Maite (Desgarrador#1 ✔)

Capítulo 22

DєԀıċѧԀѧ ѧ moʟʟʏɞєɞє813 єspєċıѧʟmєňţє, pєяo, mє ɢusţѧ Ԁєċıяʟє ҡѧяєň.  

Solo vez, lo que quiero mostrarte.

—No nos acostamos. —le aclaré lo que tanto lo traía loco.

Llevó una mano a su cintura mordiendo su labio inferior mirando hacia arriba, se estaba arrepintiendo de quién sabe que locuras había hecho o que ideas falsas se hizo de ella.

—Eres un desgraciado. —espetó molesto.

—Tú también.

Recogí el celular de Ángeles y seguido la tomé entre mis brazos.

—¿A dónde crees que te la llevas?—preguntó inmediatamente interponiéndose en mi camino.

—A su casa, deja de hacerte ideas locas que no la lastimaré, igual pronto despertará.

Iba a irme sin decirle nada más pero su rostro de susto me hizo tener algo de compasión y tal vez se lo debía.

—Estará bien.

Ángeles.

Las olas del mar se vuelven cada vez más intenso, casi llegando a mojarnos, él sonríe y lo imito, sus hermosos ojos azules me penetran pero lo disfruto. Ambos nos tiramos en la arena y nos revolcamos en ella como los dos niños que somos, de repente todo cambia, ya no hay sol, el cielo se nubla como si fuera a llover.

—¡Nos vamos Mite!—oigo a una mujer exclamar. Se acerca y lo toma de la muñeca para llevárselo.

Me paro de la arena inmediatamente mientras los observo. —¡Mite!

Mis padres al escuchar mi grito se acercan inmediatamente, era nuestras vacaciones en Alemania y lo disfrutaba.

—Mamá, ¿por qué se lo llevan?—pregunto y empiezo a chillar. Mite simplemente me sonríe y se deja llevar por su madre.

—Esa familia es muy extraña, cariño.

Miro mis pies y veo el dije de corazón, lo levanto para observarlo entre mi palma, levanto la mirada y veo la hermosa sonrisa de Mite.

Moví mis dedos y seguido abrí los ojos, de un lado estaba mi madre y del otro Sline, estaba confundida hasta que recordé todo.

Me incorporé de golpe y miré a mi madre.

—Mamá, papá tuvo un accidente me llamaron y...

Ella me interrumpió, se sentó al borde de la cama y tocó mi pierna.

—Tranquila, lo sé ya me avisaron. —dijo tranquilamente sobando mi pierna. —, tuvo un accidente automovilístico, pero no se sabe con exactitud como está.

—Quiero verlo. —pedí, lo quería, ¡lo necesitaba!

Se acercó un poco más.

—Lo harás pero hablemos de tu salud ahora. Angi, estás teniendo problemas respiratorios ¿te ha pasado antes?

Traté de recordar si me había sentido así antes, pero, no me acordaba de si alguna vez me pasó, solo una cosa.

—Solo una vez...sentí que tenía un peso sobre mi pecho, pero, eso no importa mamá, sino que papá nos necesita podría estar muriéndose ahora mismo.

—Lo sé, cariño, pero, tampoco puedo tomar a juego tu salud. Cuando te den las vacaciones de diciembre que para eso solo falta una semana irás a Boston con tu padre, ya no está en Alemania, luego cuando te regreses iré yo, ahora por favor cálmate.