ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 15

621 33 49
                                    

—Emma, ​​sé cortés. —Roger le recordó a su hija por enésima vez desde que subimos al auto.

Nos detuvimos en su automóvil fuera de la casa de mi infancia, y deseé estar en otro lugar, en cualquier otro lugar.

—Y Theo —se volvió en su asiento para mirar a su hijo, que se estaba divirtiendo con una de las viejas muñecas Barbie de Emma —asegúrate de hacer exactamente lo que te dicen, ¿de acuerdo?

—Estarán bien, Rog —le aseguré, colocando una mano sobre la suya, que aún descansaba sobre la palanca de cambios entre nosotros.

—Son buenos chicos.

—Simplemente no quiero que te avergüences de nosotros. —Roger murmuró.

—Nunca podría avergonzarme de ustedes. —Le prometí con sinceridad. —Te amo, ¿recuerdas?

—Oh, sí —sonrió con satisfacción— me olvidé de eso.

—Seguro que lo hiciste. —Sonreí con satisfacción, salí del auto y me acerqué al asiento detrás de Roger, saqué a Theo de su asiento y lo dejé en el camino. Señalé hacia la puerta —Theo, espéranos en el escalón, ¿de acuerdo? Solo será un momento.

Theo asintió y se apresuró por el sendero. Me volví hacia Roger, que estaba de pie a mi lado, junto Emma a su lado.

—¿Listo?

No le había mencionado mucho sobre mi antigua casa, pero sabía que él entendía que existía una razón por la que no había hablado mucho de ella y me había mostrado reacia a volver.

Me tomó de la mano y caminó conmigo por el sendero, Emma siguiéndonos. Nos unimos a Theo junto a la puerta y Emma estaba detrás de él, frente a nosotros.

Llamé a la puerta.

—¡Sarina! —Mi madre la abrió, diciendo mi nombre como si se sorprendiera de verme.

—Madre —dije, con mucho menos entusiasmo— He traído a Roger conmigo, tal como me lo pediste —le hice un gesto a Roger, que todavía sostenía mi mano.

—Es precioso, cariño —dijo— ¿y quiénes son estos dos pequeños? —Miró a Emma y Theo, quienes la miraban intensamente.

—Ella es Emma, ​​y ​​él es Theo. Son los hijos de Roger.

Roger soltó mi mano, dio un paso adelante y le tendió la mano a mi madre.

—Es un placer conocerla, Sra. Charleston. Roger Taylor a su ...

—¿Roger Taylor? —Ella entrecerró los ojos. —Me suena familiar.

—Yo, um... —Lo miré por el rabillo del ojo y vi que estaba luchando.

Pero literalmente no había nada que pudiera hacer para ayudarlo.

—Sí, señora. Estoy en una banda llamada Queen.

—¿Queen? —Ella repitió. Roger asintió.

Era tan adorable lo dulce y educado que estaba siendo con mi madre, quien era solo tres años mayor que él.

—Eres un poco mayor, ¿no?

—¿Para estar en Queen? —Roger preguntó en un tono de voz confuso.

Sin embargo, me di cuenta de inmediato de lo que intentó decir mi madre.

—Roger me hace feliz, madre. —Respondí, sabiendo que se refería a la diferencia de edad de Roger y la mía de casi dieciocho años.

—¿No estás feliz por mí?

—Lo estoy, cariño. —Ella respondió, sonando cansada y despreocupada en lugar de sincera.

Daddy┃Roger Taylor [Traducida al Español]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora