Sus ojos se posaron frente a la pantalla, evitando la vista de Mark, quién había volteado a verle.Quizá está siendo demasiado obvio.
Ambos estaban sentados en el sofá, mirando una película, en casa de YuGyeom, pero el menor no era nada discreto y le lanzaba algunas miradas demasiado obvias delatando lo débil que era ante él.
Mark regresó la vista a la tele, fingiendo no haber visto nada.
Ambos sentían cierta incomodidad flotando en el aire, siempre era así, pero ningún se animaba a hacer algo para quitarla.
JaeBeom, el hermano del menor entró a la sala, sosteniendo un bote de palomitas recién hechas, tendiéndosela a su novio, al tiempo que se inclinaba y depositaba un beso en los labios de su pareja.
Tomó asiento en el medio de ambos.
—¿Ha pasado algo interesante? —preguntó a ambos, los cuales simplemente negaron con la cabeza.
JaeBeom y Mark tenían un par de meses saliendo, nada serio, había pasado de la nada, Tuan estaba siendo su tutor, y JaeBeom simplemente un día se confesó.
La película siguió, cada uno metiéndose en su propio mundo, JaeBeom recayendo sobre el hombro de Mark y este rodeándolo con su brazo, Kim por su lado forzándose a no apartar la vista de la pantalla.
¿Cuándo había sucedido? No lo sabía, no sabía en qué momento comenzó, no estaba consciente de aquel mágico momento en que se dio cuenta que estaba enamorado del novio de su hermano.
A YuGyeom siempre le había dado igual, Mark era alguien común, alguien que siempre perteneció a sus vidas, crecieron en el mismo vecindario, y de pequeños habían sido muy unidos.
Algo muy normal, Kim nunca lo miró más allá de alguien conocido, un amigo de la familia, alguien que le agradaba medianamente e invitaban a comer cuando sus padres debían ir a Estados Unidos.
Mark no era especial, pero de un momento a otro, todo eso cambió.
Lo veía con regularidad, cuando le daba algunas clases de regularización a JaeBeom para poder hacer el examen de ingreso a la universidad, Mark era un año mayor que su hermano, así que, él ya estaba en la carrera cuando Jae buscaba una manera de ingresar.
Lo veía a diario meterse al cuarto de su hermano mayor, casi siempre permanecían en silencio, pero a veces, la risa del mayor destellaba en toda la casa, como la de un infante, llena de vida, dulce y hermosa.
Los dos estaban enamorados de Tuan, pero sabía que quien tenía la batalla ganada era el de cabellos largos, Mark le quería a él.
Recordó aquella vez, cuando eran un par de niños, YiEn siempre era el líder, el mayor, quién sabía qué debían hacer, cómo hacerlo y los dirigía siempre al camino correcto o incorrecto.
YuGyeom quizá tenía seis años, un poco más un poco menos, recordaba que estaba enamorado de un niño de su grado y Mark con una sonrisa le enseñó lo que debía hacer.
Tuan era así, como un maestro, no solo uno de vida, un maestro en cualquier ramo, cualquier cosa, una duda mínima y el mayor tendría la respuesta.
Quizá debía aplicar esas lecciones de nuevo con esos sentimientos, confesarlos, tener una respuesta negativa y dejarlo ir, como el viento, seguir adelante, ya no habría más.
La película pronto terminó, junto con ella los rayos del día desaparecieron, y ahora el atardecer estaba en transición para dar paso a la noche oscura y larga.
—Creo que debería irme. —los ojos de Mark miraron a su novio, el cual había quedado dormido en sus brazos.
El menor de los Kim miró a Tuan y este lo hizo de vuelta, por primera vez dejando que sus ojos se conectaran por un largo instante, dejándolo sin palabras, como si los ojos de Mark fuesen una piscina y pudiese hundirse en ellos, nadar y vivir plácidamente en esa tranquila mirada.

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ENSÉÑAME;; markgyeom
Fanfiction"-¿Cuándo creciste tanto Gyeom?" "-Cuando me enamoré de ti."