi madre me escuchaba llorar y ella intentaba reconfortar pero al final ella terminaba llorado conmigo mientras mi padre me decía que absolutamente nadie puede quedarse solo y que solo fuera paciente porque me juraban con su vida que esa persona iba a llegar a mi vida.

Dicho y echo apareciste tu.

tocando la puerta de mi casa preguntando que si el lindo niño de hoyuelos que siempre se sentaba en el césped vivía aquí, no me arrepiento de haber aceptado jugar contigo. Juro y aseguro que fue el mejor día que pude llegar a vivir en toda mi vida.

Seguro no fue fácil interactuar conmigo, no?

Me mirabas con tanta atención que no sabia que hacer, solo te dedicaste a sentarte al frente de mi y empezar una competencia de miradas, obviamente perdí, como se supone que me quede en esa posición si me sonreías de esa manera?  

- ¿Tu puedes hablar?

La iniciativa siempre fue lo tuyo, pero eso no siempre te daba la misma respuesta, solo evite tu mirada otra vez.

- Entonces tu no hablas ¡¡Mira!! mi mamá me enseño esto  

Te paraste y no sabia que era realmente eso, pero tenia una idea.

- ¡¡ YO ME LLA MO H-U-E-N-I-N-G-K-A-I !!

Que yo sepa el lenguaje de señas solo involucraba las manos y ¿Era necesario dividirlo en silabas? Solo faltaba que te trates de primera persona para darle un toque mas gracioso.

- ...

- ¡¡¿Y TU CO MO TE LLA MAS?!!

- No soy mudo y no es necesario gritar H-U-E-N-I-N-G-K-A-I

Un hilo de voz logro salir de mi garganta y con eso basto para que sonrías y continúes con la conversación poco común que estábamos teniendo. Esta ves te sentaste a mi costado y te dedicaste a buscar mi mirada.

- Entonces yo soy Hueningkai y ¿tu?

- Soobin.

Me contaste sobre que siempre que asomabas tu cabeza a la ventana y me veías jugar y no sabias si yo quería jugar contigo porque supuestamente no eras muy ''bonito'', desde ese día no nos separábamos siempre nos comparaban con un par de chicles. Yo era tan tímido y tu tan expresivo, siempre dando abrazos y besos en la mejilla mientras yo solo me ponía rojo, eso se repetía tantas veces como un disco rallado, pero sinceramente no me cansaba de repetir una y otra vez esa tan dulce escena.

Yo solía llorar Hasta por la mínima cosa y pues tu simplemente poco a poco te ibas tomando el lugar de mi madre en mi vida, me consolabas y me decías cosas bonitas mientras me dabas esos besos tan inocentes por toda mi cara para que dejara de llorar y siempre lograbas tu cometido para después jugar y pasar por la cocina para que comiera una galleta para estar mas feliz porque decías que te gustaban mis hoyuelos.

¿Cómo hacías para no llorar? siempre te veías tan lindo y sonriente a tal punto que yo creía que tu nunca llorabas, pero estaba equivocado. Todos tenemos nuestros puntos débiles con la diferencia de que yo tenia muchos  .

La primera vez que te vi llorar no sabia que hacer, te pregunte porque llorabas, pero nada salió de tus labios. Te escondías en mi cuello como si de eso dependieras realmente. ''¿Porque los papeles se intercambiaron?'' La gente cabía por lo vivido y estaba dispuesto a ser quien limpie tus lagrimas desde ese instante.

¿Viste mi gran cambio? Supongo que las lagrimas no hacían que veas con claridad.

It's not how you see it


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Holi <3

El capitulo es corto, pero prometo que los siguientes no serán así. No sabría decirlo con exactitud, pero supongo que esto es como una introducción.

Lo volví a escribir y cambie algunas cosas, aun así, sigue teniendo lo que tenia en mente.

Si ven algún error por favor coméntenlo, me ayudaría mucho TT

Solo eso, bye

:3

It's not how you see it [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora