—¿Para mí? —preguntó Wani sorprendida y algo acolorada a al ver lo que su mejor amigo le ofrecía
—Así es, realmente fuiste de mucha ayuda el otro día, y esta solo es una pequeña manera de pagártelo—Explico nervioso, ya que al verla así de feliz también hizo que se sonrojará, llevaba un peluche tamaño mediano, de un gatito blanco bastante adorable, con manchitas marrones y un pequeño moño negro
—Awww T-tracy—Lo tomo entre sus manos color cromo y le dio una ojeada lenta y detallada, una sonrisa se dibujó en su rostro, se puso aún más roja al pensar en que se tomó el tiempo de —Muchas gracias, lo amo
—Ayy, no fue nada—dijo apenado rascando su nuca y con una sonrisa, feliz de saber que le gustaba.