Aunque nos separemos, siempre estaré cuidándote

Capitulo 05

En este capítulo acompañaremos a Mei en su investigación, ¿lograra encontrar alguna pista o no?

Había pasado una semana, Mei no había empezado a investigar, el mundo había coordinado para que tenga una fila de documentos delante de ella.

Había acabado el trabajo temprano, quería empezar cuanto antes, pero no sabía por dónde comenzar, ella no era buena con la tecnología, a su madre no le podía pedir ayuda, entonces su única opción sería su única amiga, la que estuvo con ella desde niñas. Para desdicha de la pelinegra, Yuzu la ignoraba en el colegio, pero en casa hablaban normal, bueno cuando estaba su madre, así que por primera vez agradeció a Yuzu, podía hablar con su amiga sin interrupciones.

- Himeko...

- Oh Mei Mei...dime

- Quisiera que me ayudaras en algo, no sé si el sábado podría ir a tu casa

Himeko se sorprendió, se sintió muy feliz a tal grado de lanzarse a darle un abrazo a Mei

- Por supuesto Mei-Mei

Coordinaron la hora y Mei se dirigió a casa, cuando entro escucho jadeos, se asustó "será un ladrón", se preguntó mientras cogía algo para protegerse, cuando identifico de conde venia el jadeo, se asustó, venia de su habitación, era todo, abrió la puerta y para su sorpresa era Yuzu que estaba haciendo ejercicio, más específico planchas.

- Mei... - dirigio su mirada al objeto que tenía en las manos - ¿Qué haces con ese florero?

- ...Pen-pensé que era un ladrón

- Lo siento por asustarte, como siempre llegas más tarde

- ...Ya acabé el trabajo...por cierto que estabas haciendo

- Uhmm ejercicios, cuando me mude ya no lo hacía a menudo, no quiero oxidarme – sonrió como siempre

Mei siento algo, no sabía que era, pero ya lo había sentido antes, se negó en pensar de más, primero era investigar sobre ella

- Ya veo, no te esfuerces mucho Yuzu

Con eso dicho, se dirigió al baño a cambiarse de ropa.

Era la hora de la cena, Yuzu cocino y cuando estaban por cenar, tocaron la puerta

- ¿Esperas a alguien Yuzu?

Yuzu se negó y Mei también. Yuzu soltó de suspiro y le dijo a su hermana que se quede ahí ella iría a ver, obvio que la pelinegra no obedeció

- One- chan!!!! – se puedo escuchar

- Mat-Matsuri

Mei se dirigio a ellas, y vio como Matsuri abrazaba a Yuzu

- Que haces aquí Matsuri – le reprendió Yuzu

- Oh vamos One-chan, me debes un favor...por lo último – con lo último le guiño el ojo

- ¡¡

Mei se percató de eso, se sentía como esa vez que vio como la pelirrosa besaba a Yuzu, simplemente regreso a la mesa. La cena no fue disfrutable para la pelinegra, veía como Matsuri se apegaba a Yuzu, hablaban algo que no entendía sobre tres personas que posiblemente no estén en el país, no estaba de humor para escuchar más. Termino de comer y se fue a su habitacion

Llego sábado, un carro vino a recogerla y la llevo a la casa de Himeko, era una mansión, como el de su abuelo, hace tiempo que visitaba a su amiga