décima noche

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Me aseguro de llevar todo lo necesario para el pequeño viaje que Diego había reservado para esta noche. Guardo otro paquete más de baterías por si las dos de repuesto se gastaban.

- ¿Por qué llevas tantas pilas?

Evangeline toma asiento en uno de los sillones cerca de mi cama, sostiene uno de los tantos peluches cerca y juega con el que Diego me dio cuando regrese de mi intercambio. La pequeña se quedaba diario mientras esperaba por el regreso de sus padres del trabajo, prácticamente el castaño y yo nos habíamos convertido en sus niñeros a partir de su pequeña visita nocturna hace unas semanas.

El viaje estaba planeado desde hace mucho, pero debido a Evangeline quisimos esperar un poco a que los padres de la niña contaran con el tiempo necesario y que así la pequeña no se sintiera sola.

- ¿Cuatro paquetes es exagerado? - asiente - ¿Debería llevar solo dos?

- O mejor no lleves ninguna, estoy segura que el lugar en donde se quedaran tendrá la suficiente iluminación para que te sientas bien.

Evangeline y yo compartíamos ese miedo por la oscuridad, a diferencia del trauma por el que yo había pasado de niña, la menor solo estaba asustada por las historias de terror que escuchaba de sus compañeros y primos mayores.

Diego se acuesta sobre la cama y la pequeña Evangeline se acerca a él, golpeandolo en el pecho por haberse comido sus golosinas. Ambos terminan en una pelea de cosquillas, con la más pequeña riendo a carcajadas y pataleando para que se detenga.

El timbre de entrada suena, indicando que Daniel ha venido por su pequeña. Me cercioro de que todos los juguetes de la niña se encuentren dentro de su mochila y la acomodo en sus hombros para que pueda llevarla con más facilidad.

Diego se despide de Evangeline con un abrazo y ella sujeta la mano de su padre mientras ambos hacen un gesto antes de irse a su departamento.

Cierro la puerta y me acomodo en el sillón, en espera de que él castaño termine de empacar todas sus cosas para esa noche. Afortunadamente yo las había terminado de organizar desde hace dos días, pero hoy revise todo una vez más.

- ¿Quién crees que es más guapo?, ¿Sebastian Stan o Chris Evans?

Frunzo el ceño.

¿Acaso era una broma su pregunta?

- Obviamente Sebastián Stan, que pregunta tan pendeja.

- ¿Y por qué?, Chris es guerito y se ve bien para su edad, en cambio Sebastian ...

Lanzó un cojín en su dirección, para que se calle.

- No vuelvas a decir eso, no sabes con quien te metes pa' - hago señas extrañas con mis manos, Diego se limita a carcajearse y deja ambas maletas en la sala.

- Vuelvo por una cosa más y nos vamos, ¿Vale?

Asiento.

Él desaparece de mi vista y aprovecho ese momento par desconectar y cortar el suministro de gas. No quería que algo malo sucediera mientras no estábamos.

- Ya termine.

La respiración de Diego choca contra mi nuca, me hago a un lado por el cosquilleo que eso provoca.

Extiende su mano para que la tome, con algo de duda, entrelazo nuestros dedos y le ayudo con las varias mochilas que llevábamos para acampar.

lights on; barcagamer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora