Capítulo 23.-Autodestrucción

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Lunes/16/Noviembre/2020.

El sonido del despertador me despertó de aquella profundidad del sueño en el que me había sumergido, había dormido más de doce horas seguidas. Estiré la mano aún cubierta con las sábanas y tantee el lugar en donde estaba el reloj, pulsé el botón y lo apagué.

Me levanté preparándome para darme una ducha para tratar de arreglarme para ir al instituto, físicamente no tenía ánimos de nada más allá que permanecer todo el día en la cama. Pero tampoco quería permanecer en la cuna de los recuerdos de Angelina.

Me di una ducha y arreglé mi uniforme, traté de verme lo más presentable posible. Me cubrí los brazos con manga larga de color gris para no llamar la atención, me puse las calcetas que me llegaban por encima de la rodilla y se alcanzaban a cubrir con la falda, no quería dejar ni un solo trozo de piel visible.

No quería que todos los años en este infierno vivido salieran a relucir en forma de cicatrices. Bajé, al pasar por la habitación de Angelina en donde la puerta estaba entreabierta dejando ver las cosas como las había dejado aquel día que había salido de casa hacia aquel concurso del que no había vuelto.

Había un silencio, no estaba aquella voz que siempre estaba ahí de fondo mientras me vestía, me duchaba o hacía cualquier actividad. No había ni un solo ruido que me avisara de su presencia porque ella no estaba ahí, había apagado aquella voz de una forma horrorosa. Ya no sería aquello lo que protagonizaría mis mañanas, si no un mutismo que me recordaría por siempre lo que había hecho.

La puerta de mis padres estaba cerrada, era el lugar al que no quería entrar, sabía que estaría hecho un caos al igual que la habitación de Angelina, y la de Geovanny a la que nunca me metía. Geovanny no era como Angelina de talentoso, pero tampoco como Angélica de desastroso, permanecía en el medio de los dos.

Bajé por las escaleras y todo estaba desolado, exactamente igual a como lo había dejado el día anterior, la comida estaba sobre la encimera esperando para ser comido por mis padres, Geovanny y Angelina en aquella celebración que sería llevada a cabo después del concurso de Angelina, como un festín de las innumerables veces en las que había ganado.

Todo estaba tan desolado, se sentía un vacío enorme en aquel lugar que era mi vivienda, el sitio que se suponía que debía de ser seguro, lo estaba siendo por hoy, pero con el pasar de los días cuando fuera comprobada la muerte de Angelina toda aquella seguridad se iba a esfumar de manera rápida.

No había aquellas voces en el comedor hablando de lo maravillosa que era Angelina, los lugares respectivos en los que solían sentarse para hablar de próximos proyectos futuros estaban vacíos, y había uno que no volvería a ser ocupado nunca más, que aquella última vez que se sentaron a comer hablando de que Angelina una vez sería triunfadora había sido el último momento que pasarían juntos.

Que aquella vez que sonrieron creyendo que habría más momentos como esos que atesorar en forma de fotografía, porque aquella belleza tan antinatural que poseía Angelina debía ser presumida como lo mejor que les había pasado a su vida, que ya no habría más momentos que pasar juntos porque yo me había encargado de cortar aquellas alas de los grandes sueños que tenían juntos con las más afiladas tijeras, la había destrozado hasta el punto de que aunque aquellos pedazos fueran unidos con hilo y aguja ya no volvería a emprender aquel vuelo en lo más alto del cielo.

Que en los próximos concursos que estaban destinados para que Angelina participara se habían acabado, ya no habría ni uno solo más, que aquel público que tanto admiraba aquella angelical voz se quedaría en la espera, tendrían que revivir una y otra vez aquellas veces en las que lo había hecho.

Que su futuro prometedor como cantante estaba arruinado, ya no habría más Angelina Cárdenas Beltrán que les deleitara sus oídos con aquella dulce voz que poseía, que los críticos y los jueces admiraban tanto, que ya se esperaba que en cada concurso que participara ella tendría un lugar, porque para ella no había competencia.

Balas Perdidas ¿Alguien me amará? (Nueva Versión) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora