Juego del Destino

CAPÍTULO 9

CAPÍTULO 9:

"UN ENCUENTRO CON DISCORDIA"

Una hora después, Rhun terminó su labor y bajó hacia las barras antes de retirarse.
-Disculpa, ¿me puedes servir un vaso de Wisky con hielo?-.
-Sí, claro-. Respondió el barman.
En eso, se acerca un chico menor que él.
-¿Qué se te ofrece?-. Preguntó Rhun indiferente.
-¿Puedo sentarme?-.
-Como quieras-.
Mark se sentó a su lado y pidió una cerveza. Luego, volteó hacia donde estaba el chico mayor y comenzó a hablar.
-Lo haces muy bien-.
-¿Qué cosa?-. Respondió el mayor.
-Tu trabajo-.
-Oh, gracias-.
Rhun respondía las preguntas del chico mientras recibía su pedido.
-Oh, que soy descortés. Soy Siwat Jumlongkul, pero me puedes llamar Mark-.
El otro chico respondió con sorpresa al escuchar el nombre del menor.
-¿Jumlongkul? ¿Dijiste Jumlongkul?-.
-Sí, claro. ¿Por qué? ¿Hay algún problema?-.
-Tu hermano es Mix-.
-Exactamente. Y tú eres el hermano mayor de P'Gun, ¿no es así, P'Rhun?-.
-Sí, soy yo-.
-Pues entonces, tenemos una conversación pendiente-.
-¿Qué se supone que tenemos que conversar?-.
-Nuestros hermanos están saliendo, pero mi hermano me pidió que enamorara a tu hermano para que así ellos terminaran y P'Mix podía ser libre de irse contigo. ¿No es esa razón suficiente para conversar?-. Dijo Mark con actitud.
-Bien, si lo pones de ese modo, tienes mucha razón. Tenemos que conversar. También aprovecharé de dejarte las cosas en claro-. Amenazó Rhun.
-Pues, te escucho-.
-Mi hermano es lo más preciado que tengo en mi vida, y no voy a dejar que ningún mocoso estúpido venga a hacerle daño, ¿entendiste?-.
-¿Me estás llamando mocoso estúpido?-.
-¿Tú qué crees?-. Dijo irónicamente Rhun.
-¿Y tú acaso no piensas que también estás metido en todo esto?-.
-Yo no estoy de acuerdo con esto y se lo dije a tu hermano-.
-¿Y qué has hecho con respecto a esto?-.
Rhun no pudo debatir aquellas palabras, porque, sin duda alguna, eran ciertas. Conoce muy bien la situación, sin embargo, ha guardado silencio.
En el fondo de su corazón, deseaba que Gun girara su corazón hacia otro lado, pero esperaba que esa persona también lo amara.
Ante el silencio de Rhun, Mark continuó.
-De todas formas, P'Gun no saldrá lastimado-.
-¿No? Entonces, dime, ¿qué pasará si tu plan da resultado? ¿Te vas a quedar con él? ¿Tienes planes de tener una relación con él?-. Le dijo Rhun con una mirada desafiante.
-El amor no es lo mío, nunca lo he sentido, así que paso con eso-.
-¿Entonces, qué estás haciendo?-.
-Estoy haciendo todo esto por mi hermano, y de pasada te ayudo a ti. Porque también quieres estar con mi hermano, ¿o me equivoco? -.
-No estamos hablando de mí. Lo único que me importa es mi hermano-.
-Escucha, cuando P'Gun se aleje de mi hermano, le encontraré a alguien que sí le guste-.
Al escuchar las palabras de Mark, Rhun no pudo ocultar su ira. Era como si un volcán estuviera por erupcionar dentro de él, al sentir que su hermano estaba siendo tratado como un objeto que pasaría de mano en mano.
-¡Eres un maldito imbécil!-. Respondió Rhun.
-Oh, cuidado P'Rhun-.
-Termina con esto ahora-.
-No me lo digas a mí, yo sólo cumplo órdenes-.
-No sé qué pretenden ustedes dos, sólo te advertiré que, si hermano sale herido con todo esto, te voy a matar-.
Mark rió haciendo caso omiso de la amenaza de Rhun.
-Entonces, no estás enamorado de mi hermano-.
-A ti no te interesa lo que yo sienta-.
-Déjame ver ti te entendí. Estás enamorado de mi hermano y quieres estar con él, pero no quieres que el plan de P'Mix para que ustedes estén juntos se lleve a cabo por temor a que tu hermano salga herido, ¿es así?-.
Hartado de la conversación, Rhun dio la última advertencia antes de marcharse.
-Te lo vuelvo a repetir. Si mi hermano sale herido, te voy a matar, así que no te metas con él, ¿lo entiendes?-.
Dejó atrás al chico que reía irónicamente, puesto que la conversación había quedado un poco furioso por aquellas amenazas del hermano de Gun. También, el hecho de que Rhun no haya aclarado qué era lo que quería hacer con respecto a este triángulo amoroso, lo dejó descolocado.
"No me vas a hacer que me aleje de P'Gun, ya comencé a jugar. No me asustas, P'Rhun" pensó.
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Al otro día, Mark se levantó muy tarde, aprovechando que era día domingo, y se fue en busca de algo para desayunar. Pasó por la sala donde estaba su hermano, leyendo un libro.
-Mira la hora que es. Recién vienes despertando. Debes regresar al condominio y prepararte para las clases de mañana-. Regañaba Mix.
-Lo sé, pero no pude dormir muy bien-.
-¿Y eso por qué?-.
-Anoche tuve un pequeño desliz con un chico-.
-No me digas que ya estás coqueteando con chicas o chicos que tienen novios y ellos te atacaron-.
-No, es eso...-.
-Entonces, ¿qué pasó?-.
-Ayer conocí a tu amorcito-. Respondió Mark mientras se encaminaba hacia la cocina.
Mix se levantó inmediatamente y lo siguió hasta el lugar.
-¿De quién estás hablando?-.
-¿Cómo de quién? De P'Rhun-.
-¿Y qué pasó? ¿Te dijo algo?-.
-El muy idiota me amenazó. Quiere que detenga tu plan-.
Mark le comentaba lo que pasó anoche, mientras se sentaba a comer un tazón de avena que se había preparado.
-¡Mierda! Y tú no estás avanzando mucho-.
-¿A qué te refieres?-.
La historia de Mark con P'Rhun resonó en la mente de Mix, quien recordó las palabras de su novio el día anterior. Las cosas no estaban funcionando bien, y cada vez la situación en su corazón se hacía más compleja.
Si tan sólo pudiera escuchar la palabra "romper" de los labios de Gun, todo este embrollo acabaría lo más pronto posible. Pero esa situación tal parece estaba lejos de suceder.
-Ayer, Gun me dijo que al estar contigo, pensaba en mí, ¿Te das cuenta lo que eso significa?-.
Algo hizo temblar el corazón de Mark cuando oyó esas palabras de su hermano mayor. Se sintió algo incómodo y molesto.
-No, y realmente no me interesa-.
-¿Cómo puedes decir que no te interesa? ¿Sabes lo que significa? Que tus métodos no están funcionando, y cada día que avanza, se vuelve más complicado-. Respondió Mix con molestia.
-Primero habla con el idiota de P'Rhun para que no abra la boca-.
-¡No vuelvas a hablar así de él! ¡Te lo prohíbo!-.
-...-.
El grito de advertencia de Mix sorprendió completamente a Mark, ya que nunca su hermano le había alzado la voz de esa forma.
-Lo siento, hermano. No quise gritarte de esa manera-.
-Sólo habla con el chico. De P'Gun me encargo yo-.
Mark se levantó de la mesa y se retiró sin nada más para decirle que la última frase.
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El día lunes, en la facultad, Third y Gun esperaban sentados en el salón en espera del profesor de materia.
