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Dos semanas habían pasado, los padres de Jeon ya habían llegado así como había llegado la hora de marcharse para NamJoon y era de esperarse que JungKook no quisiera eso.

——Hyung, prometió no dejarme.—— Se aferró a la pierna de su mayor.

——No te dejaré, pequeño, simplemente ya no estaré viviendo contigo pero de igual manera nos veremos, te vendré a visitar.——

——Pero, hyung, no quiero.——

——JungKook, estás molestando a NamJoon, tienes que dejarlo ir.—— Habló el señor Jeon.

——Hijo, tu padre tiene razón, estás retrasando a Nam, seguro tiene cosas que hacer.——

Los ojitos de Kook picaban, sus lágrimas ya amenazaban con salir, realmente no quería que NamJoon se marchara y las palabras de sus padres no ayudaban.

——Descuiden, señor y señora Jeon, JungKook no me molesta, ni retrasa, todo lo contrario, me gusta pasar tiempo con el.——

Los ojitos del menor se iluminaron y unas pequeñas y traviesas lágrimas recorrieron sus regordetes y adorables mejillas, mientras levanto la cabeza para ver a su mayor con total amor.

——¿En~enserio, hyung?——

——Totalmente enserio, Kook.—— Le sonrió.

El menor no pudo evitar sonreír también, dejó salir sus lágrimas con libertad y se aferró aún más a la pierna del mayor mientras remojaba un poco el borde de la camiseta de este.

Nam más que enternecido separó un poco a su menor y se encorvó ligeramente para poder levantarlo y cargarlo, limpio gentilmente las mejillas reempapadas de Kook e hizo que lo viera a los ojos.

——Tranquilo, pequeño, ¿Si? Aún te vendré a dar clases y saldremos, no dejaremos de vernos, solo que ya no será todo el tiempo.——

——Pero quiero verlo todo el tiempo.—— Puchereo.

NamJoon le sonrió, el señor Jeon se acercó y tomó en brazos a su hijo, este no quería soltar a su hyung pero terminó perdiendo claramente, la señora y el señor Jeon se despidieron del joven para luego entrar a su casa.

JungKook solo observó por la ventana como su mayor se marchaba.

NamKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora