Golden Tales [Skydas]

5. Origen

Había olvidado completamente que estaba escribiendo esto, tuve demasiado trabajo y dejé el diario en un cajón de mi escritorio, bueno, las actualizaciones que han habido, es que ya llevo un mes trabajando en la Agencia, y no he podido asistir a la invitación de Midas para conocernos, pero como hoy tengo libre (después de literalmente un mes) he decidido ir.
Aún me pone nerviosa, es algo intimidante, pero, creo que después es de hablar de forma sincera aquel día,  me di cuenta de que en realidad no lo es tanto, quizá solamente es tener más confianza para acceder a su corazón.
Por cierto, mis secuaces ya tienen un poco de mi, no soy una maestra excelente, además de que jamás había hecho esto, jamás pensé que tendría que entrenar "soldados" y mucho menos estar en una "organización" así, pero todo por papá.
Ya es un poco tarde, de hecho el sol no tarda en ponerse, le pediré a Beam que me lleve. (Beam es últimamente mi secuaz más querido, aparte de un amigo excelente, tiene un tipo de preparación militar)

El viaje a la Agencia no tardó más de 20 minutos, Beam, me dejó en la entrada principal y le dije que cuando le hablara por el woki toki viniera por mi.
Sigo desconociendo las identidades de los secuaces que me llevaron primero con Midas, pero al parecer seguirá siendo un secreto, hasta ahora la Agencia tiene a 5 agentes principales, aunque solamente conozco a Midas, creo que parte del plan también era presentarme a los demás, veremos qué pasa.

-¡Skye!- gritó Beam antes de regresar al Tiburón- ¡olvidaste tu Rifle en el helicóptero!

~¡Beam, me acabas de salvar la vida, gracias!~ le agradecí, acababa de recordar que Midas me dijo que no lo perdiera por nada del mundo.

Tomé el rifle y lo colgué en mi espalda, me puse mi identificación, guardé el gancho en mi bolsa y entré al edificio, como ya era tarde, los secuaces, limpiaban, comían, o hacían otra cosa que no fuese trabajar, en el centro, se encontraban los 5 agentes que desconocía de sus nombres:

-Tu debes ser la niña de la que el jefe nos habló, ¿qué haces en una mafia?, vete a jugar con tus muñecas- dijo un hombre más intimidante que Midas, me barrió con la mirada, y volteó a ver a los demás, dos secuaces detrás de él, me asustaban todavía más.

-Deja de ser tan aguafiestas idiota- interrumpió una chica bastante despreocupada, dándole unos golpecitos en la espalda, perdónalo, no confía en nadie- me dijo- Soy TnTina, llámame Tina, mi extensión es en La Plataforma, este grandulón de aquí que te menospreció se llama Brutus, trabaja en la Gruta.-explicó sonriente TnTina