La alarma sono en la mañana de un viernes soleado, la luz de el sol entraba por las cortinas de aquella habitación mientras una rubia se frotaba los ojos, despertandose.
Una pelinegra se encontraba lavandose los dientes en el baño.
— Buenos días, ¿despertaste bien? — le pregunta la azabache.
Caminó para salir de el cuarto de baño para abrir las grandes cortinas de la ventana.
— Hola, buenos días Mikasa, la verdad si dormí bien, tu cama es muy cómoda. — río y se sentó en la cama cubriéndose con la sabana su cuerpo desnudo.
— Me alegro, y la verdad ya tenía pensado despertarte, hay clases, ¿tu no tenías hoy también?. — echo todas sus cosas en su mochila mientras se ponía su chaqueta.
— Oh, yo la verdad tengo clases hasta en la tarde, quedé con Reiner y con Ymir a salir un rato.
— Bien, cuidate y cierra bien la puerta al salir, tengo que irme.
Mientras decía aquello se amarraba los cordones de sus botas sentada en una esquina de la cama, por lo cual la rubia se acercó y la abrazo por detrás.
— ¿Ya te vas?, ¿tan pronto? — hizo un pequeño puchero. — quedate un rato más, así te preparo el café que tanto te gusta.
La contraria tiro una risa nasal al escuchar la propuesta de su acompañante.
— Historia, desearía, pero tengo que irme rápido o llegare tarde a la clase, tal vez en otra ocasión, tu siempre siendo tan linda, pero igual gracias. — dijo esto levantándose sin antes darle un corto beso a la ojiazul.
— Si si, rechaza mi oferta otra vez, seguro prefieres los cafés de Pieck o de Marco que sabe cocinar ¿verdad?, ya lo sospechaba, ¿o prefieres a Hitch?. — frunció el ceño entrecerrando los sus ojos.
Mikasa sabía que a veces Historia bromeaba con esos asuntos, pero esta vez por cómo habló y su actitud no lo vio como una broma, cosa que no le agrado.
—No me digas que vas a empezar con celos, bueno, eres the queen of drama, no debería de sorprenderme. — tiro una carcajada.
Historia le tiro una almohada, sus ojos azules ya no parecían tan cálidos como siempre.
— Oye, no te enojes, no deberías y no tienes derecho a celarme, te recuerdo que no somos nada, al igual que con los demás no es nada más que algo casual, yo no te ando celando cuando te enrollas con algún otro chico ¿no es cierto?.
— Eso fue duro. — se limitó a contestar.
— Así es esto, tu aceptaste y aquí estás por incontable vez en mi cama y en mi apartamento, así que por favor ahorrate todo eso, no me gustan ese tipo de sentimentalismos y lo sabes.
— Si, aja, como sea, solo hice ese comentario, tampoco te pongas de amargada, por Dios...
— Bien, solo no olvides cerrar las ventanas y la puerta, ¿te veo en estos días?.
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𝙎𝙄𝙉 𝘾𝙊𝙈𝙋𝙍𝙊𝙈𝙄𝙎𝙊 ᴱʳᵉᵐⁱᵏᵃ
Fanfiction࿈ Tener relaciónes casuales es algo que le sienta muy bien a Mikasa Ackerman, chica universitaria de 19 años, el amor es algo incongruente y disparatado para la azabache, pero llegó al punto que sólo sin darse se sumergió en unas piscinas de verde e...