No Fue Mi Intención - FATE: la Saga Winx (Sky De Eraklion)

capítulo 28: que voy

A partir de este capítulo, cada vez que veáis un espacio grande y luego, letra cursiva, significa que un "Narrador Omnisciente" está relatando el pasado (principio de las vacaciones). Serán como dos historias intercaladas, el pasado y el presente.
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La lluvia caía fuerte, creando profundos ríos que arrastraban el barro, las hojas y todo lo que hubiera por medio.

Yo corría por el bosque lo más rápido que podía, con las botas y los pantalones embarrados, totalmente empapada por la lluvia, mi pelo mojado se revolvía por el movimiento dándome pequeños latigazo en la cara cuando volvía la cabeza hacia atrás. El cielo oscuro me dificultaba la visibilidad y la luz que desprendía la luna y las estrellas no era suficiente.

Mi único objetivo era llegar a un lugar seguro, traspasar la barrera.

Escuché los ladridos de los perros persiguiéndome, los gritos de los soldados ordenando que me atraparán. Pero yo seguía corriendo.

Hacia lo posible por esquivar los troncos de los árboles, apartar de mi camino todas las ramas y saltar las grandes piedras.

Vi por encima de la copa de los árboles la parte superior de Alfea. Pronto vi la gran puerta que ya había cruzado dos veces tiempo atrás. Sentí mi cuerpo traspasar la barrera. Ya estaba cerca, me quedaba poco.

Una flecha me pasó de largo muy cerca de la cabeza, llegué al portón del edificio y lo golpeé con fuerza para que me abrieran. Otra flecha se clavó en la madera, a pocos centímetros de mi.

- ¡ABRAN! - grité desesperada.

Por fin la puerta se abrió lo suficiente para que mI delgado cuerpo pudiera pasar. Caí al suelo derrotada por el cansancio.

- menos mal que has vuelto - dijo Farah cogiéndome de los hombros para ayudarme a levantar.

- ¿Dónde está Sky? - dije respirando agitada.

- te está esperando...

Caminamos por los pasillos hasta llegar al patio. Lo primero que hice fue caminar a paso rápido torpemente y abalanzarme sobre el chico rubio que me recibía con los brazos abiertos.

- déjala respirar, Sky, tiene que comer algo - dijo Farah pasando de largo hacia la cafetería. Volvió con un sándwich en una mano y una toalla pequeña en la otra.

Sky me ayudó a sentarme en un banco de piedra y no dejó de observarme hasta que terminé de comerme el sándwich.

- ¿Qué ha ocurrido? ¿Has podido verlo? - bajé la cabeza y negué contestando a la segunda pregunta.

- no llegué... Tuve un enfrentamiento con Bellatrix...

Rosalind y Bellatrix iban delante nuestra, yo caminaba en el centro del grupo, detrás estaban Riven y Dame.

Caminábamos por el bosque hacia algún lugar que yo desconocía.

Pronto, vimos delante nuestro, dos coches negros esperando.

- adelante, subid - dijo Rosalind con tranquilidad.

Me quedé parada en el sitio, no sé si estaba dispuesta a subirme en un coche desconocido, con una señora desconocida, hacia un lugar desconocido.
Al final, no fui yo que decidió si subía o no. Riven apareció por detrás, puso su mano en mi espalda y me empujó levemente, obligándome a caminar a su lado hacia el coche, luego me extendió una mano para ayudarme a subir.

- tranquila, no muerdo - dijo al ver que no sabía si aceptar su mano.

Riven subió detrás de mí en uno de los coches, en el otro coche se metieron Dane, Rosalind y Bellatrix, y lo agradecí, estar todos en un mismo coche hubiera sido muy incómodo, por lo menos para mí.

- no te despediste de Sky - dije después de que el coche arrancara. Él bajó la cabeza y luego la volvió va subir, evitando mi mirada y posando la en la ventana de su derecha.

- no hubiera sido buena idea - dijo con algo de tristeza, acerqué mi mano y la puse encima de la suya para brindarle apoyo.

Estaba claro que Riven y Sky eran como hermanos, seguro que no quiso despedirse porque iba a ser muy duro para él. Pero no me imagino lo que sentirá Sky cuando se de cuenta de que no está, y yo tampoco.

- ¿Cómo es que conoces a Rosalind? - dijo después de unos minutos en silencio.

- no la conozco, intenté frenar a Bloom para que no escapara, pero llegué tarde... - dije directa.

- ¿Y por qué te ha llamado Taliana? Quiero decir... Ya sé que ese es el nombre que utilizas cuando no te fías de la gente... ¿Pero por qué ella lo sabía?

- cuando estuve desaparecida, conocí a un hombre que decía ser el padre de Sky... - empecé a decir calmada, pero Riven me interrumpió.

- espera... ¿Has dicho el padre de Sky? - asentí - pero eso es imposible, su padre murió.

- ¿Su nombre era Andreas de Eraklyon? - pregunté, él asintió - entonces o es él, o alguien que se ha puesto algo para parecerse un huevo a Sky y me ha dicho un nombre falso. - me alegró ver cómo había conseguido que soltara una pequeña sonrisa.

- ¿Por qué estás aquí? En fin, en Alfea tienes a tu hermana, a tus amigas, a tu novio... ¿Por qué has decidido venir con nosotros?

- no es algo que haya decidido yo, Riven. Mi hermana me ha repudiado cuando le he dicho que yo mate a nuestra madre... Y en Alfea no estoy a salvo, Farah y Silva han intentando matarme.

No me di cuenta de cuánto tiempo llevábamos en el coche cuando éste frenó. Vi como los del coche de delante bajaron y Riven y yo hicimos lo mismo.

- ¿Solaria? - murmuró Riven confundido.

Caminé junto a Sky hacia mi habitación, necesitaba una ducha pronto, o cogería un resfriado.

- ¿Sabes algo de tu hermana? - me preguntó Sky mientras entrábamos a mi habitación.

- lo que tú ya sabes, está en casa de Bloom - dije algo triste.

Me dolía que todavía no perdonara.

- deberías haberle contado lo que te pasó - insistió Sky de nuevo. Suspiré cansada.

- Sky, ha lo hemos hablado muchas veces, no voy a decírselo, no quiero que el saber que estuve a punto de morir esa noche sea la razón de su perdón. - dije entrando en mi habitación, Sky se quedó fuera, me quité la camiseta mientras hablaba con él a través de la puerta.

- ¿Y le has dicho por lo menos lo que está pasando ahora?

- no, no quiero preocuparla, dejaré que tenga unas vacaciones tranquilas y felices con sus amigas.

- deberías decírselo, no le gustara enterarse de lo que estás pasando tanto tiempo después... - abrí la puerta de mi habitación y le miré directamente, él estaba sentado en el sofá, y yo, de pie en sujetador.

- no sabía que eras un experto en mi hermana - dije alzando las cejas.

- no lo soy - dije con cara de inocente.

- mira, Sky, sé que lo dices por qué te preocupas y eso... pero como no tienes ni idea, no te metas entre mi hermana y yo y déjame resolverlo sola.

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Siento haber tardado tanto, espero que os haya gustado.
Por si no habéis visto la publicación en mi tablero de conversaciones...
Solo voy a escribir las vacaciones de antes del siguiente curso, esperaré a que publiquen en Netflix la segunda temporada para hacer aquí.