Capitulo 27.

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|Odio Que Me Hagas Amarte|Capítulo 27

Bajé de mala gana la escalera, abrí la puerta antes de que el indeseado habitante la tocara.

-¿Qué demonios haces tu aquí?-Pregunté entre regañadientes-

-Algo obvio, si te pasa algo será a mi al que maten después-Me dijo el-

-Que lindo-Hice una fingida sonrisa-Estoy bien, ya lo viste, adiós-Estuve a dos centímetros de cerrar la puerta pero el la detuvo, y no le fue difícil abrirla aunque intente que no lo hiciera, no era como que yo fuera a tener una décima de la fuerza que tiene el-

-Y no solo eso, quería disculparme, lamento lo que…-Pero lo interrumpí-

-No me interesa la compasión de nadie, Justin, menos la tuya

-No es eso, enserio, perdón, me pase-Ya me estaba pareciendo extraña tanta amabilidad-

-¿Qué mosquito te picó, Justin?-Le pregunté, y no era mas bien por molestarlo-

-Mira pequeña niña que no entiende nada, si mis padres llaman y se enteran de que te dejé venir aquí sola sin su permiso, me van a AHORCAR, no quiero morir tan joven-Yo iba a decir algo pero el me tapó la boca-Escucha, a las niñas tan pequeñitas como tu, tan bonitas, con tan lindo cuerpecito y tan inocentes si se te puede llamar así son un blanco fácil para muchos locos en este mundo, entonces a que nos lleva esto, que gracias a que lamentablemente eres prácticamente mi hermana menor se supone que debo cuidarte. Entonces, ¿Dónde voy a dormir?

-¿Disculpa?, ¿Dormir?-Pregunté ignorando el halago anterior-No, no, no, no, no, nada de dormir, tu te vas-Dije poniendo mis manos en mi cintura-

-¡Ja! ¿Y quien me obliga?, ¿Tu?-Rió energéticamente-¿Recuerdas nuestro trato? Aun no se ha roto

-Imbécil-Dije evitando palabras más fuertes, podía ser todo, pero jamás fallaba a mis promesas por muy estúpidas que fueran-

-Adivina quien va a dormir conmigo-Dijo dedicándome esa encantadora sonrisa, que amaba y odiaba a la vez-

-¿El espejo? Si, se harían buena compañía-Dije en forma sarcástica, pero el igual sonrió-

-Error, TU-Dijo recalcando bien al palabras-Serás mi osito de peluche esta noche

-Aw, déjame adivinar-Dije con un tono como si le estuviera hablando a un niño de tres años-Al niñito se le olvido su osito en casa, pobrecito

-Dejas de fastidiar o te juro que te obligo a dormir conmigo en ropa interior-Estúpida amenaza, pero funcionaba conmigo-

-Arg, está bien, inútil-Dije esto último en un susurro casi imperceptible, pero lo hoyo, ¿El como? No tengo idea, desearía saber como le afectaría el escuchar el tonto y estruendoso sonido de mi celular-

-Muy bien, polera menos, solo te queda el pantalón-Me dijo el riendo energéticamente-

-¡Justin!-Le reclamé enfadada-

-Mmm, veo que alguien va a dormir desnuda si su linda boquita no se cierra ya-Dijo saliendo de la casa, probablemente a buscar sus cosas al auto, habría deseado dejarlo afuera, pero esto terminaría mal para mi-Aunque eso no estaría nada mal-Termino por decir ya lejos de mi-

No me quedó otra que dirigirme a la habitación a cambiarme la ropa a un cómodo pijama.

Acababa de poner mi short hace dos segundos cuando Justin entro a la habitación, con unos cómodos shorts, y como era de esperarse, con su torso desnudo.

-¿Qué pasa contigo? ¿No te enseñaron tocar?-Le pregunté enojada-

-No-Respondió con simpleza-Ya deja de reclamar y duérmete

-Bien-Respondí rodando los ojos, no quería traerme más problemas con Justin-

-Espera-Me detuvo el antes de que entrara a la cama-

-¿Qué?-Se me estaba escapando la paciencia y la tolerancia rápidamente de las manos-

-¿Recuerdas lo que te dije en la sala?-Yo hice una mueca rara, ¿Cuál de todas? Duh-Quítate la polera-Bien, ya me acordaba-

-Eres tan…-Pero el me interrumpió-

-Una palabra y te quitaras también el short-Dijo el sonriendo, yo solo bufé molesta y me quité la camisa quedando en brazier, el solo me miraba sonriendo, su sonrisa tenía una mezcla de diversión y de satisfacción-¿Feliz?-Le pregunté con los dientes apretados, intentando contener todos los insultos-

-Si, estás perfecta-No lo intentó, ni siquiera pudo despegarme la vista de encima, igual que todos, solo preocupándose de lo exterior, pero el estar acostumbrada me servía mucho APRA no enojarme y decirle que era un…-

-Yo creo-Dije cruzándome de brazos enojada-Que nuestros padres se enojarían si me dejaras sola, pero se enojarían aun más si tienes a tu “Hermanita” durmiendo en brazier contigo en la misma cama

-A que si-Dijo el riendo-Buenas noches, encanto

-Buenas noches-Dije otra vez a regañadientes, porque si no lo hacía terminaría peor, Justin era el único individuo en este planeta que podía hacerme perder el orgullo en un dos por tres-

-Alguien debería cambiar esa horrible personalidad tuya-Dijo el de nuevo haciendo figuras invisibles en mi desprotegida carne-

-¡No me toques imbécil!

-¿Ves a que me refiero?-Pero seguía con sus dulces caricias-Ya veo porque no tienes novio

-Me estás colmando la paciencia-Dije yo quitando su mano-

-Mmm, tus piernas son tan suaves-Dijo el mientras comenzaba a acariciar mi muslo izquierdo-

-¡Que no me toques!-Le pegué en su mano-

-¡Auch! ¡Que brusca! ¿Haces pesas o algo por el estilo?-Yo reí sarcásticamente

-Si hiciera pesas habría evitado que entraras en primer lugar-Dije entre dientes-

-Buen punto

Luego no se que me paso, perdí la conciencia, me quedé muda y sorda, o simplemente me dormí y ya, pero no pude seguir distinguiendo los sonidos, ni siquiera la oscuridad, solo un fondo negro con algunas luces verdes.

¡A por dios! ¿¡Que nadie en este mundo podía cortarle las cuerdas vocales a los torpes pájaros!?, o quizás alguna manera de quedar sorda yo…

Entonces fui mas conciente, escuchaba también el sonido de la televisión ensedida, mis brazos estaban cómodamente en los abdominales de Justin, mi cabeza estaba recostada en su pecho sin ganas de querer moverse, entonces me percate de que Justin estaba despierto, di un grito e inteligentemente me gire cayendo de la cama, realmente se veía mas grande sin Justin en ella, enseguida escuché su sonora carcajada.

-Bien-Dijo riendo incontroladamente-Un aplauso para ti, ________ .

-Eres un IDIOTA-Le dije mientras me paraba de mala gana-Vete, solo estorbas

-Si, eso decías toda la noche, estando tan cómoda acostada en mi pecho, ¿Te estorbaba entonces, ________?-Yo solo gruñí, pero no pude evitar que un calorcito llegara a mis mejillas poniéndolas ligeramente rojas-

-¡Ya devuélvete por donde viniste!-Le grité enojada mientras el solo me miraba sonriendo, esa sonrisa y esa mirada solo explicaba una cosa, no traía una polera puesta-

-No te desharás de mi tan fácil, encanto-Yo solo pegue un grito de reproche, tomé mi ropa y salí de la habitación camino al baño-

Odio que me hagas amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora