— No -Responde tajante el oficial, cruzándose de brazos. Ocultándose detrás de sus lentes oscuros.
Luzu para nada se siente ofendido, porque sabe perfectamente que ese es solo un berrinche o un sarcasmo del hombre. Lo ignora después y se sienta sobre el cofre de un auto.
— Sabes, no tengo idea de porque... pero siempre tengo la necesidad de contarte o decirte todo. Sé que parece que soy esa clase de persona, por mi maravillosa personalidad -luego solo niega con la cabeza un par de veces- yo soy una bóveda con toda mi vida. Ni siquiera mi prometido sabe todo. Que sentiría si le supiera que le digo todo a un viejo cochino.
— Qué ¿no le dices todo a ese sujeto del auto? A mí se me hace que son bastante cómplices en muchas cosas. Además ¿cómo que tu prometido no sabe nada de ti? ¿Cuánto tiempo tienen juntos?
— Mucho. Es solo que me avergüenza que sepan que no soy este Luzu desde siempre. Soy el Luzu que apareció después.
— Se llama madurar; deja de ser dramático y hacerlo ver como un desequilibrio mental. Hay personas que nunca van a dejar de ser idiotas. Al menos puedes decir que tú cambiaste. Al menos yo quiero decir lo mismo, que cambie.
— ¿Lo ves? Dices esas cosas y por supuesto que me dan ganas de contarte más.
— No tienes que contarme nada que no quieras. Tampoco voy a decirle mucho a Raúl, digo ni me dirige la mirada. Cada que nos encontramos frente a frente puedo escuchar su "quítate, perdida de tiempo".
— No entiendo como eso pudo terminar tan mal ¿qué hiciste? -Levanta una ceja, pero luego se detiene. Tal vez prefiere no saberlo.
— Solo piensa en qué ambos no éramos nuestra mejor versión y ahora sí. Bueno, mejor no meter las manos al fuego por él -Saca de su bolsillo un cigarrillo- ¿Te molesta?
— No, adelante -Saca un encendedor de su ropa para ayudarle con el fuego.
Acerca la cara a la llama del encendedor, apuntando el cigarro con sus labios.
— No me digas ¿el Luzu del pasado fumaba?
— ¡Jajaja, claro que no! No hay vicio más idiota que fumar. No, lo llevo porque Auron siempre pierde el suyo.
— No deberías hacerlo, estoy totalmente de acuerdo con la parte de que es un vicio idiota.
— Prefiero hacer ejercicio.
— Por supuesto que eres el loco del ejercicio. Pude notarlo, no creo que los seres mortales puedan sujetar su peso en brazos o piernas en un tubo de acero y girar de cabeza.
— ¡Renato! ¡Afuera del escenario no me recuerdes lo que hice! -Y en serio se sonroja. Está muy apenada.
— ¡Tienes que estar jodiendo que ahora te dé pena! Estás de coña ¿cómo ahora viene a darte vergüenza? Yo te miraba muy divertido.
— Mejor te cuento otra cosa, no hablemos de "Mateo" -Prefiere mover el tema- ¿te divertiste está noche?
— Sí, hasta que te dio miedo hablar de que le haces al poledance -Expulsa el humo hacia otro lado.
— ¿¡Qué puedo decir!? ¡Tomé unas clases! Me regalaron unas de cumpleaños hace un año. Uno le coge el gusto a las cosas.
— Ahí está -Susurra para sus adentros el oficial.
— Ay cállate, viejo cochino.
— ¿En serio te enojaste por qué te aventé dinero?
— ¿¡Me diste dinero!?
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Un dorama de bomberos | Multishiping
FanfictionLa estación de bomberos 007 de la ciudad de Karmaland recibe un llamado de emergencia. Fácilmente, la peor situación en la que podrías encontrar al amor de tu vida sería al borde de la muerte. Un incendio que desatará el caos en la vida de sus invo...