Entre Vendas y Listones. (Serie de One Shots)

Bailarina. 🔞

- 🔞⚠  Advertencia: Historia que contiene lengua vulgar, obsceno, sexo explicito. En fin, todo lo que un menor de edad no debería leer.⚠🔞

-Esta vez no podía dejar pasar lo pegada que tengo esta canción sumado a muchos videos de tik tok que he visto de personas bailándola y bueno... nació esto.

-Vuelvo a repetir que hay contenido  🔞🔞

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-¡Y uno, dos, tres, cuatro y arriba!- pudieron escuchar alrededor de aquel salón- No, no, lo están haciendo mal.

Llevaba toda la mañana ensayando saltos, vuelta tras vuelta y su maestra solo estaba cada vez más molesta con todo mundo allí exceptuando su alumno estrella. Sus pies dolían como si estuviera pisando vidrios rotos y la cara de superioridad de ese tarado no hacía más que irritarla.

-Bien, hemos terminado por hoy- comenzó a decir la arrugada mujer –Utahime... hoy estuvo terrible- le comento cruzándose de brazos y mirándola de manera reprobatoria para luego girarse en la misma posición para mirar a cierto peliblanco- Satoru tu estuviste maravilloso como siempre, tan ligero como una pluma. Pueden retirarse.

La azabache practicaba ballet desde los cinco años aproximadamente, pero siempre por alguna u otra razón nunca conseguía papeles principales, siempre era una más en el fondo, siempre siendo criticada por sus maestros y maestras sobre todo cuando Gojo Satoru entro en la compañía en la que ella bailaba, un tipo proveniente del extranjero cuyo encanto más destacable era la labia con la que conseguía poner a las personas en su bolsillo.

Sin duda él era un tipo talentoso, el mejor bailarín que Utahime había visto jamás, pero todo aquello solo era enlodado con esa personalidad de mierda que no le mostraba a todo mundo y que le encantaba mostrarle en especial a ella.

-No te preocupes, encanto- tomo su mentón entre sus dedos pulgar e índice provocando que la azabache golpeara su mano- No es tu culpa tener falta de talento, pero...- acomodo sus lentes oscuros- Tampoco te esfuerzas lo suficiente.

-No me trates de manera condescendiente y tampoco me digas tus opiniones porque no recuerdo haberlas pedido- se hizo a un lado para ir a darse una ducha y marcharse a casa.

-Deberías aceptar mis sugerencias, soy el más indicado para guiarte.

-Y yo soy la más indicada para dejarte mi zapato metido en el culo y sin embargo no lo hago –le sonrió de manera cínica- Disfruta el poder regodearte en los halagos de una mujer que claramente ansia llevarte a la cama.

-¿Dices que mi talento no es suficiente para recibir esos halagos y solo los recibo por el interés romántico erótico de la maestra? Eso habla muy mal de ti, Utahime, la envidia no es buena.

-No te envidio y claro que eres talentoso, pero no puedes negar que captas esa tensión que pone ella sobre ti cada vez que te habla o te mira.

-¿Y estas celosa?

-La idea de apretarme los dedos contra la puerta pasa más seguido por mi mente que algún sentimiento de celos por ti- genuinamente la hizo reír con su comentario- No eres irresistible Satoru Gojo – esta vez fue ella quien tomo su barbilla y se acercó de puntillas para susurrar sobre sus labios- Solo eres un petulante de mierda que le sienta muy bien este lugar.

-Tu por el contrario no encajas para nada aquí- se acercó provocando que Utahime colocara ambos pies en el suelo arrinconándola contra la pared – Ni tu técnica en el baile, ni tu...- la miro como si pudiera desvestirla con esa simple acción- cuerpo- finalizó- Son aptos para el ballet.