Embarazo al estilo Senju-Uchiha [HashiMada]

🔸6 Mes🔸

Madara había acordado con Hashirama un día para  comprar la ropa del bebe y todo lo que necesitarían a la hora del nacimiento de Obito. Ambos estaban de aquí para allá, comprando biberones, pañales, juguetes, cosas de higiene, entre otras cosas.

Hashirama cargaba con las cosas y si él no podia, hacía un clon de madera para que le ayudase, no quería que Madara cargará nada debido a su estado, también según Mito que en este mes  Madara es más sensible.

Habían llegado a una tienda de ropa para bebé, Madara veía la ropa con entusiasmo como si fuera un niño pequeño que está en un área de juegos, a Hashirama le causaba ternura ver a su esposo así con una sonrisa. Había cojido una canasta para llevar la ropa que Madara dejara para Obito, creo que se podría decir que el título de "Hokage" le podría sacar unas que otras ventajas.

Madara por otra parte, se repasaba mentalmente lo que necesitaría Obito, como camisas, pantalones, suéteres, ropa interior, etc. Siguió caminando por la tienda hasta llegar la sección de gafas, había algunos Uchihas que eran sensibles en los ojos y anhelaba que Obito  despertará el sharingan ya un poco mayor de edad.

Entre las gafas había llamado uno la atención, era de color anaranjado que tenían en los bordes blancos, lo tomó para inspeccionarlo mejor e imaginando como Obito se veria con esas gafas, le parecía tierno.

Hashirama llegó adonde estaba Madara y lo vio viendo unas gafas que tenían un aspecto peculiar.

— ¿Es para Obito?.

Preguntó, gracias a la guerra había sabido que algunos Uchihas son sensibles en los ojos.

— Si.... ¿Pero crees que le guste?.

Cuestionó, no sabía si le iba a gustar las gafas o si lo quería de otro color o modelo. Hashirama beso la mejilla de Madara y le dedico una sonrisa para tranquilizarlo y no tuviera una crisis.

— Le va a gustar Maddy.

— ¿Cómo lo sabes? ¿Que pasa sino le gusta? O....

Hashirama beso en los labios al azabache con el fin de callarlo.

— Lo sé, porque se que cuando Obito crezca nos tendrá a su lado, lo criaremos de forma diferente a lo que nosotros fuimos criados para adentrarnos a una guerra.... No sabemos si le gustara las gafas, incluso pregunte y si no le gusta lo puedemos cambiar y ya que él escoja de otro tipo o si lo quiere cambiar por  otra cosa.

Madara vio las gafas de nuevo y las puso en la cesta dedicándole una sonrisa a Hashirama.

Ambos se fueron a pagar las cosas, cuando finalizaron las compras se fueron a su casa, al llegar comenzaron a ordenar todo, en unos cajones estaba la ropa interior, en otros las camisas, en otros los pantalónes o los shorts, en otros los suéteres, en un pequeño estante de madera sus zapatos y en una repisa algunos juguetes.

Cuando terminaron vieron que la habitación ya estaba ya lista, sus corazones latian con fuerza debido a la emoción de ser padres de un pequeño que llegaría a sus vidas dentro de poco.

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