ENAMORADA DE MI ENEMIGO [En Modificaciones]

CAPITULO 3

El auto me llevó a mi destino, mire su auto afuera así que me baje y entre a verlo, estaban sus escoltas al igual que uno de sus empleados sentí la mirada pervertida de todos ellos tenia un pantalón muy pegado a mi cuerpo y una blusa con escote, al salir Dongho todos ellos dejaron de mirarme

—Pensé que no vendría -dijo acercándose a mi y tomó mi mano para darle un beso en el dorso-

—¿Porque lo pensaste? Soy una chica de palabra -guiñe mi ojo en mi intento de coquetear-

—Eso me parece bien linda,  ya es hora de irnos ¿no te molesta que conduzca tu auto? -llamó con la mano a los escoltas que se encaminaron a la salida-

—Claro que no -le di mis llaves y fuimos a mi auto, él abrió la puerta para que yo suba y después fue al lugar del conductor, encendió el auto y condujo a su casa no fue largo el camino al llegar mire una casa muy grande, una mansión en pocas palabras y cabe decir que era hermosa; al estacionar frente la puerta bajo del auto y como todo un caballero me abrió la puerta-

—Llegamos preciosa -me ofreció su mano la cual acepte y salí de mi auto-

—Tienes una casa hermosa -sonrió y ordenó que bajaran mis maletas mientras él me guiaba a mi nueva habitación-

—Espero te guste tu cuarto lo prepare especialmente para ti - sonrió de lado mientras me miraba, me sentí extraña mi corazón latía más de lo normal–

—Gracias, espero no tenga ni cámaras ni micrófonos detesto que me vigilen -dije en tono amenazante, la verdad si llegaba a haber algo de eso mis planes se estropearian-

—No habrá nada de eso, una chica como tu no necesita que la vigilen.

—Eso me parece bien guardaré mis cosas y luego quiero hablar contigo.

—De acuerdo -sonrió y se fue mientras yo entre a mi cuarto a revisar, como me dijo no había ni cámaras ni micrófonos eso me ponía mas tranquila así que arregle mi ropa y todos mis equipos luego salí a ver a Dong ho camine hasta su oficina y ahí me atendió- dime ¿Que quieres hablar conmigo?

—Necesitó que me des la llave de mi cuarto no quiero que nadie entre -dije sin más, no necesitaba explicaciones, era una chica que protegía su privacidad-

—¿Porque? -parecía confundido tal vez no esperaba que le pidiera eso y tal vez cuando no esté revisar mis cosas-

—Me gusta la privacidad, son una chica en medio de muchos chicos, no quiero tener acosadores así que me la das o me voy tu decides -dije sería mientras extendía la mano ordenando con ese gesto que me la de-

—De acuerdo, te la daré -saco la llave de uno de los cajones de su escritorio y me la pasó acto seguido se levantó de su silla- acompañame te diré lo que tienes que hacer -empezó a caminar y yo me limite a seguirlo bajamos las escaleras y ahí estaban dos chicos- tn te presento a a mis escoltas principales él es Kiseop -apuntó al chico de la derecha era alto musculoso con el cabello castaño y que le llegaba hasta la frente- y él es Kevin a quien tendras que entrenar -ese otro chico se me hacia familiar tenia la misma estatura de Kiseop su pelo castaño pero casi llegaba a sus ojos-

—De acuerdo necesito armas -dije rápidamente mientras miraba a ambos chicos, Kiseop miraba mi escote y Kevin solo miraba al vacío-

Kiseop llevala a la bodega y que escoja la que deseé -ordenó al chico musculoso y el de inmediato se puso a mi disposición-

—Tn ve con Kiseop yo tengo trabajo que hacer -asenti y seguí a Kiseop cuando se puso en marcha

—¿Te han dicho que eres linda? -dijo llenando el silencio incómodo del trayecto-