-¿Y bien? ¿Cómo estuvo la cita del día sábado?-. Preguntó Third.
-Bien, estuvo tranquilo-.
-¿Sólo eso?-.
-Sí, en realidad no tengo mucho que decir. Sólo que hubo un beso de por medio, que me corroboró lo que mi cabeza pensaba-.
-¿Me estás hablando de lo que me contaste ese mismo día en la mañana cuando íbamos al trabajo?-.
-Sí. Realmente no se si está bien lo que mi corazón está sintiendo-.
En ese momento, el profesor de clases entre, interrumpiendo la conversación.
-Lo único que te puedo decir es que si tu corazón ha comenzado, debe continuar. No puedes detenerlo-.
-Ya lo sé. Estoy consciente de ello-.
-De todas maneras, tienes mi apoyo incondicional.
-Gracias amigo-. Respondió Gun.
Cuando el profesor comenzó su cátedra, el celular de Gun comenzó a sonar, en señal de que le habían mandado un mensaje.
"Me gustaría saber si quisieras tomar un café conmigo esta tarde, después de clases"
El dueño de aquel mensaje no era nadie más que Mark, que comenzó a poner en marcha la segunda etapa de sus tácticas de conquista.
Gun no esperó para responder el mensaje y lo hizo de inmediato.
"Sí, me encantaría. Además, ya tengo el segundo pago de tu chaqueta. Te lo entregaré hoy"
"De acuerdo, saldré de clases a las 5 p.m. ¿y tú?"
"A las 6 p.m."
"Bien, entonces, pasaré por ti a la facultad"
"Tengo auto"
"Entonces, ¿puedo pasar por ti al condominio a las 7 p.m.?
"De acuerdo"
-Señor Na Ranong, ¿está muy entretenida la conversación para que no preste atención a mi clase?-. Habló el profesor.
-Lo siento, señor-.
-Si tiene muchas ganas de continuar, por favor retírese de clases para que no distraiga a sus demás compañeros-.
-No, señor. Guardaré enseguida mi teléfono-.
La conversación dio por finalizada y la clase continuó hasta una hora después donde dieron paso a un receso.
Los chicos fueron a la cafetería a comer algo y así hablar más tranquilamente.
-¿Qué era eso tan entretenido que te tenía totalmente concentrado?-. Preguntó Third mientras colocaba unos tazones de chocolate caliente.
-Mark me invitó a una cafetería hoy en la tarde-.
-Vaya, tenemos una segunda cita-.
-No es como una cita, sino que ya he juntado el dinero para pagarle la primera cuota de su chaqueta, así que se lo daré hoy mismo. Será como una reunión de negocios-.
-Ya veo-.
Gun toma un sorbo de su chocolate, pero lo deja inmediatamente cuando comienza a sonar su teléfono celular.
-¿Hola?-.
-Hola, P'Gun, ¿te molesto?-. Preguntó el chico que estaba del otro lado del auricular.
-Mark, eres tú. Por supuesto que no, ya estoy en receso-.
Gun cambió su tono de voz a una más alegre luego de escuchar la voz del chico menor.
-Sólo quería comentarte que me regañaron por estar hablando contigo a través de LINE-.
-Qué coincidencia, a mí también me han regañado-.
Ambos chicos se echaron a reír por aquella situación ocurrida en en la sala de clases.
Estuvieron un poco más de un minuto hablando de lo cotidiano, hasta que Gun fue interrumpido por su amigo Third, quien le señaló que debían irse a la segunda clase.
-Entonces, ¿irás por mí al condominio a las 7?-. Preguntó Gun.
-Sí, claro. No quiero que estés apresurado, así que te daré una hora para que puedas arreglarte-.
-Bien-.
-Oh, espero que no huyas de mí. Estaré puntual-.
-No te preocupes, no me iré con tu dinero-.
Mark respondió con una frase que lo dejó completamente congelado.
-No me interesa el dinero. Lo que me interesa, eres tú. Quiero verte a ti-.
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