La luz del día traspasaba por la pequeña ventana de mi habitación, todo se veía tranquilo hasta que mi despertador en mi cómoda comenzó a sonar como todas las mañanas, despertando a mis hermanas que con un molesto mojín.
-Un minuto más Anya, todavía es muy temprano- había dicho Lili, una pequeña de 10 años con pelo rubio oscuro y unos bellos ojos azules, mientras que se tapaba con la almohada.
Me acerqué cogiendo mi almohada y tirándosela encima diciendo- ya despierta pequeña peresosa, tenemos que ir a la escuela temprano sino nos dejará el autobus y tendremos que ir caminando- de inmediato Lili se levantó rápido(ella odiaba caminar) y se dirigió al baño- esta bien y no me digas pequeña- dijo antes de cerrar la puerta. olvidé mencionar que no le agrada que le llamen pequeña a pesar de aún ser una niña. Con una risa me iba dirigiendo hacia el armario para sacar mi uniforme pero por el rabillo del ojo vi un pequeño bulto en la cama, inmediatamente corrí y me tiré encima para hacerle cosquillas a mi hermana Sofía, tenía mi misma edad y era muy bonita con su cabello pelirrojo y sus ojos verdes, tenía cosquillas por todas partes, cuando vi que le faltaba el aire por tanto reir me alejé.
-Anya no me vuelvas a hacer eso, sabes que no me gusta-dijo Sofía "pues que pena por ella, a mi y a lili nos encantaba hacerla reir de esta forma cuando se molestaba" pensé. Sofía se volvió a cubrir con la colcha - además no se porque me despiertas si aún ni sale el sol- dijo sofía. cogí su colcha y se la arrebaté- querida hermanita creo que debemos llevarte a un oculista porque si no te haz dado cuenta es una mañana llena de un intenso sol- trató de taparse pero al final se levantó bufando a lavarse.
Una vez cambiada, bajé a saludar a mamá, quien estaba en la cocina preparando el desayuno, olía a panqueques, mis favoritos, la salude con un buenos días y un beso en la mejilla, era una mujer muy bonita con su cabello castaño claro y ojos marrones claros como el caramelo, lo mismo hice con papá que leía un periódico sentado en la mesa esperando a que se sentaran, era un hombre muy risueño y amigable en su cabello se denotaban unas cuantas canas en su cabello castaño oscuro que denotaban su edad, me senté en la mesa y en ese instante llegaron sofía y lili, mamá nos sirvió el desayuno y empezamos como todas las mañanas desayunando juntos, esta era mi querida familia. Me llamo Anya Miller, soy una chica de 16 años alta, pelinegra con unos tonos castaños que casi ni se notaban con unos ojos negros.
Si se preguntaron, porque somos tan diferentes es porque no son nuestros verdaderos padres en realidad, papá y mamá eran una pareja que joven que al no poder tener hijos, nos habían acogido en su hogar hace 6 años. El único recuerdo que tengo de mis padres biológicos es un pequeño relicario que supongo habrá una foto de ellos dentro pero todos estos años no he podido abrirlo, aunque lo guardo como mi mayor tesoro.
Esto es solo el comienzo, ¿qué es lo que pudo pasar para que si vida cambiara? ¿qué es lo que cambia?, esas preguntas será resueltas mientras la historia continue.
Le quiero dedicar este capítulo a mi prima que ha comenzado a escribir su propis historia por ello me ha animado que escriba también la mía.
Bueno espero que les guste, me interesa saber la opinión de los lectores porque así podré mejorar para escribir mejor con su apoyo, y sus críticas en los comentarios, no me interesa que me pongan una estrella porque yo escribo porque me gusta y si puedo comunicarles a todos los que lean, esta historia estaré satisfecha, yo he estado en esta plataforma virtual por años, así que sé que es un poco tedioso que a cada rato te pidan que les comenten y les pongan la estrellita, por ello no se los voy apedir; si quieren comenten o pongan un estrella
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Change
Random¿Han sentido alguna vez que no pertenecen a este mundo? Quizás porque son diferentes de los demás o nadie los comprende. nunca me había sentido así hasta que paso algo en mi pasado que lo cambió todo, pero no me arrepiento de haber protegido lo que...