Única parte.

271 26 70
                                    

SECUELA de "Love You Goodbye", antes de leer este OS tienen que leer ese para entender, se encuentra entre mis obras.

6717 palabras.

[...]

Fueron dos años realmente difíciles para Harry. Los primero meses se la había pasado en cama siendo prácticamente mantenido por Niall.

Cuando Louis se fue de la casa la última vez que lo vio, Harry se había echado a llorar mientras buscaba su teléfono con desesperación, en un momento se había frustrado por no encontrarlo y terminó tirando la mayoría de cosas que tenía a su alcance, floreros, cuadros, adornos, todos cayendo al suelo y haciéndose trisas. Había dejado un completo desastre para cuando se terminó quedando en una esquina de la sala, sentado con su rostro entre sus rodillas y sus brazos rodeando éstas fuertemente, en ningún momento dejando de llorar.

Ese mismo día Niall fue a verlo por casualidad, literalmente. No fue necesario que tocase la puerta porque tenía su propia llave por las dudas. Había entrada con una pequeña sonrisa que no duró mucho en desaparecer al ver todo el desastre en el living de su mejor amigo. Caminó tratando de no tropezarse con ningún objeto -o pequeños pedazos de esos objetos-; no le fue difícil visualizar a Harry en un rincón de la habitación para acercarse rápidamente a él y rodearlo con sus brazos de manera protectora.

- Harry, hey, Hazz, ¿Qué pasó? -preguntó alarmante al escuchar los fuertes sollozos del chico. Éste no respondió, se pegó más al agarre de su amigo y se limitó a llorar más fuerte- Shh, tranquilo, aquí estoy Hazz... -murmuró besando su coronilla.

- Se fue, m-me dejó. -murmuró entre llantos.

Niall teniendo una idea de lo que a Harry se refería, lo abrazó más fuerte- Está bien, cariño, te entiendo.

Esa noche se quedaron horas en la misma posición hasta que el menor se calmó un poco. A Niall no le importaba acalambrarse si eso significaba darle a Harry lo que más necesitaba en esos momentos: un abrazo y palabras consoladoras. Cuando tuvo la oportunidad ayudó al chico a levantarse y llevarlo a la habitación. Él mismo se encargó de sacarle la ropa y a excepción de su ropa interior y meterlo debajo de las sabanas. El rizado no tardó en dormirse luego de haber estado llorando por horas.

Al día siguiente Niall seguía ahí, había dormido en la habitación de invitados por las dudas. Le había hecho el desayuno pero Harry no lo comió, era como si hubiera entrado en una clase de shock, mirando fijamente un punto fijo de sus sabanas y muy rara vez parpadeando. Fue muy difícil hacerlo hablar, pero el rubio se conformó con lo único que dijo: "Louis terminó conmigo".

A partir de ese día Niall se había prácticamente mudado con Harry. Quería cuidarlo porque sabía que si fuera por él no se levantaría de la cama ni porque ésta tuviera pulgas. Fue así por meses, él mismo bañó a su amigo, lo alimentó y lo consoló cada vez que lloraba.

Pero un día Niall se cansó y lo enfrentó.

- Es suficiente, Harry -habló alzando un poco la voz, se acercó a la cama y destapó a su amigo-. ¡No puedes estar así toda tu vida!

- Déjame, Niall. -murmuró el menor, tratando de volver a taparse.

- No, Harry, no. Esto no es correcto para ti, no es justo que te estés haciendo esto -siguió hablando, ésta vez en un tono más dulce. Se sentó a un lado de Harry y tomó sus manos-. Hace seis meses estás de ésta forma, ¿Esto es lo que quieres? -vio como Harry se encogió de hombros sin mirarlo en ningún momento a los ojos- Está bien, pero yo no lo quiero. No puedo soportar que cada día estés más bajo de peso porque no quieres quieres comer, o que cada vez tengas menos fuerza porque no quieres siquiera caminar por tu casa, ¡joder, Harry! ¿Puedes ponerte un minuto a pensar en el dolor que le estás causando a las personas que te aman? ¡Ni siquiera quieres hablarle a tu madre! Ella está tan preocupada, ¿Eso no te importa ni un poco?

too young [l.s] os ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora