CORAZÓN CONTRA TODO - (Luciale)

CAPITULO 7

- No... lo siento- terminó diciendo entre lágrimas.

- Entonces, ¿por qué lloras?

- No lo sé...- No podía aguantar las lágrimas- pero siento dolor.

- No llores por favor- Alex tomó el rostro de Lucía entre sus manos y besó sus mejillas- No llores, tus ojos son muy hermosos para verse manchados por lágrimas.

- ¿Por qué me duele aquí?- dijo tocándose el pecho donde estaba su corazón.

- No te lo puedo decir yo, lo tienes que descubrir. - Alex realmente estaba abatida, Lucía la había rechazado y por primera vez en su vida sentía ese gran sentimiento por alguien. Aunque sabía que Lucía estaba sintiendo algo, aunque le doliera reconocerlo. - Ya, Lu, ven vamos- Alex la tomó de la mano y volvió a entrar a la mansión, pero esta vez subió con ella por unas escaleras hasta llegar a una tercera planta donde solo había una puerta, la habitación de Alex.

La habitación de Alex era el doble de la habitación en el colegio, era enorme. Tenía un enorme TV, un área de jugos con máquinas y un cesto de baloncesto, también había y una pequeña sala de estar con muebles. La cama era enorme.

- Tu cuarto- dijo Lucía un tanto preocupada.

- Sí, no te preocupe, no haré nada. Aquí estaremos más tranquilas.-
Alex la sacó al balcón que tenía en su cuarto que daba a la vista de los jardines de su mansión.

- ¿Hermoso no?

- Si, bello.

- Bueno, puedes dormir si gustas, sé que ya es tarde para ti.

- Al- dijo tímidamente- no soy tonta sabes- Alex alzó una ceja sin entender- comprendo por qué me dolió tanto decir que no- Alex suspiró- pero entiéndeme, no sé si está bien, es la noche del diablo y no debo caer en tentaciones- Alex había volteado los ojos y negado con la cabeza "otra vez la religión"- pero no importa lo que diga mi religión, es que me duele.

- Te... te... entiendo- sentía un nudo en la garganta.

- También tú tienes una reputación...

- Pero contigo no, desde que te conocí no he salido con nadie más- parecía desesperada en demostrar su devoción.

- Lo sé, pero aún así me siento intimidada, además no puedes comprar mi amor. - Alex había fruncido su frente- has sido muy linda y todo, pero no te amaré por regalarme cosas y nada más.

- Entiendo- dijo pensativa...- entonces ¿si te enamoro dirás que si?- Lucía pensó un momento.

- No te aseguro nada, pero puede ser- terminó sonriendo.

- ¿En serio?- los ojos de Alex se iluminaron- haré lo que sea necesario por ganar tu amor- tomó sus manos y la besó- Lo juro- quiso volver a besar sus labios.

- Ni lo pienses, Rivera. Lo de antes fue un momento de debilidad nada más.

- No puedo tener otro ahora- dijo haciendo un lindo puchero.

- No- rió y le dió un beso en la comisura de los labios.

- Con eso me basta- dijo media ida.

Las chicas estuvieron hablando hasta pasado las 3:00 am, Alex no perdió oportunidad para decirle las cosas más hermosas que podía y ver esa sonrisa que la enamoraba. Ya cerca de las 4:00 am Lucía comenzaba a sentir sueño, así que Alex sacó un short y una blusa para Lucía y ella misma se cambió. Entraron en la cama y se quedaron dormidas.

Cerca de las 10:00 am Lucía despertó, no había música, imaginó que todos se habían ido ya y solo estaban ellas en la casa. Miró a Alex que dormía plácidamente. Era hermosa, como podía ser ella una tentación del diablo.